Entre España y Edomex
La operación del complejo petroquímico Pajaritos y las oportunidades de empleo a sus trabajadores que otorgue el consorcio Mexichem se decidirán muy lejos de allí.
La compañía Petroquímica Mexicana de Vinilo (PMV), creada en 2011 y presentada en septiembre de este año como una nueva “integración” con Pemex, ya está creando su sitio Web y tomando las riendas de las 476 mil hectáreas del complejo.
Peniley RamírezLa operación del complejo petroquímico Pajaritos y las oportunidades de empleo a sus trabajadores que otorgue el consorcio Mexichem se decidirán muy lejos de allí.
La compañía Petroquímica Mexicana de Vinilo (PMV), creada en 2011 y presentada en septiembre de este año como una nueva “integración” con Pemex, ya está creando su sitio Web y tomando las riendas de las 476 mil hectáreas del complejo.
Pero las ganancias del cloruro de vinilo que han estado hasta ahora a cargo de Pemex no se manejarán desde el complejo Pajaritos ni desde Coatzacoalcos, en Veracruz, donde se encuentra ubicado. Lo serán desde el Estado de México.
La dirección oficial de la empresa que operará bajo el membrete de socia de Pemex es una casa en Tlanepantla.
Coincide con el lugar donde se ubican tanto el corporativo Mexichem como sus divisiones Amanco y Rexolit.
El director de la compañía tampoco es un funcionario de la paraestatal, sino un ingeniero mecánico que ha trabajado en Mexichem durante los últimos 25 años: Rafael Dávalos Sandoval.
Según el informe anual 2012 entregado por el consorcio a la Bolsa Mexicana de Valores, Dávalos Sandoval fungió hasta mayo del año pasado como director general de Mexichem.
Salió de este puesto para hacerse cargo “de la integración vertical de la cadena cloro vinilo y la relación con Pemex”.
Además de sus responsabilidades en México, es presidente, consejero y apoderado solidario de Mexichem Ibérica, compañía que se llamó originalmente Pavco Investments.
Esta filial del consorcio fue creada en Madrid, España, justo en el lugar donde Pemex creó una filial en abril de este año para controlar las finanzas de la sociedad con el privado: PPQ Cadena Productiva, cuyos socios son en su mayoría españoles.
Venta con mordaza
Desde la dirección de Mexichem en el Estado de México, Rafael Dávalos pidió a Pemex que entregara la maquinaria de Pajaritos mediante un oficio fechado el 20 de septiembre, una semana después de que se anunció que se había formalizado la coinversión con la paraestatal.
El oficio está dirigido a Manuel Sánchez Guzmán, director de Pemex Petroquímica, y firmado por Dávalos, director de PMV.
Fue mencionado el 14 de octubre en una nota del diario La Jornada y Reporte Indigo tiene una copia.
La misiva, que ostenta un sello de recibida por Pemex el 23 de septiembre, anuncia que “como es de su conocimiento (…) se enajenaron a PMV por parte de Pemex Petroquímica los activos que componen las plantas productivas y auxiliares ubicados en Pajaritos”.
Lo que les interesaban eran el resto de los bienes que hay allí, como los equipos de laboratorio, el trackmovil y el montacargas del almacén, las refacciones, los químicos, las piezas.
“Le solicito muy atentamente que inicie el trámite para que los bienes antes señalados sean vendidos a PMV por parte de Pemex Petroquímica, previa revisión de sus condiciones físicas y acordando entre las partes el precio justo para los mismos”, escribió el director de PMV.
Pero el precio justo quedó supeditado a la mordaza: “le solicito que previamente a la compraventa y a la mayor brevedad posible firmemos entre PMV y PPQ un contrato de comodato para que PMV pueda ir disfrutando el uso de los mismos”.
La justificación fue que los equipos están adaptados para usarse en ese complejo y que el comodato terminará en cuanto pacten el precio de compra.