Ladrones de carga pesada
Los robos de vehículos que transportan carga pesada y movilizan mercancías en Jalisco, se han vuelto una fuente de ingresos muy poderosa para la delincuencia organizada que opera en el estado, de acuerdo con las indagatorias de la Fiscalía General.
En lo que va del mandato del gobernador Aristóteles Sandoval Díaz (2013-2017), los grupos delictivos han interceptado cargamentos transportados en estas unidades, valuados en no menos de mil 162.2 millones de pesos, y otros por 745 mil dólares, según los archivos de Fiscalía (folio de transparencia 01245217).
Luis HerreraLos robos de vehículos que transportan carga pesada y movilizan mercancías en Jalisco, se han vuelto una fuente de ingresos muy poderosa para la delincuencia organizada que opera en el estado, de acuerdo con las indagatorias de la Fiscalía General.
En lo que va del mandato del gobernador Aristóteles Sandoval Díaz (2013-2017), los grupos delictivos han interceptado cargamentos transportados en estas unidades, valuados en no menos de mil 162.2 millones de pesos, y otros por 745 mil dólares, según los archivos de Fiscalía (folio de transparencia 01245217).
Posteriormente, los bienes robados son distribuidos y colocados rápidamente para su venta, incluso en otras entidades. El Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco (CCIJ) advirtió recientemente, por ejemplo, de redes que trasladan los productos hurtados en Jalisco hasta el Barrio de Tepito, en la CDMX.
Según estos registros, el aumento en el robo de transporte de carga pesada en Jalisco, es un fenómeno que se suscitó desde el 2015, el tercer año de Sandoval Díaz, y que se ha mantenido hasta ahora.
En los primeros dos años de este gobierno -2013 y 2014- la incidencia de estos robos fue de 217 y 201 golpes respectivos, sin embargo, en 2015 aumentó a 255 (27 por ciento más), aunque bajó un poco en 2016 a 238. Hasta el primer trimestre de este año arrojó 19 casos.
La incidencia que heredó el gobierno anterior de Emilio González Márquez (2007-2012) no era, sin embargo, mucho mejor, pues sumó mil 353 robos de carga pesada, con un promedio anual de 225, y un cierre tan solo en el 2012 de 215 hechos.
Los 11 peores
Hay 11 municipios que están concentrando esta actividad de robo de transporte de carga pesada, con seis de cada 10 golpes ocurridos en el periodo 2013-2017, y entre los cuales los que conforman la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) ocupan un lugar primordial.
El municipio con la mayor incidencia de estos robos es Tlaquepaque, que gobierna la alcaldesa María Elena Limón, con 113 hechos en ese lapso, seguido por Lagos de Moreno, cuya economía e industrias están integradas al corredor automotriz de El Bajío, con 71.
En tercer lugar está Guadalajara, con 67 robos de carga pesada, seguido por tres municipios también metropolitanos: Zapopan, con 61 hechos; Tonalá, con 49, y Tlajomulco de Zúñiga, con 40.
El resto de los municipios con la mayor incidencia están fuera de la metrópoli, a saber: La Barca, con 32 robos; Poncitlán, con 30; Ocotlán, con 21; Tototlán, 20 y Acatlán, 17, este último sede de un Centro Logístico industrial.
Es constatable, por tanto, lo dicho por el coordinador del CCIJ, Daniel Curiel Rodríguez, el 26 de julio, quien advirtió que la ZMG se había vuelto un escenario importante de estos robos, pues 330 se dieron ahí.
“El otro tema que a nosotros sí nos pega es el de transporte de carga, que ese sí se ha visto incrementado y sobre todo en la ZMG (…) Sí hay robo en carreteras pero insisto, aquí en Jalisco se ha incrementado en la ZMG, cuando van llegando por las carreteras, que sea en la entrada de las carreteras pues ya es ZMG”, dijo.
Combate pobre
La Fiscalía y su Fuerza Única, así como las propias Policías municipales, han mostrado hasta ahora, empero, una baja capacidad para el combate de esta vertiente de las actividades de la delincuencia organizada en el estado.
En estos hechos donde suelen robarse también los vehículos que transportan la mercancía, generalmente tipo tráiler, la proporción de casos donde se logra la recuperación de las unidades es, en realidad, muy pobre: no se les vuelve a ver.
Si de 2013 a marzo de 2017 la Fiscalía da cuenta de 930 robos de carga pesada en todo Jalisco, únicamente en 183 registra haber recuperado la unidad que movilizaba los bienes, esto es, uno de cada cinco.
Pero de igual forma es baja la cantidad de detenciones concretadas por la Fiscalía de individuos dedicados a esta actividad ilícita, con apenas 144 sujetos en este gobierno.
Golpes jugosos
Uno solo de estos golpes puede significarle grandes ganancias a la delincuencia organizada, así lo muestran los archivos de Fiscalía.
Por ejemplo, en el 2014 se registró un robo en Lagos de Moreno de cargamentos de la empresa Nestlé, con pérdidas valuadas en 8 millones de pesos (mdp); y antes en ese mismo municipio, en 2013, otro robo de cigarros que eran movilizados se tasó en 42 mdp.
En la ZMG, en Tlaquepaque, en 2013, un tráiler que transportaba tenis fue interceptado: se valuó en 3.5 mdp. Ese mismo año, en Ocotlán, fue robado un cargamento de camarón y atún de 6 mdp, y en 2014 otro más pero de vino de 4 mdp.
También destaca el robo de un cargamento de maíz, de 2013, en Zapotlán del Rey, tasado en 3 mdp, y otro ese mismo año en Sayula, que contenía una retroexcavadora y un remolque de 2.7 mdp.
Tanto la ZMG, como los municipios de Lagos de Moreno y Ocotlán, son zonas con una fuerte influencia del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Embates delictivos
La transportación de bienes en Jalisco se muestra así como uno de los eslabones de la cadena económica más expuestos a los embates del crimen organizado, ya sea en vehículos de carga pesada, o trenes (los asaltos a trenes pasaron de nueve en el pasado sexenio a 181 de 2013 a febrero de 2017).
Mencionaba el coordinador del CCIJ que sus miembros registran un aumento en el robo de unidades de carga “en un 60 por ciento comparado con el año anterior, se bajó el robo al tren pero subió el tema del robo al transporte de carga (…) nosotros todas las mercancías que producimos las subimos a transporte de carga, camiones, camionetas, etc.”.
Es un tema de crimen organizado, hay cargas detectadas de productos de consumo que se han detectado que en dos días están en la CDMX, en algún caso llegó hasta el Barrio de Tepito, y dos días después ya se había vendido el 100 por ciento de dos tráilers (sic). Eran textiles”, advirtió.
Hay múltiples sectores afectados.
“Se roban todo, se roban textiles, se roban alimentos que es muy fácil venderlos -los perecederos-, se han robado temas de electrónica, automotriz (…) todos los productos de consumo muchas veces terminan inclusive en tianguis, aquí mismo en la ZMG”.