La purga del Sector salud de Jalisco
El gobernador Enrique Alfaro destituyó a 14 directivos del sector salud local luego de que Jalisco fuera el estado con más enfermos y fallecidos por dengue en 2019, y tuviera múltiples señalamientos de corrupción, aunque mantuvo en su cargo al titular de esa dependencia
Luis HerreraLa grave crisis de dengue en el 2019 y los señalamientos de anomalías e ineficiencia impactaron en el sector salud de Jalisco con la remoción de 14 funcionarios en cargos directivos, aunque el secretario Fernando Petersen Aranguren permanece en su puesto.
El gobernador Enrique Alfaro Ramírez cesó a la titular del Organismo Público Descentralizado (OPD) Servicios de Salud, Consuelo Robles Sierra, pero reafirmó al titular de la Secretaría de Salud Jalisco, Petersen Aranguren, a quien se le ha atribuido la respuesta deficiente y tardía ante el dengue.
Tanto la Secretaría como el OPD rindieron malas cuentas a los jaliscienses en 2019: hicieron del estado el de mayor incidencia de dengue y el de más muertes por esta enfermedad a nivel nacional (con 11 mil 727 y 49 respectivamente).
También le dieron entrada al grupo de empresas conocido como el “Cártel de la Sangre” y efectuaron compras viciadas por conflicto de interés.
El estado ha intentado justificar la salida de los funcionarios del sector salud con la llegada del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), pero éste sector fue uno de los que arrojaron peores resultados en el primer año de la gestión de Alfaro Ramírez, rivalizando solamente con el de seguridad pública.
Cuando se le cuestionó al jefe de gabinete del Gobierno de Jalisco, Hugo Luna Vázquez, si la razón específica de estas salidas se debían a la crisis del dengue y los señalamientos de irregularidades en compras efectuadas particularmente por el OPD Servicios de Salud, contestó que buscaban solucionar tres grandes problemas.
“El gran descontrol administrativo que está perfectamente visible para todos en términos de todos los señalamientos que ha habido, no solo de (Antonio) Cruces Mada, (exsecretario de Salud), sino de varios secretarios de salud. Ese es uno de los grandes retos con el que nos enfrentamos.
“El segundo tiene que ver con la bajísima cobertura certificada que tenían los centros de salud y la baja calidad en la que se encontraban en su momento. Y el tercero, ‘en que por mucho que hubiera un esfuerzo, si no había un diseño institucional apropiado, era imposible que nosotros pudiéramos llegar a los niveles de servicios de salud que queríamos tener’”.
Las tres plagas
La Secretaría de Salud Jalisco y el OPD Servicios de Salud enfrentaron tres sucesos en el 2019 que les ocasionaron múltiples críticas a sus titulares, al grado de que Morena solicitó hace meses su destitución y promovió juicios políticos en su contra.
El primero y peor de todos fue la enfermedad del dengue. Jalisco no solo fue líder nacional en enfermos y fallecidos por ese padecimiento, sino que registró un aumento del 342.36 por ciento en el número de casos de 2018 a 2019 (pasó de 2 mil 651 a 11 mil 727), y un incremento del 716.66 por ciento en muertes por ese mal (pasó de 6 a 49 en esos años).
Tanto el secretario Petersen Aranguren, como la ahora extitular del OPD, Robles Sierra, tienen señalamientos por reaccionar tardíamente a la expansión del dengue y no haber efectuado a tiempo las labores preventivas que amerita ese padecimiento, como la nebulización de las colonias, e incluso de haberlo hecho con insecticida caduco (luego se informaría que, pese a estar vencido, el proveedor había garantizado que seguía siendo útil).
La dupla Petersen Aranguren y Robles Sierra también le dio entrada a la firma Intermet, filial de Impromed, una de las empresas del llamado “Cártel de la Sangre”, a la cual le dieron dos contratos, uno por “Servicio Integral y Software para Banco de Sangre” y otro por “Servicio Subrogado de Pruebas de Laboratorio y Estudios de Gabinete”.
El “Cártel de la Sangre” es un grupo de empresas indagado por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) por presuntamente haber aplicado prácticas monopólicas en el otorgamiento de servicios de estudios de laboratorio y banco de sangre (según su expediente DE-011-2016).
Finalmente, Robles Sierra es investigada por la Contraloría debido a que el OPD que encabezaba tenía entre sus proveedores a la empresa Llantas Tapatías donde figura su esposo, Víctor Manuel Guzmán Villaseca, que resultó beneficiario de una asignación de 3 millones 173 mil 560.58 pesos por servicio de talleres mecánicos.
La descoordinación del sector salud
Aunque el jefe de Gabinete de Jalisco, Luna Vázquez, asegura que la “reingeniería” en el sector salud será profunda y en concordancia con la entrada en operación del Insabi, no mencionó que exista algún plan para fusionar a la Secretaría de Salud y al OPD Servicios de Salud locales.
Hasta antes del actual gobierno, ambos funcionaban como un mismo organismo, por lo que el secretario era también quien encabezaba el OPD. Sin embargo, esta administración los separó concentrando la arista operativa en el OPD, y la rectoría en la Secretaría.
Esta separación generó críticas en el sentido de que sus titulares estaban descoordinados y no tenían una buena relación entre sí, lo que habría impactado desfavorablemente en las políticas de salud, pero esto nunca fue reconocido.
Lo que señala al respecto Luna Vázquez es que “en el ánimo de construir con la Federación un esquema que haga viable los objetivos finales para la ciudadanía pues también nos llevó a replantear por completo no solo en términos de puestos funcionales, sino incluso en las próximas semanas haremos un rediseño organizacional”.