Eduard R. Malayán, embajador de la Federación Rusa en México, desestimó las acusaciones de que desde su país se apoye a alguno de los candidatos a la Presidencia de la República, tras los rumores de que el presidente Vladimir Putin podría estar impulsando la campaña de Andrés Manuel López Obrador, aspirante de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’ (Morena-PT-PES).
Las acusaciones surgieron desde la precampaña, cuando en el mes de enero la periodista Frida Ghitis publicó en el diario The Washington Post un texto titulado ‘Un candidato presidencial mexicano está observando un impulso inesperado de Trump – y de Putin’.
De acuerdo con el artículo, los observadores estadounidenses notaron que la cadena no oficial del gobierno ruso, RT, comenzó a dar mayor espacio a John Ackerman, quien es considerado portavoz en ingles de López Obrador.
Ackerman, abogado y profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desestimó los hechos y acusó que la investigación de Ghitis formaba parte de una campaña para desprestigiar a López Obrador.
Por su parte, Vladimir Putin, quien también fue acusado de intervenir en las elecciones que dieron la victoria a Donald Trump en Estados Unidos, argumentó que en su país no trata de interferir en los asuntos internos en otras partes del mundo.
Putin añadió que Estados Unidos es el país que busca interferir en los comicios de otras naciones.
Los detractores de Andrés Manuel López Obrador utilizaron el rumor para atacar al tabasqueño, quien se burló de la situación e incluso adquirió el apodo de ‘Andresmanulovich’, en clara alusión al señalamiento.
Tras reunirse con Edgar Romo, presidente de la Cámara de Diputados, Eduard R. Malayán negó las acusaciones.
El embajador ruso añadió que su país trabajará con cualquiera de los aspirantes que triunfe en los comicios del 1 de julio.
Eduard R. Malayán precisó que la reunión con Romo tuvo como fin promover los lazos de amistad y cooperación entre los dos país, e indicó que la diplomacia parlamentaria es muy importante.
R. Malayán precisó que se habló de la posibilidad de una reunión interpalamentariva entre Rusia y México, pero que primero esperarán la visita del presidente Enrique Peña Nieto, que visitará la nación aliada en junio.
Los temas que se tratarían con el presidente son los que competen a los dos países, entre los que destacan migración y la lucha contra con la corrupción.
“Estos son los problemas que Rusia también tiene”, aceptó el diplomático.