La ‘vaquita’ que confronta

La idea de la “coperacha” para reunir el dinero y pagar la fianza de los siete seudoanarquistas encarcelados por golpear a funcionarios del gobierno capitalino surgió del diputado federal Roberto López Suárez.

Él, junto con otros legisladores federales, integrantes de la Mesa Directiva del Grupo Parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados, solicitaron una reunión urgente con el secretario de Seguridad Pública de la capital, Jesús Rodríguez Almeida.

El objetivo de aquel encuentro solicitado por los perredistas era conocer la situación de los detenidos el pasado 10 de junio durante la marcha para recordar el llamado “Halconazo” de 1971.

Luego de que en esa reunión con el titular de la policía preventiva se le explicaron los desmanes que protagonizaron, el también presidente de la Comisión de la Cámara Baja que investiga el caso Monex, López Suárez, propuso pagar la fianza de 170 mil pesos fijada por el juez para cada uno de los siete detenidos.

Invitan a la cooperación

El pasado lunes 17 de mayo, otra de las diputadas federales del PRD involucradas con el tema del pago de la fianza de los seudoanarquistas, María de Lourdes Amaya Reyes, le expresó a su compañero de bancada, José Ángel Ávila Pérez, exsecretario de gobierno del GDF, que desde el viernes 14 lo estaba buscando para que se sumara a la coperacha.

Le platicó de la reunión que sostuvieron con el jefe de la policía, a partir de la cual el diputado Roberto López, propuso que ellos ayudaran a pagar los montos de las fianzas para conseguir la libertad de los siete jóvenes que se estaban en el Reclusorio Oriente.

Así lo narra José Ángel Ávila, quien asegura en entrevista con Reporte Indigo haber rechazado tajantemente la propuesta de apoyar económicamente el pago de las fianzas que facilitarían la libertad de los procesados.

“Yo no aporté. Me negué rotundamente, es una locura”, asegura, luego de que su nombre saliera a relucir como uno de los diputados perredistas que aportaron para el pago de fianzas en una afán de confrontar al Gobierno del Distrito Federal y su titular, Miguel Ángel Mancera Espinosa.

“Fue hasta el lunes (17 de junio) cuando yo me enteré por Lourdes Amaya que ellos (los de la Mesa Directiva del PRD en la Cámara de Diputados) intentaban liberar a los detenidos y habían propuesto una cooperación”, explica.

La mesa directiva del PRD en el Congreso está integrada también por los diputados Martha Lucía Míchel Camarena, extitular del Instituto de Mujeres del Distrito Federal durante el sexenio de Marcelo Ebrard; Lizbeth Rosas Montero y Aleida Alavez Ruiz, estas dos últimas ligadas a la corriente de René Bejarano, líder de la corriente IDN.

Alavez Ruiz es señalada como una de las principales responsables, junto con Roberto López, de impulsar la cooperación para el pago de fianzas de los detenidos en una especie de “fuego amigo” que busca golpear, provocar y desafiar a la administración capitalina.

Sin embargo, José Ángel Ávila se deslinda de esta acción y, sobre todo, de cualquier tipo de revanchismos contra el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.

“El que suscribe no participó directa, indirecta o parcialmente en el pago de fianzas de ningún detenido”, puntualiza en una carta enviada a Reporte Indigo.

Extrañas conexiones

En su edición ¿Activistas o golpeadores a sueldo? del miércoles 19, Reporte Indigo documentó la conexión que existe entre algunos de los líderes más radicales de los seudoanarquistas, como Jessie Alejandro Montaño Sánchez, con personajes de la política, específicamente Gerardo Fernández Noroña, exdiputado del PRD y fundador de este partido.

Montaño, quien reconoce tener antecedentes militares y policiales, se ha convertido en uno de los activistas más violentos que participa continuamente en eventos de protesta en la Ciudad de México.

Montaño, a través de su cuenta de Facebook, hace alusión al político Gerardo Fernández Noroña como alguien con quien tiene una comunicación estrecha.

Ambos han sido fotografiados juntos. Además de que Montaño y el grupo de jóvenes que dirige han sido captados durante algunos actos de protestas afuera del Senado de la República, que fueron convocados por el exdiputado.

Pese a la acusación de ultraje a la autoridad, daños a la propiedad y ataques a la paz pública, delitos considerados no graves, pudieron salir en libertad bajo fianza, por lo que podrán llevar el resto del proceso en libertad.

En la recta final de esta historia, los siete detenidos durante los disturbios del pasado 10 de junio pagaron la fianza que montó el juez, quedaron en libertad, entre ellos, Diego Mora Cardoso, Fredy Rosete Arizpe, Jorge Alejandro Velázquez Picasso y Carlos Esteban Jiménez Martínez.

Este último ligado abiertamente a las juventudes del Partido del Trabajo, aunque al salir del reclusorio se proclamaron como integrantes del Frente Oriente.

Con la frase de “no somos vándalos, somos luchadores sociales”, los liberados se comprometieron a continuar con su lucha. 

El pasado lunes 17, día que los siete salieron del Reclusorio Oriente, uno de sus defensores de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos hizo hincapié en que la fianza fue pagada por los familiares.

Mientras, en otro frente se ventilaba el verdadero origen de los recursos.