En el estado de Jalisco se han autorizado verdaderos “latifundios”, es decir, concesiones mineras sobre extensiones territoriales tan grandes que llegan a superar las 200 mil hectáreas en manos de un solo beneficiario, según los registros en la materia de la Secretaría de Economía.
Al día de hoy en Jalisco las concesiones mineras vigentes cubren un millón 628 mil 967.19 hectáreas de su territorio, sin embargo, cerca de una quinta parte de toda esa área destinada para la explotación está en manos de una sola titular: Claudia Noemí Rivas Jasso.
Para ponerlo en perspectiva, el pedazo de tierra que le fue concesionado a Rivas Jasso por el Gobierno federal mide más que el territorio de 123 de los 125 municipios que tiene Jalisco, incluso conurbados como Guadalajara (15 mil 142.10 hectáreas), Zapopan (116 mil 362.99 hectáreas), Tlaquepaque (11 mil 044.20 hectáreas), Tonalá (16 mil 610.44 hectáreas) o Tlajomulco (71 mil 395.32 hectáreas).
Entre los municipios que alojan las concesiones de Rivas Jasso están Atengo y Tenamaxtlán.
El segundo mayor titular de concesiones mineras en Jalisco es la compañía Jalical Mining México Corporation, con ocho de estos títulos en los municipios de Chiquilistlán, Tomatlán y La Huerta, para concentrar así 118 mil 393.55 hectáreas en su poder
En el tercer sitio aparece Alfredo Navarro Alcázar y socios, con siete concesiones en los municipios de La Huerta, Cuautitlán, Villa Purificación, Tomatlán y Autlán de Navarro, y las cuales abarcan una superficie total de 113 mil 771.07 hectáreas.
El cuarto concesionario minero con más tierras jaliscienses a su disposición es Roberto Magaña Aceves, al que le fueron autorizados ocho de estos títulos en los municipios de Tuxcacuesco, Pihuamo y Guachinango, mismos que comprenden una extensión de 101 mil 490.17 hectáreas.
Mientras que en el quinto lugar está José Cruz Solorio Santana y socios, con una decena de concesiones mineras a su nombre en los municipios de Ejutla, Villa Purificación y La Huerta, y con las que tiene en sus manos un territorio de 97 mil 476.28 hectáreas.
Hacendados mineros
En Jalisco hay 618 concesionarios distintos de estos permisos federales para la explotación minera de las tierras, entre ellos están repartidas las mil 468 concesiones que actualmente están vigentes, mismas que abarcan la superficie total citada por más de 1.6 millones de hectáreas.
Sin embargo, no todos los concesionarios mineros son grandes tenedores de tierras bajo esta modalidad. De esta manera, si el mayor concesionario tiene esas más de 255 mil hectáreas que ya fueron referidas, el que menos tiene aparece con solamente 0.99 hectáreas (Humberto Ríos Sandoval).
Mientras que 91 concesionarios van de las mil hectáreas a las 8 mil 510; y finalmente, hay otros 502 concesionarios que tienen en su poder desde solo 0.99 hectáreas a 990 hectáreas.
La entrega sin control de concesiones mineras en Jalisco ha llevado a que existan seis municipios que tienen más de la mitad de todo su territorio concesionado en manos de privados. Los casos más extremos son los de La Huerta y Tapalpa con más del 90 por ciento de su superficie en esa condición (93.02 y 91.29 por ciento respectivamente).
Seguidos de Etzatlán (74.45 por ciento), Ejutla (61.99 por ciento), Atengo (55.39 por ciento) y Tomatlán (51.06 por ciento), según fue dado a conocer por Reporte Indigo (“Jalisco, un campo minado” 21 de noviembre de 2018).
No más concesiones: AMLO
El pasado 18 de marzo el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que durante su gobierno no se entregarán más concesiones mineras, justamente por la gran cantidad que fueron autorizadas en sexenios pasados, y las vigentes serán respetadas.
“Hay, la verdad, una cantidad de concesiones para la explotación minera como nunca, lo que ya entregaron de concesiones los gobiernos neoliberales no se lo acabarían las empresas ni en mil años, porque entregaron concesiones del orden de 40, 50 millones de hectáreas. Nuestro país tiene 200 millones de hectáreas y entregaron como 40, 50 millones, como el 25, 30 por ciento del territorio nacional”.
Hoy una quinta parte del territorio de Jalisco está concesionado a la explotación minera (el 20.72 por ciento). El presidente lo puso en perspectiva con el reparto agrario.
“El general Cárdenas le entregó a un millón de familias campesinas 18 millones de hectáreas para constituir ejidos y reconocer bienes comunales, nada más que a un millón de familias campesinas, de 1934 a 1940, cuando la población era de 20, 25 millones de habitantes (…); y Calderón entregó 20 millones de hectáreas más a un puñado de empresas mineras que no se van a acabar eso ni en mil años”.
López Obrador fijó dos objetivos en materia de minería. “Nosotros vamos a respetar esas concesiones, esos acuerdos, también para que no haya temor, miedo, pero explicar que, como dicen los jóvenes, se pasaron, no tuvieron llenadera (…) solo decir: se mantienen las concesiones, no se revocan, así de claro”, dijo.
Y el segundo fue: “queremos que las empresas mineras, las canadienses en particular, lleven a cabo una explotación minera limpia, lo único que les pedimos es que actúen igual que como están obligados a hacerlo en Canadá, lo mismo, igual; es decir, que le paguen bien al minero, que paguen la misma cantidad de impuestos que pagan allá y, sobre todo, que no contaminen”.