Iris Jacqueline, de 19 años, fue vista con vida por última vez el pasado sábado cuando avisó a sus padres que saldría a una fiesta en casa de su novio, Javier, pero al mediodía siguiente la localizaron asesinada en el domicilio del sujeto, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Alrededor de las 19:00 horas, la joven envió a su madre una fotografía de ella junto con una de sus amigas en el centro comercial Plaza del Sol, en la colonia Centro, para asegurarle que se encontraba bien y estaba acompañada.
Tras ello, Jacqueline se dirigió al domicilio donde vivía Javier, de 30 años, quien presuntamente era su pareja sentimental. Se trata de un departamento marcado con el 201, ubicado en el número 58 de la calle Manuel Doblado, en la misma colonia.
Antes de la medianoche, la joven escribió un mensaje a su familia informándoles que se encontraba en la casa de ese sujeto porque asistiría a una fiesta.
Sin embargo, alrededor de las 23:00 horas, la joven ya no respondió más la comunicación y sus padres comenzaron a preocuparse, por lo que llamaron a los servicios de emergencia para reportar la desaparición de su hija.
Ante la desesperación, al día siguiente, el padre de Iris decidió acudir él mismo al domicilio del novio de su hija para buscarla en ese lugar. Afuera del departamento encontró a varios policías que vigilaban la calle y les solicitó ayuda para encontrar a Jacqueline.
Sin embargo, los uniformados le explicaron que se encontraban ahí debido a que denuncias vecinales los alertaron sobre gritos y golpes que habían ocurrido en el departamento 201.
Iris Jacqueline fue localizada sin vida a mediodía del domingo en ese lugar, el departamento que rentaba Javier y donde había transcurrido la fiesta. Su cuerpo tenía huellas de violencia y abuso sexual.
“Lo que hicieron los policías fue mostrar una foto de la víctima, la cual, pues, yo la reconocí que era mi hija”, dijo a medios de comunicación María del Carmen Mosqueda, madre de Iris Jacqueline.
“No podía creerlo, no quería creerlo, no pensé que fuera ella. Sentí un dolor tan grande que hasta ahorita no puedo aceptarlo, quiero pensar que no es cierto”.
De acuerdo con la necropsia que las autoridades entregaron a su familia, Iris Jacqueline murió de asfixia por estrangulamiento.
Según los vecinos del lugar, aparentemente Iris había terminado con Javier, por lo que éste arremetió contra ella y fue en ese momento cuando comenzaron a escuchar los golpes y gritos desde el interior del domicilio.
Los vecinos atestiguan que, antes de que la policía encontrara el cadáver de Jacqueline, una de las personas salió del departamento y parecía “nerviosa”, pero no dijo nada. Además, algunos de quienes se encontraban afuera pudieron vislumbrar el cuerpo de la joven por entre las persianas del domicilio.
“Como a mediodía, platicaba con mi vecino de aquí al lado y le digo, oye, la chava sigue tirada, ¿qué onda?”, reveló a medios uno de los testigos.
Trasciende que Javier ya no se encontraba al interior de su casa cuando los policías y el padre de la víctima encontraron su cuerpo golpeado y, aparentemente, con evidentes huellas de abuso sexual. Sin embargo, las autoridades capitalinas ya buscan al sujeto por ser el principal sospechoso del feminicidio.
Justicia para Jacqueline
Con pancartas, globos y vestidos de blanco, un grupo de personas se manifestó este miércoles en inmediaciones del Centro Histórico hasta el Palacio Nacional para exigir justicia por el feminicidio de Iris Jacqueline.
En tan sólo los primeros dos meses de 2021, en México se aperturaron 142 carpetas de investigación por el delito de feminicidio. De esos expedientes, seis se abrieron en la Ciudad de México y 26 en el Estado de México, entidad que encabeza las tasas de asesinatos violentos de mujeres desde hace varias décadas.
