Indígenas, con voz en cuello
Por primera vez en la historia de México, los pueblos indígenas participarán con una candidata propia para competir por la presidencia del país; María de Jesús Patricio Martínez, mujer nahua de Tuxpan, Jalisco, busca redireccionar la política nacional.
“(La redirección se finca) en la reconstrucción de los pueblos que han sido golpeados por años y años”, producto del saqueo de los recursos naturales que ha obligado a pueblos completos a la marginación y al desplazamiento.
J. Jesús Lemus
Por primera vez en la historia de México, los pueblos indígenas participarán con una candidata propia para competir por la presidencia del país; María de Jesús Patricio Martínez, mujer nahua de Tuxpan, Jalisco, busca redireccionar la política nacional.
“(La redirección se finca) en la reconstrucción de los pueblos que han sido golpeados por años y años”, producto del saqueo de los recursos naturales que ha obligado a pueblos completos a la marginación y al desplazamiento.
Con el aval de los representantes indígenas de 26 estados del país, María de Jesús Patricio Martínez ahora se alza como la esperanza de los más de 15 millones 700 mil indígenas que en los últimos años han intentado llevar una agenda propia de gobierno.
“(El fin del proyecto presidencial indígena) no es tanto trabajar en cuestión de llevar votos, de ir a sentarnos allá en la silla maliciada; nuestra participación es por la vida”, aseguró.
La voz que se alzó desde San Cristóbal de las Casas se manifestó a favor de un rechazo generalizado contra los proyectos de desarrollo, la marginación, el desplazamiento, el saqueo de recursos naturales y el abandono de la tradición milenaria que dio origen a esta nación.
Por eso dijo que este movimiento no es tanto para lograr un espacio para los indígenas en la vida política del país, sino para buscar una forma de seguir existiendo.
María de Jesús Patricio Martínez fue electa candidata a la presidencia de la República por la representación de 58 pueblos indígenas de todo el país, quienes se reunieron en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en atención al llamado del Consejo Indígena de Gobierno (CIG) convocado por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
El primer reto de esta mujer, madre de tres hijos y de oficio médico tradicional, será la integración de una agenda de trabajo que abandere todas las causas indígenas del país, para convertirlas en un plan de gobierno nacional.
Por esa razón, la también vocera del CIG realizará a partir de esta semana una serie de contactos con las etnias de todo el país para conocer de forma directa la problemática de cada una, a fin de conformar el plan alternativo de gobierno que se habrá de proponer a todo el electorado en los comicios del año entrante.
“La posibilidad de tener una presidenta propuesta por los pueblos indígenas, no está alejada de la realidad”, dijo Matías Jerónimo Cabello, integrante del movimiento Nación Purépecha.
En su apreciación, Jerónimo Cabello estima que la suma de los pueblos naturales de México, con los simpatizantes del movimiento indígena podrían superar más de 22 millones de votos efectivos, suficientes para llevar a María de Jesús Patricio a la presidencia de la República.
Cabe recordar que, en los comicios presidenciales del 2012, Enrique Peña Nieto, logró la victoria electoral con 19 millones 226 mil 784 votos, que representaron el 38.21 por ciento el padrón electoral, con lo que se hizo legítimamente de la presidencia del país.
La suma de los votos que podrían aportar solo los pueblos indígenas al proyecto del EZLN para los comicios del año entrante, por sí solos representan más votos que los logrados en el 2012 por el entonces candidato del PRD, PT y Partido Movimiento Ciudadano, Andrés Manuel López Obrador.
Conflictos, la base de la agenda indígena
De acuerdo al Atlas de Justicia Ambiental, proyecto financiado por la Unión Europea, México se ubica en el lugar número nueve de los países que registran el mayor número de conflictos locales entre compañías con proyectos de desarrollo y comunidades indígenas.
En nuestro país existen a la fecha 64 grandes conflictos por el despojo de recursos naturales a los pueblos indígenas, la mayoría a causa de la presencia de explotación de minas, proyectos de generación de energías renovables, construcción de infraestructura vial, represas y sobrexplotación de bosques.
“Como pueblo hemos analizado que estamos peleando por la vida y ello incluye la defensa del territorio, el agua, los árboles, todo lo que se está acabando”, que de alguna forma ha obligado a comunidades completas al desplazamiento, el hostigamiento y la persecución.
De los 64 conflictos que se reconocen en México como graves, dentro del Atlas de Justicia Ambiental, 25 son por proyectos mineros, 14 son a causa del despojo del agua, 12 por construcción de infraestructura de desarrollo, seis por devastación de bosques, tres por extracción de petróleo, y dos a causa de industrias contaminantes de suelo y aire.
Y se deben agregar al menos otros 37 que con señalados por el Observatorio de Conflictos Mineros de América Latina (OCMAL), en donde al menos 16 hablan de desplazamiento de comunidades indígenas y en otros 12 se menciona la ejecución de sus líderes.
La devastación del territorio, de la que considera María de Jesús Patricio que es víctima la comunidad indígena de México, se concentra principalmente en 2 mil 426 municipios del país ubicados en los estados de Chiapas, Guerrero, Hidalgo, Chihuahua, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Guanajuato, Michoacán, Nayarit, Veracruz, Yucatán, Jalisco y Edomex.
Por la defensa de la herencia
Aun cuando todavía falta para el registro formal ante el INE de la candidatura de María de Jesús Patricio, en el seno de la comunidad indígena se anunció que será en esta misma semana cuando se defina la agenda de trabajo de su vocera y abanderada política.
Mientras tanto, el levantamiento de los reclamos de los pueblos, para traducirlo en la agenda política de la candidata, ya inició en Chiapas, en donde 71 concejales de todas las comunidades del país trabajarán en la exposición de los reclamos de sus etnias, para presentarlos como propuestas de gobierno en la próxima campaña presidencial.
“Queremos recuperar y cuidar esto que es nuestro y que nos fue heredado, y queremos dar este paso, es difícil, pero creemos que es necesario darlo, si queremos que siga habiendo vida para todos.
“Quienes van a estar al frente (del próximo gobierno de la república) son los 71 concejales. Yo sería la vocera, pero ellos están presentes ahora, y ellos van a dar también su palabra”, aseguró la candidata que cuenta con el respaldo del EZLN.