Empresas en la mira
Asentados en la Costa Chica y la región de la Montaña y Acapulco, en el Estado de Guerrero, el grupo guerrillero FAR-LP se proclamó en contra del régimen del Gobierno Federal, al que calificaron de represivo
Ayer, su segundo comunicado estuvo dirigido a las empresas extranjeras a las que, aseguraron, considerarán “objetivos militares”.
“Porque nosotros sabremos defender nuestra soberanía y de ello daremos muestra”.
El grupo guerrillero especifica que el término “objetivo militar” se refiere a “cualquier objeto sobre el que se dispara un arma de fuego”.
Rodrigo VillegasAsentados en la Costa Chica y la región de la Montaña y Acapulco, en el Estado de Guerrero, el grupo guerrillero FAR-LP se proclamó en contra del régimen del Gobierno Federal, al que calificaron de represivo
Ayer, su segundo comunicado estuvo dirigido a las empresas extranjeras a las que, aseguraron, considerarán “objetivos militares”.
“Porque nosotros sabremos defender nuestra soberanía y de ello daremos muestra”.
El grupo guerrillero especifica que el término “objetivo militar” se refiere a “cualquier objeto sobre el que se dispara un arma de fuego”.
“Nosotros sabremos defender nuestra soberanía y de ello daremos muestra”, advierten en un comunicado.
El grupo insurgente exige la liberación de los líderes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), Nestora Salgado García, Gonzalo Molina González, además de 12 policías comunitarios, detenidos el pasado 6 de noviembre por autoridades estatales.
El grupo insurgente tuvo su aparición en un paraje de Guerrero ante medios de comunicación locales y extranjeros, el pasado 2 de diciembre, aniversario luctuoso del guerrillero de los años 70, Lucio Cabañas Barrientos.
Ahí se mostraron fuertemente armados, aunque con un número de combatientes reducido.
Al frente se identificaron los líderes –comandantes- Emilio, Camilo y Esperanza.
El grupo guerrillero -del cual se posee poca información- demandó el esclarecimiento de crímenes contra luchadores sociales.
En el comunicado -publicado el pasado 16 de diciembre por el Centro de Documentación de los Movimientos Armados-el grupo señaló:
“Las llamadas reformas de gran calado no son otra cosa que medidas para fortalecer al capital transnacional; la mal llamada reforma educativa, solo representa el control del gobierno (PRI) a las plazas antes controladas por un sindicato corrupto, la condición salarial y laboral de los maestros mexicanos es la peor de los países de la OCDE a quién el estado le rinde cuentas.
“El llamado ‘Pacto por México’ ha significado la anulación de la escasa vida parlamentaria que existía en el país, dejando en manos de siete personas la facultad de legislar y tomar las decisiones más importantes para la vida del país dejando de lado la vida de un Congreso”.
Aseguraron que construirán la fuerza militar que derroque al gobierno entreguista para construir una nación republicana. Firmaron desde “algún lugar del estado de Guerrero”.
Autenticidad que está en duda
A decir de especialistas en seguridad nacional contra insurgencia y guerrilla, la autenticidad de este grupo aún resulta poco clara.
En entrevista con Javier Solorzano, el investigador del Centro de Documentación de los Movimientos Armados (Cedema), Jorge Lofredo, dijo que resulta complejo y prematuro determinar qué tan genuina es la estructura y capacidad del grupo.
En lo que va de la administración del presidente Peña Nieto han aparecido al menos cuatro grupos guerrilleros:
El Ejercito Revolucionario Popular Zapatista (ERPZ) en Veracruz; la Liga 23 de Octubre, en Oaxaca; el Ejército Revolucionario Popular (ERP), y recientemente las Fuerzas Armadas Revolucionarias-Liberación del Pueblo (FAR-LP).
Expertos en la materia, sugieren que algunas de estas expresiones se tratan de escisiones de grupos como el Ejército Popular Revolucionario.
Tal es el caso del ERP, asegura un especialista que solicitó no ser identificado.
De las tres primeras organizaciones listadas anteriormente, no existe registro de movilización u operaciones desde su aparición. Algunos sugieren que fueron disueltas.
Por ello, la autenticidad de las FAR-LP aun es cuestionada por autoridades federales, asegura el especialista.