Jaque de Mancera a Bejarano

La poderosa corriente de René Bejarano está en jaque. Izquierda Democrática Nacional (IDN), la corriente que él encabeza, podría dejar de ser la más influyente de la capital del país.

Ya está casi fuera del gabinete mancerista, y ahora está a punto de perder la dirigencia estatal del Partido de la Revolución Democrática.

La elección del nuevo presidente del PRD-DF se debía llevar a cabo el sábado pasado, pero se suspendió por un acuerdo entre IDN y Nueva Izquierda.

Tras la votación pospuesta, Bejarano buscará ganar votos, según varias fuentes.

Jonathan Villanueva Jonathan Villanueva Publicado el
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Millones de pesos de prerrogativas al año
En días pasados, los llamados progresistas construyeron una candidatura fuerte y capaz de descarrilar la maquinaria bejaranista de sus pretensiones de mantener la dirigencia del sol azteca
El elegido para esta misión es Raúl Flores, ex jefe delegacional en Coyoacán,  que en los últimos dos meses ha sido el enlace de Mancera con los titulares de las demarcaciones

La poderosa corriente de René Bejarano está en jaque. Izquierda Democrática Nacional (IDN), la corriente que él encabeza, podría dejar de ser la más influyente de la capital del país.

Ya está casi fuera del gabinete mancerista, y ahora está a punto de perder la dirigencia estatal del Partido de la Revolución Democrática.

La elección del nuevo presidente del PRD-DF se debía llevar a cabo el sábado pasado, pero se suspendió por un acuerdo entre IDN y Nueva Izquierda.

Tras la votación pospuesta, Bejarano buscará ganar votos, según varias fuentes.

Pero el líder de IDN se enfrenta a una acción concertada desde el nuevo gobierno del Distrito Federal, que dejó claro que no se someterá a los intereses de un grupo de poder. 

La presencia del bloque bejaranista a nivel nacional fue la que le dio un poco de oxígeno ya que las condiciones estaban dadas para que recibiera un segundo revés, a nivel local, en menos de una semana.

Tan así, que en los últimos tres días los llamados progresistas construyeron una candidatura fuerte y capaz de descarrilar la maquinaria bejaranista de sus pretensiones de mantener la dirigencia del partido.

El elegido para hacer frente a Enrique Vargas, el candidato de Bejarano, es Raúl Flores, quien ha sido el enlace del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, con los 16 jefes delegacionales.

Sin embargo, las pugnas alcanzaron el plano nacional, y se convirtieron en la llave de emergencia que necesitaba IDN para recomponer su fuerza.

El Pacto por México

A la par de la renovación del Sol Azteca capitalino, se teje una negociación de índole federal. Se trata del llamado Pacto por México, que promueve el nuevo Presidente de la República Enrique Peña Nieto.

Este documento pretende ser la base de su gobierno a través de 95 acuerdos sintetizados en dos meses de trabajo y avalados por las principales fuerzas políticas: PRD, PAN y PRI.

Pero al interior del partido la pugna es fuerte y el grupo que comanda René Bejarano se pronunció en contra del respaldo que ofreció el dirigente nacional Jesús Zambrano a este acuerdo.

Incluso, el secretario general del partido y alfil de la corriente bejaranista, Alejandro Sánchez Camacho, dijo que al interior del PRD no hay acuerdos debido a que Zambrano firmó de manera unilateral el pacto.

IDN representa la fuerza que requiere Nueva Izquierda para concretar el acuerdo con el gobierno federal, y Bejarano necesitaba del apoyo de NI para impedir que el bloque afín al nuevo jefe de Gobierno, le arrebatara el PRD capitalino.

Por eso la decisión fue de consenso. Por eso nadie objetó que la elección del próximo presidente y secretario del Sol Azteca en el DF, se pospusiera para enero de 2013.

La estrategia 

Las acciones del GDF van más allá del discurso, ya que después de imponerse a la tribu más poderosa del Distrito Federal –Izquierda Democrática Nacional– en la definición del gabinete, ahora van por el partido.

Para ello se unificaron los líderes del Movimiento Entre Ciudadanos (MEC) que dirige Marcelo Ebrard Casaubón, quien acaba de dejar el cargo de jefe de Gobierno del DF.

El proyecto también cuenta con el aval de los dirigentes de Nueva Izquierda local, como son: Víctor Hugo Lobo,  Julio César Moreno, el asambleísta Daniel Ordoñez y su homologa Polimnia Román.

También, a la corriente Red de Unidad Nacional de las Izquierdas (RUNI) que concentra a los hermanos Gilberto y Erasto Ensástiga; Rubén Escamilla y Alejandra Barrales.

El bloque no para ahí, puesto que cuenta con el respaldo de Foro Nuevo Sol, que incluye la delegación Miguel Hidalgo vía Víctor Romo; así como Izquierda Social de los hermanos Batres.

El grupo de Mario Delgado (Vidal Llerenas y Adrián Michel) es otro que ya se sumó, de facto, a la propuesta de Raúl Flores para la presidencia del PRD-DF, así como al Movimiento por la Democracia, del exsenador Pablo Gómez y exdiputado Javier González Garza.

Todos estos grupos, acumulan una representación de más de 260 votos dentro del Consejo Político Estatal; números que por sí solos le darían la victoria al candidato de Mancera.

Por eso la preocupación de René Bejarano y su alfil Enrique Vargas va en aumentó en los últimos días.

Máxime cuando la lucha por el control del partido conlleva el manejo de 110 millones anuales de prerrogativas y la elección de los candidatos a puestos de elección popular en el 2015

El candidato

Raúl Flores es reconocido en el GDF por su lealtad, y por ello fue elegido para disputarle el partido a Bejarano.

En entrevista con Reporte Indigo explica que la capital del país vive momentos de cambios trascendentales, que requieren de un partido con nuevas ideas y propuestas.

“El gobierno de Miguel Ángel Mancera necesita tener un partido que lo acompañe en sus decisiones y afín a su proyecto”.  

Aunque mediáticamente descartó que el mandatario local esté participando en la elección, reconoció que cuenta con la simpatía del nuevo inquilino del Antiguo Palacio del Ayuntamiento.

Desde el viernes pasado se pactó una reunión entre los principales líderes para analizar las posibilidades de formar una planilla única, pero la oferta de los manceristas es una sola: para su bloque, la Presidencia del partido y para los bejaranistas, la Secretaría general.

Flores dijo que no se trata de fracturar al partido, pero que es claro que a IDN no le alcanza la presidencia, pero sí la segunda cartera más importante.

La contraofensiva 

Por el otro bando, Vargas afirma que su corriente no está “manca” y que cuentan con los números suficientes para recomponer  la elección.

“Representamos un contrapeso para el gobierno, por que esto es sano para las instituciones, desde donde se puede velar por el bien de la ciudadanía y las ideas de izquierda”.

“No queremos romper con nadie, pero sí convertirnos en un partido responsable, que no sirva al nuevo jefe de Gobierno, sino que lo acompañe en los proyectos benéficos y critique lo que está mal”.

Vargas, quien fue jefe delegacional en Azcapotzalco, sostuvo que los números siguen favoreciendo a Izquierda Democrática Nacional, pero sin duda les han restado consejeros.

“Estamos en el proceso de revisión para saber de manera clara cuántos votos podemos tener, pero por más que nos quiten seguimos teniendo mayoría”.

Hasta el cierre de esta edición las cifras de la IDN apuntaban a que su bloque, apoyado por ADN, tenía cerca de 167 consejeros, con lo cual podrían ganar el proceso interno del PRD.

Fuentes consultadas por Reporte Indigo afirman que Mancera le está ganando la partida a Bejarano y que este último no encuentra la forma de contrarrestar los ataques del gobierno.

Por eso IDN se reagrupa y espera encontrar en los próximos días una forma de repuntar en los espacios de poder. 

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