La desaparición de tres personas originarias de Perú en el municipio de Atotonilco el Alto, en Jalisco, ha envuelto al gobierno estatal en un nuevo conflicto diplomático como el que enfrentó en el 2018, cuando tres ciudadanos italianos corrieron la misma suerte aunque en un lugar distinto: Tecalitlán.
La Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas de Jalisco, que encabeza Blanca Jacqueline Trujillo Cuevas, ha confirmado que tiene una indagatoria abierta por la desaparición de las tres personas, entre las cuales está Mary Lucero Mescco Molina, una joven de 25 años de edad.
La dependencia reporta que ha realizado diversos actos de investigación y labores de campo desde que se denunció la desaparición de las tres personas de origen peruano, así como de un mexicano que los acompañaba, en Atotonilco el Alto.
La denuncia se presentó el pasado 18 de agosto y hasta el momento se han realizado diversas entrevistas, de acuerdo con la información.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú, a través de su Cancillería, ya se pronunció sobre la desaparición de sus conciudadanos en tierras jaliscienses, asegurando que sigue de cerca el desarrollo de la indagatoria.
“Esta Cancillería y las citadas Oficinas Consulares vienen realizando un atento seguimiento del avance de las investigaciones, y mantienen comunicación directa con los familiares de la connacional desaparecida, quienes residen en la ciudad del Cusco“.
El fiscal, Gerardo Octavio Solís Gómez, señaló que los peruanos desaparecidos fueron detenidos por la Policía de Atotonilco entre el 13 y 14 de agosto, al parecer por haber cometido un robo y extorsión; sin embargo, dado que no se presentó denuncia en su contra, quedaron libres el 15 de agosto, último día en que se supo de ellos.
También informó que inicialmente las concubinas de los dos peruanos varones le brindaron a la Fiscalía nombres erróneos de éstos y dijeron que eran mexicanos, por lo que fue hasta que intervino el Consulado de Perú que se contó con datos correctos, además de que fue esta institución la que reportó que había una tercera desaparecida: Mary Lucero, quien los acompañaba.
Víctimas de desaparición desoídas
Al igual que la Cancillería de Perú, la Fiscalía de Jalisco aseguró que ha estado en contacto con los familiares de las víctimas peruanas, sin embargo, esto fue negado por la hermana de Mary Lucero, de nombre Mary Cielo.
Mencionó que desde el 13 de agosto no tienen la certeza de qué ocurre porque no tienen familia directa en México y que por terceras personas saben que fue detenida en la agencia mixta de ese municipio, se pagó una fianza de 60 mil pesos y no la liberaron.
“Y ya no supimos nada de mi hermana, después pagamos un rescate de 133 mil pesos que entregamos a un familiar del otro desaparecido y no la liberaron. Mi hermana tiene una hija que la extraña, y mi hermana solo fue de vacaciones y ahora no sabemos que las otras personas eran acusadas de estafar, pero pedimos que se dé con el paradero de mi hermana”, señaló.
Al respecto, el fiscal dijo que los 60 mil pesos le habrían sido pagados a una abogada que dijo que llevaría el caso; mientras que los 133 mil pesos le habrían sido entregados al novio de Mary Lucero, pues este habría afirmado que los tres peruanos estaban secuestrados y que él se haría cargo del rescate.
Caso italiano, aún pendiente
La desaparición de estas tres personas originarias de Perú vuelve a poner al Gobierno de Jalisco y sus instituciones de seguridad bajo observación diplomática, sin que se haya resuelto aún el caso previo de los tres ciudadanos italianos cuyo paradero sigue siendo hasta ahora desconocido.
Las víctimas italianas son Raffaele Russo, Antonio Russo y Vincenzo Cimmino, quienes desaparecieron el 31 de enero de 2018 en Tecalitlán, presuntamente a manos de agentes municipales que los habrían entregado a una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En este caso ha intervenido la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la cual emitió el 16 de marzo de 2018 una medida cautelar al Estado mexicano, para que adopte las medidas necesarias que determinen su situación y paradero.
Sin embargo, ni con esa intervención de la CIDH, ni con la detención de cuatro policías de Tecalitlán, se ha podido dar con su paradero..
En la denuncia que hicieron los familiares de los italianos ante la CIDH para solicitar su intervención, refirieron omisiones del Gobierno de Jalisco.
“Contribuyeron a la denegación de justicia e impunidad en la que se encuentran los hechos del caso”, se lee.
Este 14 de julio de 2020 se informó que la búsqueda de los italianos se había reactivado en Jilotlán de los Dolores y Tecalitlán, por parte de las comisiones Nacional y estatal de Búsqueda de Personas, derivado de la indagatoria que lleva la Fiscalía General de la República.