Hidrocarburos, posible motor de la recuperación
Un aumento en el precio del petróleo, debido a un mayor consumo por el invierno y a la interrupción de la producción por la pandemia de COVID-19, podría ser el salvavidas y el canal para que México obtenga el próximo año ingresos por más de seis billones de dólares
Rubén ZermeñoDespués de analizar el Paquete Económico para el Ejercicio Fiscal 2022, el Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado de la República realizó un estudio sobre las proyecciones hechas por el Gobierno federal, y aunque en unas concordó, en otras encendió alertas rojas y amarillas y las calificó de “pesimistas” y “neutrales”. Contrario a la proyección del Gobierno federal para el próximo año, el IBD pinta un panorama distinto para el país, principalmente en materia de hidrocarburos.
Esta situación se debe a un panorama mundial en el que hay mayor demanda ocasionada por la temporada de frío, lo que impulsará los precios del energético. Incluso la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) informó el pasado 1 de septiembre que la demanda para 2022 aumentaría de 3.28 millones de barriles por día a 4.2 millones de barriles por día.
Otro de los factores que está influyendo en el aumento del precio del petróleo y de los hidrocarburos es la pandemia de COVID-19 ya que ha interrumpido en muchos países la producción de crudo y mantenimiento de las plataformas petroleras, lo que ha obligado a las empresas energéticas a extraer grandes cantidades de hidrocarburos de sus inventarios.
Apenas inició el otoño y el precio del petróleo ligó cinco semanas a la alza y su demanda aumentará
En el caso de la mezcla mexicana de exportación, la semana pasada avanzó su precio 3.73 por ciento, para ubicarse en 70.59 dólares por barril, su mayor nivel en dos meses. El 13 de julio pasado, alcanzó su máximo en lo que va del año con un costo de 70.92 dólares por barril.
Previendo la situación actual que se podría extender casi hasta la primera mitad del año, el Instituto Belisario Domínguez marcó en semáforo rojo el precio de la mezcla de petróleo de exportación (MME) que proyectó el Ejecutivo federal para 2022, siendo más optimistas.
“Si bien el pronóstico para 2021 de 60.6 dólares por barril podría ser considerado neutral, ya que el precio promedio de la Mezcla de Petróleo de Exportación (MME) durante enero-agosto 2021 fue de 61.5 dólares por barril y el petróleo West Texas Intermediate (WTI) fue de 64 dólares por barril, el pronóstico para 2022 de 55.1 dólares por barril podría considerarse pesimista debido a que los contratos futuros del WTI promedian 67.7 dólares por barril para el periodo enero-junio de 2020.
“Para las estimaciones de las finanzas públicas de 2022 se considera un precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo crudo de exportación de 55.1 dólares por barril (dpb) y una plataforma de producción petrolera de un millón 826 mil barriles diarios y de exportación de 979 mil barriles diarios”, señala el Instituto Belisario Domínguez.
Debido a este panorama, el IBD estima ingresos presupuestarios por más de 6 billones 172 mil 635 millones de pesos, un 7.5 por ciento más altos, en términos reales, respecto a lo aprobado por la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) de 2021.
“Se prevén ingresos petroleros por 1 billón 87 mil 072.2 millones de pesos, cifra superior en 11.9 por ciento respecto a lo aprobado en 2021, debido a la expectativa de mayores precios del crudo” agregan.
Respecto a este 2021 el IBD señala que es muy probable que el año termine con un crecimiento menor a lo estimado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que fue del 6.5 por ciento. La principal causa fue que las previsiones de la SHCP respecto a la producción y exportación de petróleo eran muy optimistas.
Ese panorama ocasionó que el precio de la gasolina se haya incrementado 33.5 por ciento este año respecto al 2020 y aunque se prevé que disminuya 5.5 por ciento para el 2022, los precios no se terminarán de recuperar.
Sobre el gas natural, el IBD cita a la Agencia de Información de Energía de los Estados Unidos (EIA) que informa que este año el precio aumentó 8.3 por ciento respecto a 2020 y que para 2022 aumentará otro 1.0 por ciento.
El Instituto Belisario Domínguez prevé que el próximo año la gasolina baje 5.5 por ciento y el gas natural aumente uno por ciento
El caso PEMEX y CFE
En contraparte del mercado de exportación de hidrocarburos, para las empresas productivas del Estado el panorama no es favorable. Para Petróleos Mexicanos (PEMEX) se contempla un déficit financiero de 62.8 mil millones de pesos, con un techo de endeudamiento interno neto de más de 27 mil millones de pesos, y un techo de endeudamiento externo neto de casi 2 mil millones de dólares.
Para la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se plantea un balance financiero de cero, con un techo de endeudamiento interno neto de hasta 4.1 mil millones de pesos, y un techo de endeudamiento neto externo de hasta 794 millones de dólares.
El deterioro en las calificaciones de Pemex podría contagiar a la calificación soberana de México y aunado a una posible desaceleración del crecimiento de la economía mundial y de Estados Unidos, principalmente, podría ocasionar una modificación a la baja de las estimaciones del crecimiento económico del país.
Pese a esta situación, el Gobierno federal pretende que las dos empresas productivas del Estado tengan un incremento en su presupuesto, de 12.7 por ciento para Petróleos Mexicanos y de 4.0 por ciento para la Comisión Federal de Electricidad.
Los otros indicadores
En su “Evaluación de los pronósticos del marco macroeconómico en los Criterios Generales de Política Económica 2022”, el Instituto Belisario Domínguez calificó de “neutrales” algunas de las propuestas hechas por el Gobierno federal en su Paquete Económico para el próximo año.
Respecto a la Tasa de Interés, el IBD pronostica que esté en 5.3 por ciento al cierre del 2022, mientras que el Banco de México estima un 5.4 por ciento.
El mismo Banco Central estima que el tipo de cambio a finales de 2021 será al cierre de 2022 de 20.3 pesos por dólar y el Instituto marca lo mismo.
Sobre la Cuenta Corriente, el IBD pronostica niveles del 0.1 del PIB para 2021 y de -0.4 por ciento del PIB para el próximo año.
Finalmente, respecto a la inflación, el IBD revela que se pronostican niveles promedio de 5.3 por ciento en 2021 y 4.1 por ciento en 2022; mientras que los especialistas consultados por Citibanamex consideran que dichos niveles promedio serán de 6.1 por ciento en 2021 y 3.8 por ciento en 2022.
