La Marina difundió que el joven se encargaba de coordinar los envíos de cocaína y heroína al país vecino
Bastó que el gobierno de Estados Unidos lo pidiera para que México acatara la orden.
Dos semanas después de que fuera inscrito en la “lista negra”, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, supuesto hijo de “El Chapo” Guzmán, fue capturado en Zapopan, Jalisco.
Fue el vecino del norte quien puso el dedo en la llaga en torno a Joaquín “El Chapo” Guzmán y su familiar, pero desde la semana pasada fue más que evidente su interés en el capo. Justo en el clímax de las campañas electorales.
En México, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, alias “El Alfredillo” no cuenta con ninguna orden de aprehensión.
Lo buscan los Estados Unidos, donde existe una orden de detención girada por una Corte de Distrito con sede en Illinois.
En cuestión de horas la inteligencia mexicana y estadounidense lo ubicaron en Jalisco. Sobre “El Alfredillo” pesa también orden de extradición emitida por EU.
Desde muy temprano ayer jueves por la mañana corrió el rumor de su captura.
Por la tarde, fue presentado en las instalaciones de la SIEDO junto con otro joven, Daniel Beltrán Ríos, en el Distrito Federal, luego de haber sido trasladado en un avión de la dependencia.
A pesar de que José Luis Vergara, vocero de la Marina informó que la captura fue resultado de un trabajo de inteligencia que llevó más de seis meses, llamó poderosamente la atención un detalle: su presentación ante los medios como “el supuesto hijo del Chapo”.
¿Acaso no tienen la certeza de que el joven exhibido públicamente sea hijo del capo?
“El Gordo” o “El Alfredillo” es hijo de María Alejandrina Salazar y de acuerdo con la Semar, es encargado de manejar los bienes de la organización criminal que encabeza su padre: el Cártel del Golfo.
No hubo disparos durante la supuesta captura en la que se le decomisaron 135 mil dólares en efectivo y 195 mil pesos, dos armas largas, dos cortas y cuatro granadas.
Algo queda claro, el “supuesto hijo del Chapo” será presuntamente entregado al gobierno de Estados Unidos, que busca procesarlo por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita y lavado de dinero.
La Marina difundió que el joven se encargaba de coordinar los envíos de cocaína y heroína al país vecino.
La captura de “El Alfredillo” reactiva el gran pendiente del gobierno de Felipe Calderón y su cruzada contra el narcotráfico. Y “El Chapo”, ¿cuándo?
Guzmán Loera es el capo del narco más poderoso de México que cuenta con operaciones hasta en Europa. Justo a principios del sexenio de Vicente Fox en 2001, logró fugarse de la cárcel de máxima seguridad de Puente Grande, en Jalisco.
Desde esa fecha, las autoridades solo han alcanzado a sus hijos y otros miembros de su familia, pero nunca al capo que presuntamente está casado con Ema Coronel Aispuro, sobrina del extinto Nacho Coronel, asesinado durante un operativo, también en Jalisco.
Y como ocurre luego de las grandes capturas de capos o sus familias, algunos vaticinan recrudecimiento de la violencia en el ya de por sí devastado territorio mexicano.
En las redes sociales la captura del supuesto hijo de “El Chapo” se politizó. Algunos cuestionaron si la detención se usará como trofeo.
¿Beneficiará a Josefina Vázquez Mota?
