Llega la austeridad al Senado; se acabaron las comidas y bebidas especiales durante las sesiones
Tanto los grupos parlamentarios como los órganos de gobierno deberán de despedirse de los alimentos en las reuniones y deberán de reducir su estructura administrativa
Rubén ZermeñoLa austeridad llegó a la Cámara Alta. La Junta de Coordinación Política, la Mesa Directiva y la Comisión de Administración de la Cámara de Senadores firmaron el Acuerdo por el que se establecen criterios y medidas de austeridad presupuestal en el Senado de la República, el cual termina con muchos de los privilegios de los congresistas, los órganos parlamentarios, los órganos de gobierno y de todos los servidores públicos que trabajarán durante la LXIV y LXV Legislatura. En el pleno el acuerdo fue avalado.
De manera inmediata, es decir con aplicación desde el 1 de septiembre, se eliminarán las frutas, semillas, botanas y bebidas especiales que consumían los senadores durante las sesiones, además de que no podrán contratan a nadie bajo el régimen de honorarios.
Tanto los grupos parlamentarios como los órganos de gobierno deberán de despedirse de los alimentos en las reuniones y deberán de reducir su estructura administrativa.
Por otro lado los servidores públicos de mando dirán adiós a la gasolina, a la telefonía celular, a los gastos médicos mayores, a los vales de despensa, al mantenimiento de vehículos, peaje, reembolso de gastos de alimentación y al complemento del aguinaldo.
Para el 2019 se pretende reducir costos en comunicación social, eventos, publicaciones, asesorías y capacitación.
“Las acciones de austeridad se proyectan en cuatro rubros fundamentales: recursos humanos; recursos materiales; recursos económicos; y trabajo legislativo y parlamentario, y serán aplicadas en el ejercicio de los recursos presupuestarios para 2019”, agrega el escrito.
El presupuesto para el 2018 fue de 4 mil 905 millones de pesos por lo que los legisladores de la Cámara alta buscan disminuirlo durante este año.
“Representa una cantidad que se puede reducir a efecto de trabajar acorde a un régimen de austeridad con la finalidad de contribuir a que el gasto público se reduzca a lo estrictamente necesario, eliminando gastos superfluos y lujos innecesarios, ejerciéndolo de manera transparente, con rendición de cuentas y combate frontal a la corrupción, lo que redundará en una administración más eficaz y eficiente de los recursos en el Senado de la República”, agrega el escrito.