Autoridades de Oaxaca reportaron el hallazgo de dos automóviles calcinados, en los límites del estado y Veracruz, que se presume pertenecen a los seis jóvenes de Tlaxcala que desaparecieron entre los días 4 y 6 de abril.
Todos los ausentes pertenecen a una familia, y, como se informó en Reporte Índigo, desaparecieron en dos grupos.
POR SI NO LO VISTE: DESAPARECEN 6 JÓVENES EN OAXACA LUEGO DE SER DETENIDOS POR POLICÍAS
Los primeros son Eric, de 24 años, Eduardo, de 25, y Eduardo, de 24, originarios de Santa Cruz Quilehta, Tlaxcala.
El 27 de marzo, los muchachos viajaron a la Feria de la Mojarra, en San Miguel Soyaltepec, Oaxaca.
El 4 de abril, los jóvenes perdieron contacto con sus familiares tras presuntamente ser detenidos por policías municipales.
Al enterarse de la noticia, Jonathan de 24 años, el hermano de uno de los desaparecidos, acompañado de Armando, de 18, otro hermano, y su cuñado Ubaldo de 14, se dirigieron a Oaxaca para indagar el destino de sus seres queridos.
El contacto con el segundo grupo se perdió el 6 de abril.
Los padres de los seis desaparecidos acudieron a la Fiscalía Especializada para Delitos de Alto Impacto de la Región de la Cuenca de la Fiscalía General de Oaxaca para pedir apoyo a las autoridades.
Durante la búsqueda, los familiares recibieron el apoyo del alcalde de Santa Cruz Quilehtla, lugar de donde son originarios, quien les dijo que ya trabaja junto a las autoridades de Oaxaca para dar con el paradero de los jóvenes.
Los vehículos calcinados fueron encontrados en las inmediaciones del paraje ‘Las Pilas’, cuya jurisdicción pertenece al municipio oaxaqueño de San Miguel Soyaltepec.
Peritos del Instituto de Ciencias Forenses del estado se dieron cita en el lugar para determinar si hay indicios que ayuden a saber qué pasó con los muchachos de Tlaxcala.
La Fiscalía del estado en el que se produjo el caso mantiene abierta la carpeta de investigación.
Apenas esta semana, en Jalisco, se informó que los tres estudiantes de cine desaparecidos desde el 19 de marzo en el municipio de Tonalá fueron ultimados por miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Las pesquisas en torno a este caso indican que los alumnos de la Universidad de Medios Audiovisuales realizaban una tarea en una propiedad usada como casa de seguridad por un grupo contrario al grupo delictivo.
Fue entonces que ocho sujetos decidieron secuestrar a los estudiantes, llevarlos a dos fincas, golpearlos, torturarlos, y finalmente deshacer sus cuerpos con ácido.
Por este triple homicidio ya fueron detenidos dos hombres.