Las reglas de la Guardia
En el Senado de la República fueron aprobadas las leyes secundarias que regirán las funciones de la Guardia Nacional, tal y como ocurrió con la reforma constitucional para su creación, ayer también se alcanzó un acuerdo por unanimidad
Eduardo BuendiaEn el Senado de la República las bancadas volvieron a tener un acuerdo unánime, justo como el logrado a finales de febrero, donde todos los legisladores votaron a favor de la reforma constitucional para la creación de la Guardia Nacional.
Ayer, en otro episodio de cooperación, los representantes de los sectores partidistas en la Junta de Coordinación Política de la Cámara alta anunciaron por la mañana su voluntad para aprobar las leyes secundarias en esta misma materia.
Por la tarde, este consenso se concretó, pues las cuatro leyes secundarias fueron aprobadas en su totalidad con 114 votos a favor, 0 en contra y una abstención, listas para continuar con su camino legislativo en la Cámara de Diputados.
Dichas leyes, serán las que regirán y limitarán los alcances que tendrá este cuerpo de seguridad, con el que el Gobierno federal, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador ha puesto sus esperanzas para contener la crisis de inseguridad que impera en México.
En conferencia de prensa, el líder de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, señaló que para esta votación hubo una actitud racional y constructiva para construir el marco normativo de la Guardia e informó que la elaboración de las cuatro leyes referidas tardó 40 días, en un proceso de análisis y modificación de 229 artículos en total.
En contraste con los dichos del morenista, en la Cámara de Diputados la oposición asegura que el procedimiento de discusión de estas leyes fue cerrado, pues debió trabajarse de manera conjunta o en Parlamento Abierto, como ocurrió con la reforma constitucional que creó el nuevo cuerpo armado.
No obstante, antes de que el Pleno emitiera su aval a las cuatro leyes, Monreal Ávila, quien también preside la Jucopo en el Senado, explicó que las iniciativas de las normas secundarias se presentarían ante la Mesa Directiva y que las comisiones de Puntos Constitucionales, de Seguridad Pública y de Estudios Legislativos, serían las encargadas de elaborar los dictámenes de estas legislaciones.
Señaló que con el consenso alcanzado en la Cámara alta, pasaría al Pleno la misma tarde del martes para ser votadas con un posicionamiento por cada grupo parlamentario y precisó que no habría reservas, según el acuerdo alcanzado, situación que se reafirmaría más tarde.
Los puntos clave
El proyecto de Ley Orgánica de la Guardia Nacional expone la naturaleza civil de esta corporación y delimita las funciones de los elementos que la integrarán.
La Ley se compone de siete títulos, los cuales regulan la integración de la Guardia, la carrera, el armamento, el régimen disciplinario y de responsabilidades; la coordinación y colaboración con otras autoridades, así como los controles aplicables a la gestión de sus funciones.
El objeto de la nueva corporación, estipula el artículo 5, es realizar la función de seguridad a cargo de la Federación y también puede hacerlo a nivel estatal y municipal.
Las operaciones del organismo estarán a cargo del Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo y, como segundo al mando en la estructura orgánica, estará el comandante Luis Rodríguez Bucio, designado por el presidente López Obrador, a inicios de abril.
Por su parte, la propuesta de la Ley Nacional del Registro de Detenciones argumenta que México se encuentra inmerso en una grave crisis de derechos humanos, señalada incluso por organismos internacionales como la Organización de la Naciones Unidas o la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Es por ello que el objetivo del Registro de Detenciones es contar con un banco de datos que brinde información actualizada sobre todas las personas detenidas en el territorio nacional, apegada al nuevo proceso penal acusatorio y unificando los padrones policiales para efectos de investigación.
El esquema para la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza pretende normar las medidas coercitivas y el armamento oficial para el desempeño de sus funciones.
El artículo 5 de este proyecto señala que “el uso de la fuerza se hará en todo momento con pleno respeto a los derechos humanos”. El siguiente artículo se enfoca en el cómo se deben conducir los elementos de la Guardia Nacional en las acciones de seguridad.
Entre los puntos de regulación de la fuerza de encuentran la persuasión, que busca el cese de la resistencia mediante el uso de indicaciones verbales o de la simple presencia de la autoridad; sujeción, que es la utilización de la fuerza física con moderación para lograr el control o aseguramiento de los individuos.
Por último, la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, sufrirá cambios para que exista una coordinación entre Federación, estados y municipios con la modificación a esta normativa.
Discusión cerrada
Pese al acuerdo unánime alcanzado en el Senado por las bancadas para la aprobación de las leyes secundarias de la Guardia Nacional, Adriana Dávila Fernández, diputada del PAN, considera que la discusión debió incluir a ambas cámaras del Congreso y no ser una discusión cerrada entre senadores.
Dávila Fernández, quien es secretaria de la Comisión de Seguridad en San Lázaro, agregó que el hecho de que la Guardia Nacional se encuentre ya funcionando en lugares como Veracruz sin estar aprobadas las leyes secundarias, preocupa en materias como el uso de armamento exclusivo de las Fuerzas Armadas y la falta de capacitación de estos elementos .
Para Emilio Álvarez Icaza, senador sin partido, la discusión sobre las leyes secundarias, debió contar con la participación de organizaciones de la sociedad civil y funcionarios en materia de seguridad para que aportaran a los proyectos de las legislaciones.
El senador, quien fue el único funcionario que se abstuvo en la votación, agregó que la Ley Orgánica de la Guardia Nacional tenía como límite el 25 de mayo para su aprobación, mientras que para las otras leyes se tenía de plazo hasta el 4 de junio.
“No hay necesidad de no escuchar expertos, a la sociedad civil y a quien la va a aplicar (la ley), considero que es un error legislar así”, concluyó el legislador.