El INE ha gastado más de 31 millones de pesos, sólo durante el actual proceso electoral, para cumplir con su obligación y mitigar el abstencionismo que se prevé ronde el 55 por ciento del electorado.
En los ejercicios fiscales 2020 y 2021, el INE ha erogado 27 y 4.2 millones de pesos respectivamente en pagos a una casa productora llamada Fluxus S.A. de C.V, cuyo registro de marca está a nombre de Ivo Gaytán Molina y Ángel Izcalli Marín Santamaría.
En lo referente a este año, el propio listado oficial indica que habrá aún más gastos, pues el monto mínimo para la producción de spots es de 17.1 millones de pesos, mientras el máximo alcanza los 28.6 millones.
De igual forma, el INE tiene programado ya el gasto de 18.1 millones para la realización de diversos contenidos: medidas de sanitización para prevenir el COVID-19 durante el proceso electoral, promocionar la participación ciudadana y fortalecer la cultura cívica, entre otros.
Este 6 de junio, analistas coinciden en que el hecho de que estén en juego 15 gubernaturas, podría sacar a más gente de su casa para ir a votar, ya que en México suele haber menor participación en estos comicios respecto a aquellos en que se renueva la Presidencia.
Incentivar el voto, tarea del INE
Para combatir el fenómeno del abstencionismo que permea en estos ejercicios, el Instituto Nacional Electoral diseñó una campaña de promoción del voto.
De acuerdo con un documento de transparencia proporcionado por la Dirección de Recursos Financieros del INE, el instituto que encabeza Lorenzo Córdova, ha destinado 31 millones 312 mil 617 pesos en su campaña institucional para el proceso electoral 2020-2021, cuyos materiales audiovisuales en radio, televisión e Internet, van desde el llamado a la credencialización de ciudadanos hasta la promoción del voto como parte de la cultura cívica.
Entre febrero y diciembre de 2020, el INE pagó 27 millones 33 mil 185 pesos por un total de 33 materiales audiovisuales relativos al proceso electoral que arrancó formalmente en septiembre.
Ya en 2021, sumó 4 millones 279 mil 431 pesos por tres spots más, todos durante el mes de marzo con el objetivo de fomentar el voto entre la ciudadanía.
Hace tres años, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador y su Movimiento Regeneración Nacional arrasaron en los comicios, la participación registrada fue superior al 62 por ciento.
En contraste, en las elecciones de 2003, 2009 y 2015, cuando se renovó la Cámara de Diputados a mitad de las administraciones de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, la participación rondó apenas el 44.6 por ciento, menos de la mitad de la lista nominal. Esto de acuerdo a datos manejados por la consultora Integralia en su primer informe del actual proceso electoral, presentado el pasado 11 de abril.
Calendarios homologados
El reporte de Integralia destaca que las elecciones de medio mandato suelen, o solían, despertar poco interés en la ciudadanía. Pero apunta que a partir de esta ocasión, producto de la homologación de calendarios electorales con la reforma político-electoral de 2014, esto podría cambiar.
De los 15 estados que renuevan gubernaturas, Nayarit, Tlaxcala, Zacatecas, Chihuahua, Sinaloa y Baja California Sur hicieron modificaciones para empatar su elección constitucional con los comicios federales.
En el caso de las primeras cinco entidades, esto significó que quienes fueron electos en 2016 tuvieron cinco años de administración en lugar del sexenio tradicional. Baja California, por su parte, apenas tuvo cambio de gobierno en 2019.
La homologación de los calendarios electorales continúa hasta el nivel local dado que el 6 de junio también se elegirán alcaldes de todas las entidades del país, con excepción de los de Hidalgo y Durango. Lo mismo sucederá con todas las Legislaturas estatales, salvo las de Quintana Roo y Coahuila.
El académico Max Kaiser, del ITAM, quien recuerda que en esta elección se espera un abstencionismo de 55 por ciento, considera que los comicios intermedios siempre han sido un gran reto para los partidos políticos porque la gente no cree que está definiendo su futuro ni tiene en cuenta el impacto de los funcionarios a elegir.
“Son 15 estados donde se renueva la gubernatura, y ahí no son elecciones intermedias, ahí son elecciones locales muy importantes. En las otras entidades federativas es un reto sacar a la gente y explicarle qué hacen los diputados, tanto federales como locales” comenta Kaiser.
