El Panal bajo la lupa

El Partido Nueva Alianza (Panal) en el Distrito Federal es otro brazo de la ex lideresa del magisterio, Elba Esther Gordillo, que necesita una revisión financiera a fondo.

La razón es que, en las campañas electorales de 2012, el partido erogó una partida menor a la que le entregó el Instituto Electoral del Distrito Federal.

Coinciden en esta cuestión ex candidatos a puestos de elección popular, como la ex priista Rosario Guerra Díaz, que contendió por la jefatura de Gobierno del Distrito Federal, y algunos aspirantes a diputaciones locales.

En entrevista con Reporte Indigo, Guerra afirmó que los recursos destinados a las campañas electorales en la capital fueron mínimos en comparación con los demás partidos.

Dijo que el caso de La Maestra debe permanecer ajeno a los asuntos del partido y servir para redirigir las políticas de Nueva Alianza.

Para la ex líder del grupo Tercera Vía –del PRI– es necesario alejarse de la imagen de Elba Esther, sobre todo, ahora que su imagen es tan negativa entre la ciudadanía.

Por eso, el vicepresidente de la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Alejandro Ojeda Anguiano, propuso auditar las cuentas del Panal.

La detención de la ahora ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) prendió los focos entre la mayoría de los grupos de poder que buscan ajustes de cuentas o hacer leña del árbol caído.

Las revelaciones de la Procuraduría General de la República (PGR) señalan que Elba Esther Gordillo desvío recursos del magisterio para fines personales y artículos de lujo.

Por eso los legisladores perredistas y algunos del PRI, como Fernando Mercado, consideraron necesaria una revisión a las prerrogativas ordinarias y extraordinarias del Panal, que dirige de facto.

Puntos rojos

A pesar de que el Panal no es un partido local, sino nacional y con representación en el Distrito Federal, recibe del presupuesto capitalino 23 millones 791 mil 753 pesos anuales.

Mediante un acuerdo aprobado por el Instituto Electoral del DF, tras sus resultados en las pasadas elecciones, tiene derecho a una prerrogativa mensual de un millón 982 mil 646 pesos.

En conjunto, los partidos  recibieron en 2012 un total de  506 millones 88 mil 778 pesos para sus campañas, de los que al Panal le tocaron 36 millones 977 mil 346 pesos.

Y por esa razón, el diputado de extracción perredista y afín a la corriente bejaranista, Alejandro Ojeda, pidió una revisión minuciosa de los gastos que ha tenido Nueva Alianza en los últimos años.

Lo anterior, en función de que el Instituto Electoral del Distrito Federal, a través de la Unidad Técnica Especializada de Fiscalización (UTEF) hace auditorias parciales a los órganos políticos. 

Las áreas fiscalizadoras revisan el ejercicio inmediato anterior a través de muestreos, y si hay observaciones, los partidos tienen hasta tres oportunidades para corregir o justificar gastos.

“Este tipo de procedimientos permite a los partidos salir más limpios de lo que realmente tienen en sus finanzas, pero a través de una auditoría a fondo podremos tener más claridad”, dijo Ojeda.

No hay irregularidades

Al respecto, el líder de Panal en el DF, Jorge Gaviño, descartó cualquier anomalía en el manejo de las finanzas del partido, puesto que el IEDF hace revisiones constantemente.

“Nosotros hemos gastado menos que los demás partidos por un asunto de austeridad y responsabilidad, y todo el dinero está plenamente justificado”, dijo Gaviño.

Sobre la situación legal de Elba Esther Gordillo, reconoció que hay un impasse en la dirigencia estatal del Partido Nueva Alianza.

Dirigentes mudos

Desde la noche del martes pasado, la sede del partido luce desolada. Los dirigentes entran y salen en silencio o con teléfonos en mano y en espera de instrucciones del Comité Ejecutivo Nacional.

“Lo que vamos a hacer es esperar instrucciones de la dirigencia nacional, una vez que los abogados acaben de revisar todo el expediente de la Procuraduría General de la República (PGR) sabremos qué sigue”.

Incluso, descartó que el partido la haya abandonado: “la cuestión es que se trata de un asunto penal y eso significa que es individual, sobre una persona, por eso no convocamos a movilizaciones”. 

Lo que, para muchos, fue el primer paso para derrocar a Elba Esther Gordillo del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación, es también el preámbulo para desmarcarse de ella.

Por el momento, Jorge Gaviño consideró indispensable exigir a las autoridades federales el cumplimiento del debido proceso en el caso de la fundadora del Panal.

Explicó que el partido y el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) se manejan por vías distintas y que, por esa razón, el Panal no está en riesgo de desaparición.

Otros ex colaboradores del Panal, como el ahora diputado local por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Alberto Cinta, prefieren mantenerse ajenos al caso.

El también ex candidato a la jefatura de Gobierno capitalino en 2006 por Nueva Alianza, dice desconocer todo lo relacionado con Gordillo, ya que se apartó de ese grupo de poder hace seis años.

“¿Qué va pasar? …es una pregunta que yo mismo me hago, no sé si los maestros afines a Elba Esther emprendan una serie de movilizaciones, pero debido a la contundencia de las averiguaciones creo que se van a concentrar en la ruta jurídica”.