En los últimos días el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, ha acaparado la atención mediática por sus polémicas declaraciones, exigirle recursos a la federación y desestimar las cifras de número de contagios y fallecidos por Covid-19 que ha dado a conocer la Secretaría de Salud federal.
De acuerdo con la senadora por Baja California, Gina Cruz, la atención de Bonilla a la pandemia en su entidad no ha sido oportuna y sus exigencias comenzaron cuando salió a la luz un video del actor Eugenio Derbez en el que pedía recursos para los médicos baja californianos.
“Hay escasez de insumos, sobre todo para los médicos que están al frente de la batalla, tanto en las instituciones del sector salud estatal y por supuesto en el IMSS. Esto llamó la atención de las autoridades locales por el video que subió el actor Eugenio Derbez, porque las autoridades locales siempre desestimaban los que algunos actores políticos o la misma sociedad decía.
“Después de la demanda de Eugenio Derbez, se suma el gobernador y vienen representantes de Zoé Robledo (director del IMSS) a firmar un contrato de colaboración y a decir que sí hay insumos, pero curiosamente el gobernador Bonilla no estuvo presente en la reunión”, revela la legisladora panista a Reporte Índigo.
La albiazul comenta que las polémicas de Bonilla en el manejo de la pandemia comenzaron cuando el gobernador tomó la decisión de cerrar las puertas y paralizar la actividad de la empresa Smith Healthcare, dedicada a la creación de respiradores artificiales en Tijuana, por negarse a vender una parte de su producto a le entidad.
“Hace unos días el gobernador cerró una empresa que produce ventiladores, diciéndoles que si no dejaban ventiladores en Baja California que iba declararlos como una empresa no esencial. Ha sido muy controvertido este tema.
“Prácticamente va y los amenaza, como no dejan insumos los cierra, interviene incluso el embajador de Estados Unidos en México y el canciller, nosotros sabemos que el mismo presidente le llamó para pedirle que le bajara”, agrega la panista.
La tercera polémica de Bonilla llegó cuando el mandatario estatal declaró que 13 internos de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Baja California, contagiados con coronavirus, debían de regresar a apoyar en cuanto se curaran.
“También dijo que iba a contratar a médicos y enfermeras retiradas, aunque son de los grupos más vulnerable. El mismo gobernador salió a decir que ellos ya estaban acostumbrados a poner su vida en riesgo”, agregó Gina Cruz.