El pasado lunes grupos porriles agredieron a estudiantes que se manifestaban en Ciudad Universitaria. Piedras, cohetones, armas punzo cortantes, tubos y palos fueron parte del escenario que dejó un saldo de varios heridos, dos de ellos de gravedad.
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El mismo día sonaron nombres de agrupaciones como: “31” del Colegio de Ciencia y Humanidades (CCH), plantel Azcapotzalco, “3 de marzo” del CCH Vallejo y la “Federación de Estudiantes de Naucalpan” (FEN); que son algunos de los grupos porriles que operan al interior de la UNAM, sin embargo, no son lo únicos.
Pero ¿Qué son los porros, cuando surgieron y cómo funcionan?, son las interrogantes que surgen cuando se menciona o accionan estos grupos.
Imanol Ordorika en su publicación “Violencia y porrismo en la educación superior en México”, señala una definición respecto a lo que es ser un porro:
“El término...‘porrismo’ denota a un conjunto diverso de hechos de violencia que tienen lugar en el espacio educativo y que están conectados, al menos en el origen, a las prácticas políticas de control corporativo que han caracterizado al régimen político en México”.
Los porros no son novedad en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y de acuerdo con el libro “Génesis, desarrollo y consolidación de los grupos estudiantiles de choque (1930-1990)”, de Hugo Sánchez Gudiño se afirma que los primeros grupos porriles datan de los años 30 y el libro los define como grupos que por dinero son capaces de realizar los actos más violentos.
El libro de Gudiño ubica el inicio de los grupos porriles con los grupos denominados guardaespaldas juveniles, que eran conocidos como los pistolos y cuidaban del rector Rodulfo Brito Foucher.
Actualmente lo grupos porriles son identificados por portar jersey similares a los del futbol americano, pero con la leyendo o iniciales de la agrupación porril a la que pertenecen.
Pero el más claro ejemplo de lo que es y hace un grupo de choque son “los halcones”, que perpetraron el ataque del jueves de corpus el 10 de junio de 1971 y agredieron, hirieron y asesinaron a estudiantes que manifestaban su inconformidad.
Incluso en imágenes que circulan en redes sociales se comparó a los halcones con los porros que agredieron a los estudiantes en Rectoría.
10/Junio/1971 #Halconazo. Grupo paramilitar que reprimió una protesta estudiantil dejando muertos y heridos de gravedad.
03/Sep/2018 #GruposPorriles reprimen brutalmente en #Rectoría #UNAM una protesta estudiantil, dejando heridos de gravedad.#FueraPorros #FueraGraue #CCH #Paro pic.twitter.com/TJPej5mf4M
— Martín López G (@mar_lopesur) September 4, 2018
El boom del porrismo
A partir de los años ochenta los investigadores ubican el crecimiento de grupos porriles tanto en nivel medio superior y superior. Ordorika señala que a partir de este aumento de los grupos de choque se incrementa su relación con las actividades delictivas.
Tan solo en la UNAM se ubican a los siguientes grupos:
3 de Marzo (CCH Vallejo) La santa inquisición (prepa 8) los Bohemios (prepa 3), 3 de abril (CCH Oriente), los Lagartos (prepa 5), los Sharks (prepa 1), los Coyotes (prepa 6), la Federación de Estudiantes de Naucalpan (FEN), entre otros.
A si mismos, los porros se hacen llamar grupos estudiantiles y cabe señalar que la palabra es una deformación de “porra”, como se conocía a las fraternidades universitarias que estaban al servicio de algún agente de la policía y tenían protección de dichos organismo.
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Los investigadores mencionados señalan que los grupos porriles, tras el movimiento estudiantil de 1968, sirvieron apaciguar a los estudiantes disidentes, así como para perpetrar agresiones.
Actualmente la proclama de los universitarios es sacar a los porros de la UNAM, y dar con todos los responsables de las agresiones en Rectoría, así como devolver a la universidad la seguridad.
