Después de la publicación del reportaje “El logo que encendió al Tec” (Reporte Indigo 585) llegó hasta la redacción una carta firmada por 30 exalumnos de la Escuela de Gobierno y Administración Pública (EGAP) del Tecnológico de Monterrey, ahora llamada Escuela de Gobierno y Transformación Pública.
A propósito de ese cambio de nombre, los exatec dirigen el escrito al rector David Noel Ramírez Padilla y al decano Alejandro Poire, exsecretario de gobernación en el sexenio de Felipe Calderón.
Explican que el pasado lunes 18 de agosto recibieron en sus cuentas de correo el comunicado oficial que les informa que sin consulta, se cambiaría el nombre de la escuela de graduados, con lo que no están de acuerdo.
Agregan que tienen el orgullo de haber egresado de una escuela de graduados de política pública, área en la que se han profesionalizado, “por lo tanto, consideramos que este cambio no solo causa que se pierda el nombre de la EGAP, sino que también modifica el enfoque y trayectoria de la Escuela de Gobierno y Política Pública”.
La extensa carta comenta que con estas trasformaciones “no solo perderemos el prestigio y posicionamiento ya adquirido, sino que también perdemos nuestra identidad”.
Y agregan la definición de identidad de la Real Académica Española para luego citar a decano, Alejandro Poiré, que dice: “Cada uno de nuestros cambios está orientado a que la escuela sea el entorno ideal para contribuir a resolver los principales problemas públicos. Desde su fundación, la Escuela ha trabajado para transformar la realidad y dar solución a los problemas públicos más relevantes. Desarrollamos, implementamos y evaluamos políticas públicas que hacen una diferencia en el entorno actual…”.
Estas palabras los llevan a presentar sus inquietudes sobre la falta de explicación al significado de “Transformación pública” y por qué razón de deja de lado el enfoque de “Política Pública” que sustentó al EGAP desde su fundación.
En este sentido, menciona el comunicado, “la política pública es precisamente la esencia de nuestra Escuela, de la EGAP. El diseñar, desarrollar, implementar y evaluar políticas públicas para atender problemas públicos es parte de la misión y visión de la EGAP. Es precisamente a través de la política pública que se logra la transformación social, política y económica del país”.
“¿Por qué el cambio del nombre? ¿Para qué? ¿Qué no está funcionando de la EGAP Gobierno y Política Pública que hace cambiar el enfoque y su trayectoria? ¿Cuál es la justificación de este cambio? Un cambio que abandona y deja en el olvido por completo la marca EGAP que, como ya lo hemos mencionado, a lo largo de 11 años ha ganado posicionamiento, prestigio y reconocimiento a nivel nacional y global, para ahora llamarse Escuela de Gobierno y Transformación Pública sin una justificación de fondo”, plantean los 30 firmantes.
Continúan con la historia de 10 años de EGAP y el triunfo de haber abierto el programa en los campus Ciudad de México, Santa Fe, Estado de México, Puebla y Guadalajara, y recalcan el posicionamiento de la marca EGAP entre la comunidad académica y el sector público, organizaciones de la sociedad civil, medios de comunicación, congresistas, cámaras, y demás stakeholders de la Institución en Monterrey.
Por lo que cierran diciendo: “Por último, les invitamos a preservar el enfoque y el rumbo como Escuela de Política Pública formadora de profesionales en esta materia. Esperamos que escuchen y atiendan estas inquietudes”.
> El logo que encendió al Tec
Reporte Indigo publicado el lunes 8