Jalisco… ¿en Código Rojo?
El “Código Rojo”, la alerta máxima de seguridad para un gobierno, ronda a Jalisco.
La alerta creció el lunes pasado, tras un enfrentamiento entre integrantes del crimen organizado y policías de la Fuerza Única estatal que dejó 15 agentes muertos en la región costa de la entidad.
Aunque entre varios frentes políticos trascendió ayer que se activaba el “Código Rojo”, el comisionado de Seguridad Pública, Alejandro Solorio, rechazó que se implementara esa medida.
Mauricio Ferrerhttps://www.youtube.com/watch?v=xomg4KHjoow
El “Código Rojo”, la alerta máxima de seguridad para un gobierno, ronda a Jalisco.
La alerta creció el lunes pasado, tras un enfrentamiento entre integrantes del crimen organizado y policías de la Fuerza Única estatal que dejó 15 agentes muertos en la región costa de la entidad.
Aunque entre varios frentes políticos trascendió ayer que se activaba el “Código Rojo”, el comisionado de Seguridad Pública, Alejandro Solorio, rechazó que se implementara esa medida.
La Fiscalía General del Estado (FGE) le atribuyó la emboscada a sus elementos al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Se trata del ataque más mortífero del que se tenga registro en la entidad en contra de policías: el peor antecedente era del 2010, en un hecho que terminó con la vida de 10 oficiales estatales, y en el que participó el grupo delictivo La Resistencia.
La emboscada contra la Fuerza Única inició al mediodía del lunes 6 de abril y se extendió hasta la tarde de ese día sobre la carretera Mascota-Las Palmas, municipio de San Sebastián del Oeste.
Ese mismo día también fue asesinado el director de la Policía de Zacoalco de Torres, Miguel Caicedo; es el sexto titular de una corporación municipal ultimado desde 2007 hasta hoy.
La FGE confirmó que la embestida del CJNG fue en represalia al abatimiento de uno de sus líderes, Heriberto Acevedo, “El Gringo”, el 23 de marzo pasado en Zacoalco de Torres.
Según la dependencia, “El Gringo” encabezaba las actividades delictivas en varios municipios y sería responsable del ataque a un convoy del Ejército Mexicano en Guachinango el 12 de mayo de 2014, donde cuatro militares fallecieron tras un operativo contra el robo de hidrocarburo.
Ocotlán, el terror
El ataque del lunes pasado es el segundo que el CJNG ha llevado a cabo contra cuerpos de seguridad en menos de un mes.
En marzo pasado, Ocotlán, municipio de la región Ciénega de Jalisco, vivió un episodio similar en el que murieron 11 personas: cinco elementos de la Gendarmería Nacional, cuatro civiles y dos presuntos sicarios.
El semanario Proceso, en su edición del 3 de abril pasado, detalló que la división de la Gendarmería Nacional pretendía aquella vez detener a Nemesio Oseguera, “El Mencho”, líder del CJNG.
Presuntamente encabezaba una reunión en una casa de seguridad ubicada sobre la calle Oxnard del municipio.
En el enfrentamiento participaron elementos de la Gendarmería Nacional, de la Fuerza Única de Jalisco, de las policías de Guadalajara y de Zapopan, y hasta efectivos del Ejército. Sin embargo, los cuerpos de seguridad fueron superados por el CJNG.
En el fuego cruzado, cuatro civiles perdieron la vida, entre ellos un menor de edad y su padre.
El deceso del adolescente de 15 años fue plasmado en imágenes a las que Reporte Indigo tuvo acceso; su muerte tuvo poco eco en la prensa.
Preámbulo de un ataque violento
El peor antecedente de un ataque lo habían marcado con sangre el 28 de octubre de 2010 los miembros de La Resistencia, grupo escindido del cártel del Milenio (igual que el CJNG) en alianza con Los Zetas.
Ese día, los sicarios emboscaron en Jilotlán de los Dolores (municipio fronterizo con Michoacán) a la Policía estatal.
Asesinaron a nueve agentes. Uno más fue secuestrado, pero nueve meses después, en julio de 2011, fue encontrado muerto.
A La Resistencia se le atribuyeron los 26 cuerpos sin vida encontrados en Los Arcos del Milenio, en Guadalajara, en 2011. También los 18 cadáveres localizados un año después en la carretera a Chapala.
El abatimiento hace un mes de “El Gringo” también habría causado que el CJNG atentara en contra del segundo mando más importante en materia de seguridad, Alejandro Solorio, comisionado de Seguridad Pública, o lo que es lo mismo, el jefe de la Policía estatal.
Solorio, hombre de toda la confianza del fiscal Luis Carlos Nájera Gutiérrez de Velasco, circulaba el 30 de marzo por la colonia Río Blanco, en Zapopan, cuando fue atacado por un comando que le dirigió más de 100 tiros con armas largas; salvó la vida gracias al blindaje de su vehículo.
La FGE aseguró ese día un lanzacohetes que estaba listo para ser accionado. Hoy informa de 15 detenidos por ese hecho.
De 2007 a 2014 el Ministerio Público registró 138 homicidios de servidores públicos en Jalisco, incluyendo agentes operativos.
El 28 de marzo pasado fue asesinado el regidor de Tlaquepaque, el priista Feliciano García. Es el tercer edil ultimado en esta gestión, además del alcalde panista de Ayutla, Manuel Gómez; el diputado federal priista, Gabriel Gómez, y el secretario de Turismo, Jesús Gallegos.
Campañas, en suspenso
Desde el lunes por la tarde, diferentes candidatos a un cargo de elección popular en los comicios de este 2015 en Jalisco, recibieron la advertencia de que el “Código Rojo” permanecía activo en toda la entidad.
El equipo de campaña del candidato de Movimiento Ciudadano (MC) a la alcaldía de Guadalajara, Enrique Alfaro Ramírez, confirmó que en la noche de ese día, durante un evento en la colonia Rancho Contento, recibió el aviso por parte de las autoridades locales.
Gustavo Macías Zambrano, presidente del Partido Acción Nacional (PAN) en Jalisco, detalló ayer que los “focos rojos” están en todo el estado, ante los escenarios vividos en los últimos días.
Y añadió que en varias poblaciones, las condiciones de seguridad pública no son las más óptimas para la votación de junio próximo.
“No se ve una estrategia, un sistema de inteligencia que presumen tener las autoridades; los policías son atacados sin tener una mayor defensa, una mayor resistencia”, declaró el panista.
Los candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el partido en el poder, han mantenido silencio en torno a los sucesos.
Poder en crecimiento
En menos de un mes, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) ha protagonizado dos enfrentamientos con policías, en los que ha demostrado una supremacía:
Octubre del 2010
> Jilotlán de los Dolores, era el antecedente más cruel de este tipo. El grupo La Resistencia atacó a elementos de seguridad, lo que ocasionó la muerte de 11 de éstos.
Marzo del 2015
> Ocotlán, en la región Ciénega, fue testigo de un intercambio de fuego que duró cerca de dos horas. El grupo delictivo superó a los cuerpos de seguridad. En la refriega murieron 11 personas, entre ellas, cinco efectivos de la Gendarmería Nacional y cuatro civiles (uno era menor de edad).
Abril del 2015
> San Sebastián del Oeste, en la costa de Jalisco, presenció una emboscada del CJNG hacia elementos de la Fuerza Única: 15 policías estatales fallecieron.