Instalan Consejo Ciudadano de Bienestar y Protección Animal en Nuevo León
Las 16 personas que integran el Consejo Ciudadano de Bienestar y Protección Animal fueron seleccionadas por el órgano legislativo y será operado por la Secretaría de Medio Ambiente para llevar la política pública de estos seres vivos
Luz RangelNuevo León ya tiene un Consejo Ciudadano de Bienestar y Protección Animal. El órgano fue instalado el 27 de junio para efectuar las políticas públicas para estos seres vivos.
“La Secretaría integrará un órgano de consulta denominado Consejo Ciudadano de Protección y Bienestar Animal, en el que participarán representantes de la ciudadanía en general, de organizaciones de la sociedad civil, instituciones académicas, colegios de médicos veterinarios zootecnistas y de biólogos, asociaciones públicas y privadas, órganos empresariales y autoridades competentes en la materia”, establece el artículo 134 de la Ley de Protección y Bienestar Animal.
Este órgano tiene entre sus funciones la asesoría, evaluación, seguimiento y colaboración en las políticas públicas de protección y bienestar animal. La ley establece que tenga una visión integral y sostenible al emitir opiniones, observaciones y recomendaciones a la Secretaría de Medio Ambiente, dependencia que lo pondrá en marcha.
El Consejo Ciudadano de Protección y Bienestar Animal fue seleccionado por el Congreso local y sus 16 integrantes tienen voz y voto. Además contará con invitados permanentes de entes públicos, quienes podrán participar en las sesiones.
Los integrantes durarán en su encargo tres años, con posibilidad de reelección hasta por un periodo igual. Para ello, el órgano legislativo deberá publicar una convocatoria.
“Su organización y funcionamiento se sujetará a lo dispuesto por esta Ley, su Reglamento y el Reglamento Interno que emita el propio Consejo Ciudadano. Cuando la Secretaría deba resolver un asunto sobre el cual el Consejo Ciudadano hubiese emitido una opinión, observación o recomendación, deberá exponer de manera fundada y motivada las causas de aceptación o rechazo”, menciona el artículo 134 de la Ley de Protección y Bienestar Animal.
La urgencia del Consejo Ciudadano de Bienestar y Protección Animal
La primera convocatoria para quienes integrarían el Consejo Ciudadano de Bienestar Animal se declaró desierta. El 13 de octubre de 2021, el diputado del Partido Acción Nacional (PAN), Mauro Guerra presentó un dictamen de la Comisión de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, en el que presentó al Pleno la propuesta de lanzar una nueva convocatoria.
El dictamen se aprobó por unanimidad. Sin embargo, el 15 de junio de este año Mauro Guerra volvió a insistir, ahora para la instalación del Consejo Ciudadano de Bienestar Animal.
“Hay un Consejo Ciudadano de Bienestar Animal que este Congreso del Estado aprobó por unanimidad hace más de 70 días”, reclamó el legislador.
Guerra acusó al gobernador Samuel García de frenar el trabajo del organismo que debe velar por el bienestar de los animales. En esa ocasión estuvo acompañado por la exdiputada Claudia Tapia Castelo.
“Hoy tiene la posibilidad de poner a trabajar un Consejo formado por ciudadanos, por organizaciones de la sociedad civil, por académicos y por colegios veterinarios. Es muy extraño que no lo ponga a trabajar porque no les da esta oportunidad que, además debo mencionar, que es un trabajo voluntario, no hay remuneración”, lamentó Guerra Villarreal.
El PAN aseguró que el tiempo ya se había excedido. Sin embargo, el Consejo Ciudadano de Bienestar Animal debía instalarse dentro de los siguientes 60 días hábiles a partir de la publicación del decreto en el Periódico Oficial de Nuevo León.
Ahora el siguiente pendiente, a partir del 27 de junio que fue la instalación del órgano, es el manual de captura y atención de animales en vía pública para coadyuvar con la Secretaría de Medio Ambiente.
En la instalación presencial, Rolando Ibarra, subsecretario de Gestión Integral del Agua, informó que 85 por ciento de los neoleoneses tiene un animal de compañía. También es necesario hacer estudios para diseñar mejores políticas en cuanto a tenencia responsable y erradicación del maltrato animal.