El PAN recibió ayer en el Congreso del Estado la estocada final.
Desde hace un mes, con la renuncia de dos diputados albiazules, el control que tenía el PAN en el Congreso estaba en riesgo.
Ayer se concretó el peor de los escenarios para los azules: la bancada panista perdió el manejo administrativo y financiero del Congreso del Estado y la mayoría en las principales comisiones legislativas.
Un golpe letal para Acción Nacional, que prácticamente se traducirá en inmunidad para el gobernador Rodrigo Medina durante su fin del sexenio.
La Comisión de Coordinación y Régimen Interno, la Cocri, fue arrebatada por la rebelión de la “chiquillada” que impulsó el PRI, Nueva Alianza, el PT y los ahora legisladores independientes, los expanistas Luis David Ortiz y Jesús Cedillo.
Con los votos de los exazules, se logró aprobar un acuerdo delegatorio para que –lo nunca antes visto- la primera minoría asumiera el control administrativo del Congreso y se conformara una nueva Cocri.
La Comisión de Control y Régimen Interno es el órgano legislativo más importante: es la que administra el Congreso. Es decir, es la que maneja los recursos, la contratación de empleados y la conformación de las comisiones legislativas.
La salida del panista Baltazar Martínez de la Oficialía Mayor de Gobierno es uno de los primeros cambios que se realizarán en los próximos días.
También, desde ayer la Comisión de Hacienda del Estado la preside el priista Edgar Romo, en lugar del panista Juan Carlos Ruiz.
A esta comisión legislativa le toca revisar el presupuesto de egresos del Gobierno del Estado, la aprobación de los nuevos impuestos y la Cuenta Pública de la administración estatal.
El golpe contra el PAN en el Congreso del Estado se orquestó desde Palacio Gobierno, principalmente desde la secretaría general que maneja Álvaro Ibarra.
Pero se hizo posible desde hace un mes, con la renuncia de Luis David Ortiz y Jesús Cedillo a la bancada, alegando prácticas corruptas en su partido.
¿A cambio de qué Luis David y Jesús Cedillo se aliaron con el PRI?
La demanda de los expanistas era básicamente una: ser reconocidos en el Congreso como una bancada independiente.
En el PAN no encontraron eco a su reclamo, pero sí en el PRI, que no desaprovechó la oportunidad de hacerse del control del Congreso con sus votos.
Desde ayer Ortiz y Cedillo conforman una fracción independiente y forman parte de la Cocri.
Pero no sólo eso. Ortiz presidirá la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, mientras que Jesús Cedillo se hará cargo de la Comisión Quinta de Hacienda y Desarrollo Municipal.
Desde esta comisión le tocará a Cedillo revisar las cuentas del alcalde de Santa Catarina, Víctor Pérez, su exaliado y ahora rival político que provocó su salida del PAN.
En la bancada albiazul aseguraban ayer que sus excompañeros habían entregado un cheque en blanco al PRI.
El desastre del PAN en el Congreso tiene responsables: los principales son Alfredo Rodríguez como líder de la bancada y José Alfredo Pérez Bernal como presidente albiazul.
Ni Rodríguez, ni Pérez Bernal, tuvieron la capacidad para manejar políticamente las renuncias de Ortiz y Cedillo.
La continuidad de Fredy como jefe de la bancada está en duda y algunos liderazgos del PAN de Nuevo León hablaban ayer de la necesidad de relevarlo.
El nombre del diputado panista Enrique Barrios era uno de los mencionados como el próximo coordinador albiazul en el Congreso.
Barrios fue coordinador del PAN en el Congreso en la Legislatura 2003-2006, y es considerado un legislador duro y crítico.
