La alianza entre el PRD y el Partido del Trabajo en la Ciudad de México sigue sin cuajar.
En una de las últimas negociaciones, el Sol Azteca en el Distrito Federal ofreció al PT cinco distritos y la dirección de cinco Centros de Desarrollo Infantil (CENDIS) a cambio de amarrar la coalición de próximas elecciones para diputados y jefes delegacionales.
Trascendió que Alberto Anaya, responsable de alcanzar el posible acuerdo con Raúl Flores, presidente del PRD en el Distrito Federal, no está satisfecho con los distritos que les ofertan, informan quienes conocen de acerca las negociaciones entre ambas instituciones políticas.
Hasta ayer, el dirigente local del Sol Azteca, Raúl Flores, no pudo asegurar nada respecto al destino en común entre el PRD y el PT.
El partido que desde hace años tiene el poderío en la capital del país dejó hasta el final de las negociaciones al Partido del Trabajo, pues primero negoció con Nueva Alianza.
Se repartió los espacios entre sus corrientes internas y hasta ahora dirime cinco distritos que son vistos como migajas, zonas en las que el PRD no es mayoría y sería difícil ganar.
“No están conformes los del PT con los distritos que les dejó Raúl, quien primero se sentó con el Panal, luego hizo su consejo, su acuerdo y les dejaron los distritos que no quiso nadie”, explica uno de los negociadores.
Los territorios
De acuerdo con esta información, los distritos que el PRD-DF puso sobre la mesa son el Distrito 2 local en el perímetro de Gustavo A. Madero, cercano a la Basílica de Guadalupe, donde los indicadores apuntan una fuerte presencia del Partico Acción Nacional.
El segundo corresponde al Distrito 17 en Benito Juárez, que el PRD ya le entregó a Leticia Varela, esposa de René Cervera, operador político de Marcelo Ebrard Casaubón.
El espacio sería intercambiable para el PT, sin embargo, es uno de los territorios etiquetados de “azul” en alusión a la predominancia del panismo en esa demarcación.
El tercer distrito es el 27 en la delegación Iztapalapa, que tiene la característica de ser el nicho electoral de la exdelegada Clara Brugada.
Brugada compite en estas elecciones para repetir ahí como jefa delegacional, ahora por Morena, de Andrés Manuel López Obrador.
“Una victoria ahí del PT, suena difícil porque ese distrito lo controla la gente de Clara”, explican.
El cuarto distrito que forma parte de las negociaciones es el 24 local, también de Iztapalapa, territorio que se adjudican los hermanos Efraín y Carlos Augusto Morales, del PRD, por lo que para ganar ese espacio, refieren, se necesita de su apoyo.
Mientras que el quinto distrito es lo mejor de la propuesta que puso sobre la mesa el PRD al PT.
El espacio electoral se encuentra en Álvaro Obregón, territorio dominado por el exdelegado y también diputado local, Leonel Luna, que se considera uno de los dirigentes mejor posicionados en el Sol Azteca a nivel local.
“Actualmente Leonel está en muy buenas condiciones al interior del PRD, si él quiere apoyar no habría problemas para el PT”, detalla la fuente que participa en el cabildeo del partido.
La línea de Mancera
Debido a que los distritos ofertados no terminan por convencer a la dirigencia del PT, Alberto Anaya habría propuesto para concretar dicha alianza que le facilitaran ingresar a la estructura del Distrito Federal, de ahí que la respuesta del PRD-DF habría sido la dirección de los Centros de Desarrollo Infantil (CENDIS).
Raúl Flores García, quien se mantuvo en el centro de la polémica durante las negociaciones internas con las tribus de su partido, lamentó que los del PT hayan optado por el PAN en el Estado de México.
En medio de ese estire y afloje, el tiempo para registrar las candidaturas se agota, pues el plazo marcado contempla del 10 al 20 de marzo.
A este plazo se le suma las diferencias al interior del propio Partido del Trabajo, ya que mientras Alberto Anaya puja por cuajar la alianza con el PRD en la Ciudad de México, existen otros personajes con voz al interior del PT, como Adolfo Oribe Bellinger, que han acusado al jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, de desdeñar la coalición con los petistas y priorizar desde hace mucho a Nueva Alianza.
El también diputado por el PT, Adolfo Oribe, ha ventilado a los medios que Mancera Espinosa es quien directamente echó abajo las negociaciones.
Las declaraciones obligan a Raúl Flores a desmentir la intervención del jefe de Gobierno en el tema electoral, pese a que en el edificio de gobierno de Plaza de la Constitución el mandatario capitalino ha encabezado reuniones con los candidatos.
Rompen en Edomex
Mientras que en el Distrito Federal las negociaciones se mantienen empantanadas, en el Estado de México, para sorpresa y molestia de muchos, el PT optó por ir en alianza con el Partido Acción Nacional (PAN).
La decisión de los petistas en aquella entidad obligó al PRD estatal a presentar un desistimiento de alianza, que previamente había notificado ante las autoridades electorales.
En el Estado de México, algunas voces del PT (que por años se mantuvo fiel a Andrés Manuel López Obrador) habían manifestado que una alianza con el PAN era impensable por posturas ideológicas abismales entre ambos organismos políticos.
Pese a ello, esta semana se anunció que con el PRD no hubo acuerdo para consumar la coalición y que en las próximas elecciones el PT sería el fiel de la balanza del PAN.