Distintos movimientos, organizaciones y ciudadanos de la Cuenca del Valle de México exigen la cancelación inmediata del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México México (NAICM) argumentando que su construcción se realiza en un sitio técnicamente inviable y que además ha traído consigo secuelas como destrucción de recursos naturales y desastre ecológico, entre otras.
En el documento firmado por diferentes movimientos y organizaciones comunitarias, indígenas, campesinas, sociales, estudiantiles y sindicales se demanda, además de la cancelación de la obra, la implementación de un proyecto de restauración de los daños ocasionados hasta la fecha por la construcción del Aeropuerto y la suspensión definitiva de todos los megaproyectos de infraestructura en la Cuenca.
Piden también que se decrete a la Cuenca del Valle de México como Área Natural Protegida y como Patrimonio Cultural de la Humanidad para garantizar su protección y que se declare a las actividades agrícolas, ganaderas y artesanales de la región como actividades estratégicas prioritarias del país.
Además exigen un diálogo público con los Pueblos, Comunidades, Movimientos y Organizaciones que luchan contra el NAIM de la Cuenca del Valle de México donde participen ciudadanos, especialistas, investigadores y universitarios y un referéndum o consulta popular para que los pueblos, ciudadanos y trabajadores decida sobre la cancelación del NAICM y otras propuestas contenidas en el escrito.
Entre las razones por las que se debería cancelar la obra, las organizaciones argumentan que el lecho del Lago de Texcoco es un sitio técnicamente inviable por su características geológicas e hidrológicas, lo cual afirman ha sido documentado en diferentes informes e investigaciones.
Otra de las consecuencias de la obra, es el impacto ambiental que tendrá en la Cuenca del Valle de México, lo cual se agudizará en los próximos años y que ocasionará ecocidio, desastres naturales, escasez y desperdicio de agua potable y fuertes pérdidas, materiales, económicas, sociales y culturales en la cuenca.
Por último, las organizaciones advierten que con el avance de las obras también se agudiza la destrucción de la vida comunitaria en la zona, la destrucción de la obra urbana eficiente y sobre todo, el alto costo para todos los mexicanos por generaciones en beneficio de unas cuantas empresas particulares.