El resultado electoral del 1 de julio pasado en el Distrito Federal dejó al PRI en un dilema: renovarse o morir. Aunque por naturaleza los grupos de poder deberían elegir la primera opción hacen hasta lo imposible por concretar la segunda.
Y es que los conflictos jurídicos, pugnas territoriales y señalamientos enmarcan nuevamente su vida interna, en esta ocasión, el proceso de renovación del Consejo Político Estatal, órgano encargado de nombrar a la nueva dirigencia y a los próximos candidatos a puestos de elección popular de 2015.
La pugna interna entre los sectores afines a la dupla Beatriz Paredes Rangel-María de los Ángeles Moreno y a su acérrimo rival, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre tendrá una nueva edición.
A ambos grupos no les bastó con desinflar las posibilidades de ganar varias delegaciones políticas, diputaciones locales y la jefatura de Gobierno del DF gracias a sus diferencias, como lo tenían proyectado.
Ahora, se alista para tomar el control del Consejo Político Estatal para desplazarse mutuamente del Distrito Federal.
La preocupación de ello se reciente en los nuevos liderazgos, tan así, que un grupo de priistas busca hacer el contrapeso; y ya prepara un exhorto para la dirigencia nacional del PRI.
La propuesta es sencilla: solicitar que desde el Comité Ejecutivo Nacional se nulifique a estos personajes: Cuauhtémoc, Beatriz y María de los Ángeles.
De acuerdo con el secretario de Acción Electoral del tricolor, Enrique Álvarez Raya, la militancia ya no puede seguir trabajando para que los líderes de siempre salten de un cargo a otro.
Este fin de semana se llevará a cabo la elección de los 500 nuevos consejeros políticos estatales, proceso que ya está impugnado, tiene severos cuestionamientos y advierte zafarranchos durante la jornada electoral.
La lucha por el control de la ciudad será intensa y disputada por cinco planillas, según la información de la Comisión de Procesos Internos del PRI-DF.
Pero solo dos de ellas tienen una fuerza real debido a la presencia que tienen en los órganos y sectores tricolores; los demás representan el interés de pequeños grupos o una opción alterna.
Está conformada de las siguiente manera:
1.- Planilla Roja. Es afin a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre.
2.- Planilla Fiusha. También responde a los intereses de éste político.
3.- Planilla Verde. Los liderazgos de María de los Ángeles Moreno y Beatriz Paredes se concentran ahí.
4.- Planilla Negra. Representa al grupo de la expriista Rosario Guerra y su agrupación Tercera Vía, a través de Javier Mendoza.
5.- Planilla Dorada. El grupo de aspirantes al consejo están dirigidos por la ex panista y ex legisladora Paz Quiñonez.
De acuerdo con fuentes consultadas al interior del PRI, las únicas dos que prácticamente tienen amarrado su registro para contender, debido a que cumplieron con todos los requisitos son la Roja y la Verde, las demás ya están en duda.
Por eso el grupo de Cuauhtémoc Gutiérrez y el de Beatriz-María anuncian que la lucha por el control del Consejo Político Estatal será intensa.
Al respecto, el diputado federal (Cuauhtémoc) asegura que tiene la estructura suficiente como para ganar los comicios de este fin de semana y acabar con los privilegios de sus adversarias.
Considera que hay opacidad en el manejo de las prerrogativas del partido y que eso ya no se puede seguir tolerando.
La postura institucional
Para Enrique Álvarez Raya no hay señalamientos que valgan en la restructuración del PRI. Sostiene que habrá conciliación entre los grupos que se disputan el DF.
Sin embargo, advierte que es tiempo de que las nuevas generaciones tomen el control del PRI en la ciudad.
“Es así, como sucede en el plano nacional, con Enrique Peña Nieto y algunos estados. Tenemos que dar espacios para nuevos líderes, que construyan un puente entre ambos bandos”.
En entrevista con Reporte Indigo, dice que su partido creció y tiene condiciones para despuntar en 2015, pero eso solo se logrará con la incursión de políticos con sangre nueva.
Sobre el tema, el especialista en Comunicación Política por la UNAM, Gerson Hernández, opina que aunque es necesaria la salida de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, María de los Ángeles Moreno y Beatriz Paredes, éstos no abandonarán el primer plano.
“Ya vimos el caso de Rosario Guerra y los golpes que recibió cuando quiso crecer al interior del PRI.
“Ese es uno de los escenarios más claro que tienen todos aquellos que quieren acabar con el reinado de estos personajes”.
De acuerdo a su opinión, ya está reflejado en las urnas el nivel de aceptación que tienen frente a la popularidad de Enrique Peña.
“Hay números muy claros. El problema está al interior y por esa razón el PRI no puede ser una oposición con posibilidades de sacar al PRD del Gobierno capitalino”.
Por último insiste en que el tricolor ha sido víctima de sus propios errores y ambiciones al no poder sacar candidaturas de unidad o desplegar un trabajo territorial.
El fiel de la balanza
Como sucedió en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) Joel Ayala será una pieza clave en este proceso interno.
La radiografía del priismo señala que a pesar de que Gutiérrez de la Torre cuenta con una mejor organización territorial, los sectores y organizaciones del PRI están partidos.
La CNC, la Organización Nacional de Mujeres del PRI (ONMPRI) y la Unidad Revolucionaria (UR) cerraron filas con Beatriz Paredes y María de los Ángeles Moreno.
Mientras que Cuauhtémoc Gutiérrez tiene el aval del Movimiento Territorial (MT) y del Frente Juvenil Revolucionario (FJR), por lo que la labor de ambos grupos está concentrada en la CTM y la CNOP de Joel Ayala.
El líder del Sindicato del Issste fue pieza clave en las negociaciones entre ambos bandos al interior de la ALDF y gracias a ello consiguió la coordinación de la bandada tricolor.
Aunque después la negoció y cedió a Israel Betanzos, pupilo de Cuauhtémoc Gutiérrez, la volvió a recuperar a principios de este año a través del líder de la CNOP Gilberto Sánchez Osorio.