Los desafíos del retorno
Jalisco es la entidad con el mayor número de migrantes de retorno voluntario en México, ante ello el reto institucional es alto por lo que se deben ejercer mejores políticas públicas para atender el fenómeno, acciones como el Fondo de Apoyo a Migrantes el cual ha sido poco solicitado
Jonathan ÁvilaLa nueva dinámica migratoria ha generado una reestructuración en las políticas públicas locales, pero la pregunta es si son suficientes. Jalisco, al ser el estado número uno en migración de retorno, se encuentra en una encrucijada que requiere plantearse la generación de condiciones óptimas de retorno, como lo ha sido el Fondo de Apoyo a Migrantes.
Este retorno voluntario, producto de diversas causas, entre las que se encuentran los desafíos económicos y la configuración familiar, registró en el último año una cifra de alrededor de 4 mil 500 personas, según el Instituto Jalisciense para los Migrantes.
El nueve por ciento de los mexicanos que han optado por regresar a sus territorios de origen lo hace con rumbo a Jalisco, de acuerdo con datos del Anuario de Migración y Remesas 2017.
Las autoridades locales reconocen el fenómeno. No obstante la implementación de estas políticas públicas, enfocadas a los mexicanos que se encontraban en el país vecino del norte, se dieron a partir 2017 y en el marco de los discursos de odio expresados por el ahora presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Sin embargo el retorno de mexicanos a sus regiones de origen no es un fenómeno reciente, sino que su desarrollo se ha venido dando desde, por lo menos, el año 2010.
Este periodo tiene relevancia en aspectos como el impacto de la crisis económica de 2008 y la falta de empleos, que era uno de los principales atractivos de la migración hacia territorio estadounidense.
Aunque las causas del retorno son diversas, pese que son síntoma de los cambios estructurales, siendo más resentidos los impactos de la crisis en la vida social, familiar e individual. No obstante que el gobierno local actualmente desconoce cuáles son las motivaciones, toda vez que este tipo de información no es requerida por la autoridad local para brindar apoyos.
Con este cambio en la dinámica migratoria, desde 2017 se implementó en el Instituto Jalisciense para los Migrantes la operación y ejecución del Programa Federal “Fondo de Apoyo a Migrantes”, con el que se puede acceder a un apoyo en especie para realizar proyectos productivos.
Pero, aún cuando es alto el número de migrantes que retornan a la entidad, aquellas personas que han regresado y que han solicitado apoyos de este fondo son apenas 359, según datos del Instituto Jalisciense para los Migrantes, obtenidos por Reporte Índigo vía transparencia.
La mayoría de los apoyos han sido para proyectos familiares, 348 fueron por un monto total de 28 mil 704 pesos y dos proyectos de 50 mil pesos. Sin embargo en el documento oficial no se establece el tipo de programa o el destino de los recursos.
Por otro lado, una de las acciones gubernamentales también ha sido la de capacitar a través del Instituto de Formación para el Trabajo del Estado de Jalisco, con el fin de enfocar competencias en materia agrícola, inglés, finanzas personales y emprendimiento.
A pesar de las acciones locales, para el investigador de la Universidad de Guadalajara y experto en temas migratorios, Jorge Durand Arp-Nisen, el reto está en poder crear las condiciones económicas favorables para que esta población tenga un futuro seguro.
“Para Jalisco, sí evidentemente, hay un gran número de retorno, porque es uno de los estados que tenía más migrantes allá. Entonces proporcionalmente están regresando. A su vez, Jalisco es uno de los que tiene mayor índice de legalidad. Hay muchos jaliscienses que tienen documentos allá”, señala Durand.
Los retos no están en que puedan encontrar un empleo para el que tengan la preparación, pues se trata de mano de obra capacitada por sus años de trabajo en la industria norteamericana y con experiencia en inglés, característica clave para el mercado turístico y de servicios
El énfasis que pone Durand en que se incrementen los salarios, como lo expresaron los presidentes de Canadá y Estados Unidos durante las declaraciones en torno al tema del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, es clave; este tema se ha estancado a nivel nacional y es el único que puede otorgar un futuro a quienes trabajan en este país.
“Tú tienes ingenieros que ganan entre trece, doce y quince mil pesos con estudios universitarios completos y no te levantan el salario. Quince mil pesos no llevan a 800 dólares, y son profesionales.
Tenemos que romper no sólo la barrera de los salarios mínimos, sino la barrera de muchas personas que están con cinco, seis u ocho mil pesos mensuales y tienen que estar en una situación difícil en una ciudad como Guadalajara, donde realmente cada vez está más cara la vida”, explica.
La mayoría de las personas que han retornado en los últimos años han encontrado facilidades para insertarse en la industria, ya sea como empleado u obrero. Jorge Durand recuerda que actualmente, en Jalisco, la industria agroalimentaria está solicitando mucho trabajo en el campo de las berries, sin embargo este tipo de trabajos es al que ya no está dispuesto a tener el migrante que retorna.
“Es gente que ya no está acostumbrada a trabajar en ese tipo de cosas, porque ese tipo de trabajo lo aguantaba determinado tipo de personas, ya no todos. Entonces aunque haya oferta, no se están subiendo los salarios. ¿Qué tiene que pasar? Que tienen que subir los salarios, y tiene que subir no sólo el salario mínimo, sino los salarios que están estancados entre siete y quince mil pesos”, indica en entrevista.
El principal desafío que se tiene para los migrantes que ahora regresan a la entidad es el enfoque de sus actividades, y de eso debe encargarse la autoridad, como menciona Jorge Durand. Se trata de mano de obra capacitada, pero que debe ser certificada y llevada al campo laboral que se requiere para que su empleo tenga un reflejo de productividad.
“Se necesita de gente capacitada, y hay esa gente. Pero no hay que dejarlos nada más a su suerte. Hay que ver en qué parte de la economía necesitamos a esta persona para que ayuden al desarrollo del país y se integren por su propia cuenta y su propio esfuerzo, pero hay que poner los medios”, concluye el experto en migración que propone que las autoridades generen mejores planes para atender el tema.