Diana es una joven que, a decir de su madre, tenía una rutina que pocas veces rompía y, cuando lo hacía, avisaba a sus seres queridos sobre sus planes.
Ella desapareció el 11 de enero, después de que su madre la encaminara a la estación del Metro UAM-I, ubicada en la alcaldía de Iztapalapa, e ingresará a los túneles por donde corre el gran gusano naranja.
Información de La Silla Rota refiere que la madre reportó la desaparición de Diana ese mismo día a las 8 de la noche pues no llegó a casa a las 4 de la tarde, como acostumbraba.
Las copias del boletín de desaparición se pueden observar aún en las avenidas y estaciones del Metro por las que Diana realizaba su recorrido diariamente: de la estación UAM-I a Garibaldi y de ahí a Salto del Agua para dirigirse a Tacubaya en donde transbordaba con rumbo a la estación Auditorio, donde se bajaba para caminar rumbo a su escuela.
Diana está inscrita en la Escuela Normal de Especialización, ubicada en Campos Elíseos 467, en Polanco, en donde directivos de la misma informaron a sus familiares que aquel 11 de enero nunca llegó a las instalaciones por lo que, se especula, su desaparición se dio en alguna estación del Metro.
La última vez que fue captada por las cámaras de vigilancia de este sistema de transporte fue en el transbordo de la estación Salto del Agua, aquel que conecta las líneas 8 y 1.
Hasta ahora, lo único que se sabe es que el celular de Diana se encuentra en Nuevo León, de acuerdo al testimonio que la señora Martina, madre de la joven, brindó al medio arriba citado.
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