Gutiérrez, tercer embajador en EU en un año

Con el anuncio del relevo en la embajada de México en Estados Unidos, Gerónimo Gutiérrez se convertirá en el tercer embajador en poco más de un año en Washington. 
 
Por ese despacho pasaron de septiembre de 2015 a la fecha, Miguel Basañez, Carlos Sada y ahora Gutiérrez, lo que habla de una falta de continuidad y planeación a largo plazo para este cargo relevante relación bilateral. 
 
La inminente llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos es la que origina un nuevo relevo en la embajada, y el reto que le espera
Carlos Salazar Carlos Salazar Publicado el
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Con el anuncio del relevo en la embajada de México en Estados Unidos, Gerónimo Gutiérrez se convertirá en el tercer embajador en poco más de un año en Washington. 
 
Por ese despacho pasaron de septiembre de 2015 a la fecha, Miguel Basañez, Carlos Sada y ahora Gutiérrez, lo que habla de una falta de continuidad y planeación a largo plazo para este cargo relevante relación bilateral. 
 
La inminente llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos es la que origina un nuevo relevo en la embajada, y el reto que le espera al nuevo titular es mayúsculo. 
 
En primer lugar superar el gris desempeño de sus antecesores.
Gutiérrez, cercano al Canciller Luis Videgaray, tiene por delante el que quizá sea el mayor reto de la diplomacia mexicana en la historia, lidiar con un personaje que ha posicionado a México como enemigo número uno, con todo lo que eso conlleva.
 
Se espera que en los próximos días Gutiérrez sea ratificado por el Senado mexicano.
 
En los siguientes meses se renegociará no solo el Tratado de Libre Comercio, sino que podría replantearse toda la relación bilateral, como ya lo han dejado ver los mandatarios de ambos países.
 
En la nueva realidad de esta relación, las habilidades diplomáticas de Gutiérrez serán puestas a prueba ante la probable persecución que sufrirán los connacionales en Estados Unidos y el cabildeo con los legisladores norteamericanos para tratar de paliar las políticas de Trump.
 
Con la llegada de Gerónimo Gutiérrez a la embajada, se perfilan más cambios en el aparato diplomático mexicano, entre otros, Carlos Sada ocupará el cargo de Subsecretario para América de Norte, que ocupaba Paulo Carreño.
 
Los antecesores
 
Eduardo Medina Mora fue el primer embajador mexicano en Estados Unidos en el sexenio de Enrique Peña Nieto, tomó posición de su cargo en enero de 2013 y se mantuvo hasta marzo de 2015, cuando dejó el puesto para buscar un lugar como ministro en la Suprema Corte de Justicia.
 
Durante algunos meses, Alejandro Estivill Castro fungió como encargado del despacho.
 
Fue hasta septiembre de 2015 que llegaría a ocupar el cargo Miguel Basañez, quien se mantuvo apenas 7 meses al frente de la embajada, y que fue duramente criticado por su mutismo ante las declaraciones del entonces candidato Donald Trump en contra de los mexicanos.
 
Aunque de manera oficial, el presidente Enrique Peña Nieto aclaró que el relevo del embajador mexicano obedeció únicamente a un fortalecimiento de la red consular y no a una destitución, la falta de reacción y un gris desempeño marcaron la labor de Basañez.
 
En sustitución de Basañez, llegó Carlos Sada, quien cuenta con una importante trayectoria en la diplomacia mexicana, sin embargo, al parecer tampoco se le considera a la altura para enfrentar el reto Trump, y menos de un año después de su nombramiento, dejará la embajada, no así el cuerpo diplomático.
 
¿Quién es Gerónimo Gutiérrez?
 
Gerónimo Gutiérrez, quien fue designado el día de hoy como nuevo embajador de México en Estados Unidos, a espera de la ratificación del senado, se desempeña actualmente como Director del Banco de Desarrollo para América del Norte en San Antonio, Texas.
 
Es licenciado en Economía por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y maestro en Administración Pública por la Escuela de Gobierno John F. Kennedy en Harvard.
 
Gutiérrez ha ocupado cargos públicos en las últimas cuatro administraciones federales, no solo en la Secretaría de Relaciones Exteriores, sino también en otras dependencias.
 
En el sexenio de Vicente Fox, se desempeño como Subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, y también fue jefe de la Unidad de Planeación, Comunicación y Enlace de la Secretaría de Economía.
 
Con Felipe Calderón, llegó a ocupar la Subsecretaría de Gobierno en la Secretaría de Gobernación.
 
Antes, entre 1992 y 1994, se desempeñó como director en la Coordinación de Asesores del Secretario de Hacienda y Crédito Público y asesor en el Banco de Obras y Servicios (Banobras).
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