Horacio Duarte, el vigilante de las puertas del país
En entrevista con Reporte Índigo, el administrador General de Aduanas del SAT, Horacio Duarte, explica las acciones que se realizan para evitar el contrabando de drogas, armas y mercancías ilícitas en las 49 entradas comerciales de México
Noemí GutiérrezHoracio Duarte Olivares tiene la encomienda de desmantelar las redes de corrupción que operan en las aduanas del país.
El texcocano, quien fue designado para el cargo por el presidente Andrés Manuel López Obrador a finales de abril, relata en entrevista con Reporte Índigo los desafíos que implica combatir un fenómeno enquistado desde administraciones pasadas.
Además de vigilar las 49 puertas del comercio en el país, Duarte tiene la orden de aumentar la recaudación fiscal en este rubro, que en la actualidad es de 960 mil millones de pesos.
El administrador General de Aduanas del SAT también tiene la indicación de establecer una efectiva coordinación con áreas dedicadas a la seguridad, el propósito es cerrarle el paso a las organizaciones criminales dedicadas al contrabando de mercancía, drogas y armas.
Desde su oficina, y ante un cuadro de Benito Juárez, Duarte Olivares explica que algunos malos funcionarios en aduanas reciben dinero para permitir la subvaluación por contrabando técnico, que ocurre cuando los que importan mercancías al país no declaran el valor real y el cobro de impuestos es menor; y la entrada directa de mercancías, que se refiere al contrabando llamado “bronco” sin pagar impuestos, lo que genera una distorsión en el mercado.
El funcionario manifiesta que las aduanas, principalmente en la frontera norte del país, “están tomadas por el crimen organizado que presiona y amenaza”.
En esos puntos comerciales, lo que se permitía era el tráfico de drogas de México a Estados Unidos y el ingreso de armas y dinero en efectivo al país producto de actividades ilícitas.
Afirma que la estrategia fue “bloquear” la comisión de esos delitos con la colaboración de las secretarías de Defensa Nacional, de Marina y de la Guardia Nacional, aumentando el decomiso de mercancías ilegales. Las aduanas consideradas como “focos rojos” están en el estado de Tamaulipas; en Ciudad Juárez, Chihuahua; y Tijuana, Baja California.
“En el caso de la aduana marítima de Manzanillo (Colima) por el ingreso de drogas que viene sobre todo de Asia y recientemente en el sur sureste del país, hemos encontrado estos elementos, pero para nosotros, las aduanas más difíciles son, insisto, las de la frontera norte, Manzanillo y la de Tijuana”, explica.
Aunque reconoce la infiltración de la delincuencia organizada, se reservó los nombres de los grupos que mantienen el control de las entradas aduanales.
“Más allá de estar viendo qué grupos, nosotros nos enfocamos en estar conteniendo el paso de las mercancías ilícitas. Simplemente quien intente meter armas, drogas, dinero en efectivo, por decirlo de una manera, no nos interesa de qué grupo es o a qué grupo responde”, advierte.
Horacio Duarte busca fortalecer la coordinación
Sin criticar a sus antecesores Ricardo Ahued y Ricardo Peralta, Duarte Olivares señala que lo que encontró fue una falta de acompañamiento con otras áreas del gobierno.
“Aquí lo que estamos haciendo desde hace ya algunos meses es coordinarnos que no se trata de decirlo popularmente de ´quién se lleva la medallita´ sino hacerlo a nombre del Gobierno de México, a nombre del Estado mexicano y eso nos ha dado muchos resultados”, agrega.
Expone que por diversas irregularidades se tienen varios funcionarios han sido separados de sus cargos. “Algunas denuncias penales que se tienen: cuatro administradores denunciados penalmente y vamos a continuar con esa estrategia de ir limpiando gradualmente las aduanas”, acota.
Duarte anuncia que próximamente se nombrarán a los nuevos administradores de 17 aduanas marítimas. “Llevamos más de un mes capacitando a un número importante de marinos para nombrarlos al frente de las aduanas”, detalla.
Enfatiza que será a lo largo del año y de forma paulatina que se integren militares y marinos a la Administración General de Aduanas. De momento, apunta, se realiza una selección de perfiles tanto de elementos activos como en retiro y en coordinación con la Sedena se abrió un diplomado en comercio exterior y seguridad nacional.
Garantiza –dirigiéndose en especial “a los sectores que genuinamente les preocupa”–, que la inclusión de los elementos castrenses a las aduanas no será un obstáculo para el comercio exterior ni habrá una militarización ya que el mando será civil.
Refiere que “desde hace muchos años el Ejército y la Marina participan y colaboran con el SAT en la vigilancia de las auduanas, no es nuevo tampoco”.
—Pero es vigilancia, no operación, es diferente—, se le cuestiona.
—Es diferente la operación y la vigilancia, pero la vigilancia está asociada evidentemente a la operación (…) cuando aterriza un avión en un aeropuerto internacional lo que nosotros llamamos el ‘panceo’ o revisión, lo hace personal militar con personal nuestro. ¿Qué es operación y qué es vigilancia? Pues es exactamente lo mismo, es la misma actividad, no hay diferencia. En los hechos, lo que se requiere es que muchos ojos, muchas manos del gobierno se llame SAT, se llame Marina, se llame Sedena, colaboren y participen.
Sobre logros conseguidos, el funcionario enlista que en los últimos días se registraron decomisos como en Chiapas, donde se aseguraron 627 toneladas de cocaína, en Tijuana casi 3 millones de dólares en efectivo, más de 25 mil cartuchos en Nogales (Sonora) y “varios kilos de fentanilo” en Manzanillo.
Comenta que uno de los factores clave es la realización de visitas a los puntos aduanales.
“Si uno no va, si uno no supervisa, si uno no está encima de todos los compañeros, de los funcionarios, es cuando se da la permisibilidad que desafortunadamente se daba en las aduanas”, aclara.
Entre otras actividades ilícitas detectadas realizando su labor, Horacio Duarte relata que se denunció ante la Fiscalía General de la República que se falsificaron documentos a su nombre en donde se intentaron cometer fraudes en ayuntamientos en Michoacán, Oaxaca y Estado de México, con supuestas donaciones.
Pese a que las aduanas son un sector sensible, afirma que no ha recibido amenazas y ya se acostumbró a contar con personal de seguridad.