El suegro incómodo de Aristóteles

La línea entre lo público y lo privado parece que no ser muy clara para el gobernador electo Jorge Aristóteles Sandoval Díaz quien desde que fungía como alcalde involucró sus asuntos personales.

Se trata de su suegro José Luis Arriaga, a quien se le atribuyen una serie de irregularidades y malos manejos en en el sector Salud.

Arriaga ha sido señalado por gente de su mismo gremio, por mala administración el área anteriormente mencionada del municipio de Guadalajara, donde Sandoval Díaz fungía entonces como alcalde.

Ahí, de la mano del entonces titular de la dependencia  Antonio Cruces Mada,  decidió gestionar y operar a favor de ciertas empresas a la hora de lanzar licitaciones. 

Aprovechó su vinculo con el político tapatío, su yerno Aristóteles Sandoval, según consigna el diario El Informador en la columna de Diego Petersen, el 25 de julio del año pasado.

Arriaga pasado violento

Médico de profesión, José Luis Arriaga egresó de la UdeG y pronto se integró en las filas de la policía judicial. 

De hecho, en 1978 participó en el programa de Médicos en Combate del Frente Sandinista de Liberación Nacional en Nicaragua, donde permaneció poco tiempo, pues se consideró que tenía “una conducta inadecuada”, según versiones de la propia prensa local.

A ese antecedente se suma su participación dentro de la extinta Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG), organización estudiantil que se disolvió a finales de los años ochenta y que se caracterizó por practicas muy ligadas a la violencia.

Ahí se le conoció como “El Gato” y colaboraba directamente en los grupos de choque que esa organización estudiantil tenía.

Eso le sirvió para mantener una relación la Universidad de Guadalajara en donde se desempeñó, años después,  como Coordinador General de Capacitación del Hospital Civil de Guadalajara.

Pero los últimos meses, Arriaga también se ha visto envuelto en escándalos de violencia.

Durante la manifestación en contra del gobernador del Estado Emilio González Márquez, denominada la “macromentada”, Arriaga atacó a un anciano que a criticó mediante un cartel a su yerno Sandoval.

Enseguida Arriaga se fue los golpes sobre un fotógrafo que capturó la imagen previa, y con ello, se armó un zafarrancho hasta que Arriaga fue detenido por la policía municipal y puesto libre en poco tiempo.