El millonario, opaco y discrecional programa de becas para estudiantes de nivel medio y superior que implantó la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) en 2010, prácticamente ha desaparecido.
Pero solo en teoría porque en la práctica simplemente se transformará y cambiará de beneficiario: la poderosa corriente bejaranista, ya que la presidencia de ese órgano legislativo entregó el control del proyecto a los diputados locales de Izquierda Democrática Nacional (IDN).
Y la primera acción de los bejaranistas será cancelar las becas estudiantiles, pero para aterrizar la promesa de campaña de la ahora senadora Dolores Padierna: computadoras gratuitas.
Por eso las auditorías que mandó hacer la Comisión de Gobierno al Fideicomiso de Apoyo a la Educación y al Empleo de los Jóvenes del DF (Fijov) salieron limpias y sin mayores contratiempos.
Esto ocurre a pesar de que la V Legislatura se llevó 100 millones de pesos de esa partida en los bonos de marcha que se otorgaron los 66 legisladores salientes de manera disfrazada, pues a la larga saldrán ganando.
En consecuencia, en el interior de la fracción parlamentaria del PRD comenzó a formarse una contracorriente que ve en Manuel Granados, presidente de la ALDF, un bejaranista más.
Sin embargo, los opositores a la IDN optaron por esperar a que pase el reparto de cargos en el gabinete de Miguel Ángel Mancera (próximo jefe de gobierno), antes de abrir un frente de batalla en contra del sucesor de la curul de Alejandra Barrales.
Una historia de tropiezos
A finales de 2010 y en la víspera de que se eligiera al candidato de la izquierda a la jefatura de Gobierno del DF, la entonces presidenta de la Comisión de Gobierno, Alejandra Barrales, creó este fideicomiso.
Con una inversión de 150 millones de pesos se autorizó el programa de becas, que utilizó la ex diputada para catapultar sus aspiraciones.
Incluso, en diversas ocasiones, asambleístas de todas las fracciones acusaron a Barrales de darle un manejo electoral y arbitrario al fideicomiso, ya que nunca se dieron a conocer las reglas de la operación ni el padrón de beneficiarios.
Al término de 2011, los diputados afines a la otrora presidenta decidieron mantener vivo este proyecto, pero con menos recursos, por lo que se aprobaron solo 100 millones de pesos para el presente ejercicio fiscal.
Pero a la par, firmaron un acuerdo, del que Reporte Indigo posee una copia, en el que autorizaron trasladar los recursos del fideicomiso al capítulo 4000, en el que están las prerrogativas.
Todo con la única intención de repartirse ese dinero en los bonos de marcha, disfrazados en siete acuerdos inverosímiles para sus labores legislativas. Y así sucedió.
Cuando la VI Legislatura tomó posesión, detectó estas irregularidades. De manera informal aseguró que iban a investigar a fondo y denunciar a quienes resultaran responsables.
En la práctica, la conducta de los líderes parlamentarios ha sido muy distinta. En el PRD no se hicieron públicas las irregularidades y en el resto de las bancadas solo hubo silencio.
La versión oficial
En entrevista con Reporte Indigo, el responsable administrativo del fideicomiso, Miguel Ángel Zamorano, explicó que la reciente auditoría la hizo la empresa Zaragoza Rocha y Asociados SA de CV.
De acuerdo con su versión, los anteriores legisladores acordaron reorientar el gasto administrativo, los pagos de honorarios, las compras de mobiliario y la adaptación de lujos en sus módulos de atención a las becas.
El padrón de beneficiarios del Fideicomiso del Fondo de Apoyo a la Educación y el Empleo de las y los Jóvenes del Distrito Federal es de 39 mil 349 estudiantes, según su explicación.
Pero en la práctica es imposible encontrar a todos los beneficiarios. Ésta es la versión de los propios diputados que se quejaron de no poder ofrecer este apoyo a sus representados.
“Tenemos con AL-UNAM Edúcate, mil 999 alumnos; con Fundación UNAM, 800; el IPN, mil 584; con la UACM hay dos tipos de becarios: se dieron recursos para crear aulas virtuales de educación a distancia en sus cinco planteles y además se les otorgan mil 200 pesos, que es otro tipo de beca a los jóvenes que cumplen con ciertos requisitos.
“En el segundo caso, son 337 jóvenes de la UACM, más 14 mil 859 alumnos que se benefician de la infraestructura informática”, dijo Zamorano.
Explicó que los alumnos beneficiados tienen un expediente donde se estipulan las reglas de operación para acceder al programa de becas. Y con 10 escuelas particulares se tienen 4 mil apoyos directos. Este último apartado ha sido el más cuestionado desde la creación del fideicomiso.
Mas allá de los números, confirmó que el programa ha venido funcionando con los 150 millones de pesos que se autorizaron en el primer año (2011) y que los 100 millones de pesos restantes no están disponibles.
De acuerdo con el Informe actualizado a octubre 2012, que presentó el Fideicomiso del Fondo de Apoyo a la Educación y al Empleo de las y los Jóvenes del Distrito Federal están comprometidos 123 millones 602 mil 340 pesos, de los 150 millones que se entregaron.
En esa entrevista, el responsable se pronunció por la no desaparición del fideicomiso y consideró un error eliminarlo.
El proyecto
El fideicomiso ya está en manos de la VI legislatura local. Y la encargada de recibirlo fue la bejaranista Ariadna Montiel, que trazó la ruta para convertir lo en un programa de computadoras gratis. Fuentes consultadas confirmaron que la propuesta se aterrizará a través del Comité Técnico del Fideicomiso, que será elegido entre hoy y el próximo martes.
Diversos diputados que solicitaron omitir su nombre aseguraron que no están de acuerdo con las intenciones de la IDN, y que se trata de un tema que ya es del conocimiento de todos los asambleístas.
Es necesario recordar que en el periodo de campaña, la ahora senadora Dolores Padierna se comprometió a poner en marcha un programa de computadoras gratuitas, un asunto por el que ha recibido muchos reclamos.
Por lo pronto el tema está en manos de los bejaranistas Ariadna Montiel y el Tesorero de la ALDF, Pablo Trejo.