La inseguridad es el tema que preocupa a más del 60 por ciento de los mexicanos de 18 y más años, seguido del aumento de precios y el desempleo, revela la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2017 (Envipe), realizada por el Inegi.
La Envipe, estudio que tiene como propósito generar información sobre la victimización delictiva en el país desde el 2010, registró el índice más alto de preocupación por la inseguridad en el 2016.
Este incremento de la intranquilidad por la inseguridad, se vio reflejada también en un aumento de las víctimas de delitos en el territorio nacional, que fue de 24.2 millones de personas en 2016; y representó un incremento de 0.6 por ciento con respecto al año anterior.
Es decir, que el año pasado una de cada tres personas con la mayoría de edad fue asaltada, extorsionada, defraudada o sufrió amenazas verbales.
La variación al alza en porcentaje de personas víctimas de la delincuencia, la encabeza Baja California, que en 2015 fue de 30%; y para el 2016, la cifra llegó a 40%. Le sigue de muy lejos Sonora, entidad en donde el porcentaje pasó de 29 a 33% en el mismo periodo; y Campeche, estado donde la variación fue de 19 a 23% en un año.
TAMBIÉN SUBE LA PERCEPCIÓN DE INSEGURIDAD
Así como hubo más personas que fueron víctimas de delitos en el 2016, la percepción de inseguridad también tuvo una elevación del 1%. Sin embargo, hubo entidades en las que este porcentaje se elevó hasta en 6.7. Es el caso de Campeche, que coincide con ser una de las localidades con mayor incremento de la delincuencia.
Baja California Sur, es la segunda entidad en la que su población se sintió más insegura y la cuarta en donde se elevó la delincuencia. Su percepción de inseguridad en 2016 en comparación con 2015 vio un incremento del 6.6%.
En tercer lugar se encuentra la Ciudad de México, con una situación atípica, debido a que creció la percepción de inseguridad en su población (6.5%), pero fue uno de los pocos lugares en los que disminuyó la prevalencia delictiva.
AUMENTO DE PRECIOS
No es una casualidad que durante el 2016, 30.6 millones de mexicanos hayan considerado al aumento de precios como su principal preocupación. En ese año, los precios al consumidor se elevaron 3.36%; la mayor inflación en los dos años previos.
Los precios en productos básicos de la alimentación en México, tuvieron un impacto de aumento hasta de una tercera parte, como es el caso del frijol y el azúcar, que se encarecieron un 28 y 30%. Otro producto que es consumido en grandes cantidades por las familias es el aguacate, que su precio se incrementó en un 58%.
Aunado a ello, el costo de energéticos como el gas o las gasolinas, registraron un repunte equivalente al 2.5%, previo a la liberación del precio de las gasolinas que impactó en la inflación en el 2017.
El aumento de precios es la primera vez que figura en las dos primeras posiciones de los temas que más preocupan a los mexicanos. En los estudios anteriores, la falta de empleo figuró en segundo lugar.
