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Yo no estoy de acuerdo en que se establezcan franjas horarias ni esas cosas, porque están conculcando este derecho de libertad de expresión en materia política”
El Instituto Nacional Electoral (INE) prepara una ofensiva que podría terminar con la ráfaga de spots electorales que se registra en la televisión y radio durante las campañas, a través de una estrategia con la que, se argumenta, se pretende salvaguardar la integridad de los menores de edad.
El Comité de Radio y Televisión del INE analiza ya el Proyecto de Lineamientos para la Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes en materia de Propaganda Electoral, donde se establece que los spots de los partidos solo podrían ser transmitidos en ciertos horarios, para no afectar a la niñez.
Los partidos políticos han prendido las alarmas al respecto, por lo que significaría restringir los horarios de transmisión de su propaganda.
Los spots son uno de los temas más polémicos cada vez que se habla de una posible reforma electoral.
El cambio en el modelo de comunicación política ocurrió después de la elección presidencial del 2006, cuando grupos ajenos a los partidos políticos adquirieron espacios en radio y televisión para criticar a Andrés Manuel López Obrador.
Después del conflicto electoral de ese año, desde el Congreso se trabajó en una reforma político electoral, impulsada por el priista Manlio Fabio Beltrones, entonces senador de la Repúbli-ca.
La reforma se concretó entre el 2007 y el 2008, y en ella se prohibió que particulares y candidatos o partidos pudieran adquirir espacios para su propaganda; el tiempo se entregó a las autoridades electorales y a partir de entonces, estos anuncios solo pueden ser transmitidos en los tiempos oficiales.
Aunque los partidos consideraron esto como el establecimiento de un piso parejo, no todos los involucrados estuvieron conformes.
Desde el arranque de estas disposiciones, los industriales de la radio y la televisión se han quejado de que este modelo de comunicación solo ha “spotizado” el debate público, ha saturado de mensajes a los ciudadanos, y ha anulado la libertad de expresión de los comunicadores, que pueden ser sancionados por emitir sus opiniones.
Han denunciado, además, que la emisión de mensajes está sobrerregulada, por lo que debería haber un cambio en el modelo comunicacional para fomentar la discusión y no solo los mensajes de 30 segundos.
Propaganda electrónica, la polémica
Tan solo en el proceso electoral del 2016, donde hubo elecciones en 14 estados, los partidos políticos transmitieron 9 millones 585 mil 394 spots.
La propaganda electrónica es uno de los temas más polémicos que ocupan la agenda en los procesos electorales.
A partir de la elección presidencial del 2006, el tema cobró mayor relevancia por el uso que se le dio a estos anuncios, lo que provocó que se modificara el modelo de comunicación polí-tica en la reforma electoral del 2007-2008.
Desde entonces, se prohibió que se pudieran contratar espacios para la promoción de algún candidato específico, y se estableció que todos los anuncios serían transmitidos en tiempos oficiales.
En meses recientes, la aparición de los líderes nacionales del PAN y Morena en los spots de sus partidos ha provocado debates al interior y exterior de sus institutos políticos por la sobreexposición que han ganado al aparecer en pantalla decenas de veces al día.
Ahora, la nueva discusión será no solo si los niños pueden aparecer o no en lo spots, sino si se les debe evitar la exposición a estos mensajes.
Francisco Gárate, representante del PAN ante el Consejo General del INE, criticó que la intención expresada en el proyecto sea tener injerencia en los contenidos que los partidos quieran dar a conocer a los electores, con la indicación de que deben producir mensajes aptos para los menores.
“Es una cuestión hasta constitucional: el INE no puede establecer censura sobre los mensajes de los partidos políticos. Ciertamente hay promocionales que están subidos de tono; es responsabilidad de cada partido lo que pone en los spots (…). Sí, hay promocionales de contenidos de contraste, un contenido muy negativo; pero justo son esos contenidos los que más jalan a los ciudadanos a interesarse en los asuntos públicos y a fomentar, consecuentemente, el debate político sobre los temas.
“Yo no estoy de acuerdo en que se establezcan franjas horarias ni esas cosas, porque están conculcando este derecho de libertad de expresión en materia política”, opinó Gárate.
La facultad del INE, apuntó el panista, es administrar los tiempos; no decir qué es lo que se puede decir o no en los mensajes.Esta semana –comenzando hoy- el asunto estará en manos de los consejeros electorales que conforman el Comité donde se estudiará, antes de que pase al Consejo General.
El proyecto de Lineamientos que es estudiado por el INE fue redactado por académicos de la UNAM después de un foro convocado por el propio Instituto, a raíz del mandato del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que ordenó fijar reglas para proteger a los menores.
Aunque todavía falta que los consejeros electorales den su visto bueno, el tema ya ha puesto a los partidos en guardia para evitar perder lo que consideran una conquista del tiempo oficial.
Horarios para spots
En el proyecto de Lineamientos se establece en todo momento que debe preservarse el interés superior de todos los menores de edad, quienes son impactados directamente por los contenidos transmitidos en radio y televisión.
“Los mensajes políticos y de propaganda electoral tienen un impacto mercadológico similar al de la publicidad comercial, y adicionalmente activan en el mejor de los casos el interés cívico de los niños (…)
“La exposición inadecuada en los medios de comunicación puede generar consecuencias negativas a niñas, niños y adolescentes, como la revictimización o su representación estereotipada”, argumenta el proyecto.
Por ello, se propone que las autoridades electorales y los partidos políticos deban producir spots aptos para menores, con un contenido positivo y que sean “informativos, orientadores y educativos sobre los principios y valores democráticos”.
La propaganda que no esté dirigida para los menores de edad o que no cumpla estas características, solo podría transmitirse en ciertos horarios y no a lo largo de todo el día, como ocurre actualmente.
Así, los spots de los partidos solo podrían transmitirse en tres bloques, de lunes a viernes: de las 7:00 a las 8:30 horas; de las 13:00 a las 17:00 horas; y de las 20:00 a las 22:00 horas.
Los sábados, domingos, días festivos y periodos vacacionales, serían dos bloques: de las 8:00 a las 12:00 horas; y de las 20:00 a las 22:00 horas.
Es decir, a los partidos se les quitaría la posibilidad de transmitir spots en más de 10 horas al día –son contar que de la medianoche a las 6:00 horas no se transmiten-.
Esta disposición, se argumenta desde los partidos políticos, es hasta inconstitucional y metería en problemas incluso a los concesionarios de radio y televisión por la complejidad que implicaría una transmisión con esas características.
Alerta roja
Desde que la propuesta estaba en ciernes, los partidos políticos expresaron su reticencia sobre la posibilidad de que el acceso a los medios de comunicación –a través de los spots- les fuera restringido.
En un seminario sobre el tema que se realizó en septiembre, Issa Luna Pla, investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, propuso que los spots con contenidos no aptos para menores se pautaran en horarios en los que usualmente no pueden verlos o escucharlos.
“Los medios deben estar regulados apropiadamente para proteger a los niños.
Esta regulación no es un abuso de poder, esta regulación es obviamente una necesidad y los medios conocen e identifican que en ese ambiente ellos se mueven y tienen que cumplir con esta legalidad.
“Solo falta que el resto de los sujetos involucrados comprenda que los niños también son titulares de derechos y que no necesariamente la obligación de tener y recibir publicidad y propaganda en cualquier momento, sino que tiene que estar limitada esa propaganda específicamente”, expuso la investigadora.
De inmediato, desde los partidos se escucharon las voces de inconformidad por la medida que comenzaba a idearse.
“El Partido Nueva Alianza y asumo la responsabilidad, ha decidido tener spots en donde, de repente utiliza palabras que nosotros creemos que son parte de un vocabulario normal, pero que, evidentemente pueden agredir.
En la elección del año pasa-do, al final un chavo salía diciendo: ‘a huevo’. Si a mí me preguntaban si yo estaba de acuerdo en el que saliera el ‘a huevo’, con (en el programa de) Chabelo, le juro que no, nunca estuve de acuerdo.
“En Canal 11 se transmite un programa en donde a lo largo de todo el día es infantil y, entonces, me decían que lo tenía que yo sacar; eso iba en contra de la cantidad de los pocos spots que Nueva Alianza tiene”, expuso Lourdes Bosh Muñoz, representante suplente de Nueva Alianza ante el Comité de Radio y Televisión del INE.
Ahora que el proyecto de Lineamientos ya se encuentra en estudio, en dicho Comité, los partidos políticos se preparan para defender su acceso ilimitado al tiempo de radio y televisión, tal como establece la Constitución Política.
Guadalupe Acosta Naranjo, representante suplente del PRD ante el Consejo General del INE, afirmó que la protección a los menores es del interés de todos los actores de los procesos electorales, pero el Instituto no tiene la facultad para cambiar la disposición de los tiempos que se encuentra establecida en el texto constitucional.
“No hay manera de que lo hagan, porque no podrían reponer el tiempo en otros horarios. Los partidos tienen derecho a tener un determi-nado tiempo en radio y televisión, de los tiempos del Estado mexicano. Si ellos nos restringen horarios y no los reponen en otros, ya no tendríamos los minutos que nos da la Constitución.
“Seguramente es alguna idea de alguien que no tiene conocimiento de lo que dice la Constitución. Yo creo que no prosperará un planteamiento de estos”, expuso Acosta.
La Constitución Política establece en su artículo 41 que los partidos políticos nacionales “tendrán derecho al uso de manera permanente” de los medios de comunicación social, y se establece las horas a las que tendrá acceso el INE, mismas que deberán ser dis-tribuidas entre sus mensajes y los de los partidos.
El 70 por ciento del tiempo al que tienen derecho los partidos políticos, se estipula en ese artículo, se distribuirá de acuerdo al número de votos que cada uno haya obtenido en la elección para diputados federales inmediata anterior; el 30 por ciento restante será dividido en partes iguales.
Incluso, la Carta Magna establece que los spots deberán ser transmitidos en un horario que abarque desde las 6:00 horas y hasta la medianoche.
“Una idea como ésta no tiene viabilidad, porque violaría la propia Constitución”, sentenció Acosta Naranjo.
Sin embargo, no bajarán la guardia.
Jorge Carlos Ramírez Marín, representante del PRI ante el Consejo General del INE, aseguró que si bien los Lineamientos tienen la intención de proteger a la niñez, no se deben lastimar otros derechos.
“En la ocasión de su discusión vamos a tener mucho cuidado en que ningún afán de protección de los derechos de los menores se convierta, en los hechos, en una limitación del derecho a la publicidad que tienen los partidos políticos”, afirmó.
Se prevé que los Lineamien-tos de Protección a menores de edad sean aprobados por el INE en el mes de diciembre. El asunto será discutido hoy, en la sesión de este Comité
Proteger a la niñez
En un intento por suavizar la mala imagen que tenía el partido por la disputa interna que vivía en aquellos días, en el 2008 el PRD difundió un spot en el que se veía a Suki Mariana, una niña que estudiaba la primaria y a quien se le veía “cocinando” una reforma petrolera “sin privatización”.
“Como que el PRD te está dejando un nuevo sabor de boca, ¿no?”, decía la niña en un atuendo de chef y con el logo del partido en un plato.
Junto a la restricción de la transmisión en los horarios de los spots, el INE estudia también prohibir que los niños partici-pen en spots –hasta incidentalmente-, a menos que se cumplan una serie de requisitos.
El más polémico de ellos es la obligación de que el consentimiento de los niños de entre 6 y 11 años a participar deberá presentarse por escrito y estar certificado.
“Los sujetos obligados deberán recabar la opinión de las niñas y los niños de entre 6 y 11 años de edad sobre su participación en propaganda electoral o mensajes de las autoridades electorales. Dicha opinión deberán hacerla constar por escrito y estar certificada por un perito en atención psicológica o psicología infantil de aquellos registrados ante el Poder Judicial federal o de las entidades federativas o de las procuradurías u organismos públicos para la defensa del menor de edad y sus derechos”, se lee en el apartado 11 del proyecto.
En el caso de niños menores de 6 años, solo se requerirá el consentimiento de los padres o tutores; y si se trata de adolescentes entre 12 y 16 años, solo basta con su opinión escrita sobre su participación en la propaganda.
“La decisión de la niña, niño o adolescente de no querer emitir su opinión sobre su participación en propaganda electoral, o de no participar en ello, deberá ser atendida y respetada”, señala el documento.
Si es un menor de 17 años, no se requerirá el consentimiento de los padres o tutores, pero el contenido o el contexto no debe afectar “o poner en riesgo la dignidad, la honra, la reputación o la integridad física” del joven.
La obligación del INE de trabajar en lineamientos para la protección a los menores de edad provino de varias sentencias del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
