Un año de alerta

El Gobierno del Estado de Jalisco mantiene una deuda con las mujeres. Un año ha pasado desde que Aristóteles Sandoval anunció la Alerta de Violencia contra las Mujeres y los únicos avances han sido en materia operativa, sin resultados que incluyan a las organizaciones sociales y expertas en la materia.

Estas últimas han sido las principales y más severas críticas de lo que hasta hoy ha sido sólo letra muerta.

La disposición de las autoridades locales ha sido nula respecto a las trabas burocráticas impuestas a los involucrados independientes en el tema.

Aunque diversos medios titularon como decreto el anuncio del gobierno el 8 de febrero de 2016, fue hasta el 25 de noviembre pasado que el acuerdo que declaraba la alerta se publicó en el Periódico Oficial del Estado de Jalisco.

El silencio respecto a los datos duros permea este proceso, pues el tema de la violencia contra las mujeres no apareció en los indicadores del cuarto informe de gobierno de Aristó- teles Sandoval, presentado el pasado miércoles primero de febrero.

En el mensaje emitido por el gobernador a través del Sistema Jalisciense de Radio y Televisión no existen palabras como violencia, alerta o mujeres.

El ejemplo a no seguir

El caso Jalisco ha sentado un importante precedente para el tema de las alertas locales, claro que el cerrar el mecanismo a las autoridades locales –como ha documentado Reporte Indigo– no ha funcionado.

“En un ejercicio previo en el estado de Jalisco, comparativo con Michoacán, la Alerta por Violencia de Género quedó dentro de la coordinación de la instancia de la mujer, lo cual, cumplido el año, dejó en claro que no era adecuado”, señalaron en una nota del diario Cambio de Michoacán el 25 de enero.

En ese contexto es que ahora las cifras y medios documentan un incremento en los casos que deberían estar siendo atendidos prioritariamente por la emisión de esta alerta. Así lo registró recientemente la estación radiofónica Notisistema.

De acuerdo al medio local los casos de violencia en contra de las mujeres han incrementado cerca del 17 por ciento con respecto a los datos de 2015.

“En los ocho Municipios considerados en la alerta, Tlajomulco de Zúñiga es el caso más grave, al pasar de 5 a 14 asesinatos, un alza de 180 por ciento; le siguen Guadagdl lajara y Puerto Vallarta, con incrementos de 44 y 66 por ciento, respectivamente”, destaca la nota.

Por su parte el diario Mural informó que hubo un alza de 20.9 por ciento en los casos de violencia intrafamiliar de acuerdo con la Fiscalía General del Estado, donde en su mayoría eran casos relacionados con hombres que agredían a sus parejas.

Mientras que las cifras de justicia mostraron un déficit respecto a las detenciones y los procesos penales, como también documentó el periódico tapatío.

Sin voluntad política

La atención al tema por parte de las autoridades ha sido apenas en el campo operativo y burocrático, como el caso del pasado 19 de enero en el cual el Ejecutivo estatal informó de la futura presentación de una aplicación que expondrá los puntos de mayor registro de violencia y delitos contra las mujeres.

“Estaremos anunciando ya un instrumento que tendremos para todas las mujeres de Jalisco (…) donde las mujeres pueden ver qué tipo de violencia, qué tipo de delito en ocho municipios, en qué colonias”, explicó entonces el gobernador.

De igual forma el Congreso Local del Estado de Jalisco ha sido otro de los poderes del estado que han permanecido en el silencio respecto a este tema.

Limitando su labor a la aprobación de iniciativas sin que haya llamados para pedir cifras o la implementación de acciones con resultados.

Para Guadalupe Ramos, académica y experta de la Universidad de Guadalajara, este es un tema de voluntad política, porque aún cuando el Gobierno estatal reconoció la existencia de un problema grave y sistemático de violencia contra las mujeres, la actuación a un año GDL 23 del mecanismo ha dejado mucho qué desear.

“El grave problema que hay alrededor de esto es que hace falta voluntad política para hacerlo, pero hacen falta también muchas cosas para que pueda funcionar el mecanismo jurídico de la alerta y que a partir de este pueda tener un impacto en la vida de las mujeres”, expresó Ramos Ponce en entrevista con Reporte Indigo.

Además de expresar que la alerta quedó en un anuncio mediático que incluso fue obviado en el informe del gobernador aún cuando fue éste quien emitió el mecanismo hace un año.

Justicia para Imelda

Luego de poco más de cuatro años en que Imelda Virgen fuera asesinada por personas contratadas por su entonces pareja, Gilberto Vázquez Cortés, el caso se mantiene atrapado.

No se ha producido una sentencia condenatoria que haga patente la justicia que desde entonces ha pedido la familia de la víctima.

El de Imelda Virgen fue el primer caso de feminicidio tras la aprobación del tipo penal en el código de Jalisco.

Pero debido a la falla burocrática de los protocolos no se concibió como tal, reconocimiento que abogadas, familia y organizaciones civiles han hecho estos años.

Consignado como parricidio y violación, el caso de Imelda vuelve a cimbrar la coyuntura.

A un año de la fallida alerta de violencia en Jalisco, sus familiares y Alejandra Cartagena, del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (Cladem Jalisco), anunciarán hoy que el caso está a unos días de que se dicte sentencia por parte del Juzgado Décimo de lo Penal.

Sin freno

La estación radiofónica Notisistema detalló los incrementos en violencia contra la mujer del 2015 a 2016, aún con la Alerta:

180% alza en asesinatos de mujeres en Tlajomulco de Zúñiga

44% creció el índice de crímenes contra mujeres en Guadalajara

66% incrementó los casos de mujeres victimadas en Puerto Vallarta

20.9% casos más de violencia intrafamiliar, reporta la Fiscalía General del Estado