Después de dar por terminada la ronda 7 de negociaciones para negociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte y de la amenaza de Donald Trump sobre imponer aranceles sobre la importación de acero y aluminio, la relación bilateral entre México y Estados Unidos no es la mejor.
A pesar de eso, Jared Kushner, yerno y uno de los asesores más cercanos del presidente de los Estados Unidos, realizará una visita de trabajo a la Ciudad de México.
La visita de Kushner ocurrirá este miércoles 7 de marzo, según informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). El asesor de la Casa Blanca llega a nuestro país como “enviado del presidente Donald Trump”.
La cancillería mexicana puntualizó que el yerno de Donald Trump estará acompañado por funcionarios del Departamento de Estado y del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
La SRE de México informó que, durante su visita, Kushner sostendrá una audiencia con el presidente Enrique Peña Nieto, y una reunión de trabajo con el canciller Luis Videgaray.
De acuerdo con la agenda que se comunicó, la visita de Kushner a México tiene como propósito tratar diversos aspectos de la relación bilateral que existe entre ambos países, aunque no se especificó cuáles.
La visita de Jared Kushner se da después de la llamada que Trump y Peña Nieto sostuvieron en febrero, en la cual -según The Washington Post- el presidente de México hizo que su homólogo estadounidense perdiera los estribos al negarse rotundamente a pagar el muro fronterizo.
Después de esa llamada, se canceló la visita que supuestamente Peña Nieto tenía contemplada para reunirse con Trump en la Casa Blanca.
En los últimos días, Jared Kushner no ha sido incluido dentro de las reuniones de inteligencias del gobierno estadounidense, situación que coincide con lo publicado por The Washington Post la semana pasada.
De acuerdo con el medio estadounidense, los gobiernos de México, China, Israel y los Emiratos Árabes habrían discutido la forma de manipular al yerno y asesor senior de Trump para tratar de conseguir alguna clase de ventaja política, aprovechando la “falta de experiencia” en temas de política internacional de Kushner.
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