La hora de la CDMX

Tanto Manuel Camacho como Marcelo Ebrard intentaron sin éxito alcanzar el momento histórico que Miguel Ángel Mancera consolidará hoy al entregar a la Asamblea Constituyente la propuesta de la que saldrá la primera Carta Magna de la capital.

Para el jefe de Gobierno, la propuesta que luego del debate legislativo se convertirá en la Constitución de la Ciudad de México no es un legado exclusivo sino un esfuerzo que comparte con el grupo redactor de catedráticos, activistas, exfuncionarios y especialistas que le dieron vida.

“Será un ejemplo en toda América Latina”, promete Mancera en entrevista.

Después de meses de jaloneos entre las principales fuerzas políticas no sólo de la ciudad sino del país, la Asamblea Constituyente quedará integrada por 98 legisladores de los 100 contemplados luego de que Morena y PT rechazaron designar a uno de manera directa.

El PRD estará representado por 29 diputados; Morena por 22; el PRI tendrá 21 votos por 14 del PAN.

Los llamados partidos pequeños se quedaron con 3 del PVEM, 3 del Panal, 3 del PES, 2 de Movimiento Ciudadano y un diputado independiente.

A escasas horas de asumir funciones la Asamblea Constituyente tiene sólo 98 legisladores, esto se debe a que Morena rechazó el que le asignaron en la Cámara y el PT hizo lo mismo en el Senado.

Para llegar a este momento, se tuvo que librar primero la batalla política más importante: la reforma política que el Senado de la República aprobó en el 2015 tras una acalorada discusión de los principales partidos políticos PRI, PAN y PRD, este último empujaba la propuesta.

Desde esa fecha, el Congreso de la Unión terminó con 191 años de existencia del Distrito Federal y dio paso oficial a la Ciudad de México.

La reforma política marcó la pauta para la conformación de la Asamblea Constituyente que estaría integrada por 100 diputados, de los cuales 60 serían por elección popular y 40 por designación de la Cámara de Diputados, de Senadores, el presidente de la República y el jefe de Gobierno, no sin antes pasar por la aprobación en los 31 Congresos locales de la República Mexicana, requisito que se cumplió a cabalidad con la aceptación en 17.

La elección de los Constituyentes

La elección Constituyente fue un reto.

De manera austera y precipitada por el Instituto Nacional Electoral (INE), se eligió a 60 de los 100 diputados que conformarían la Asamblea que hoy entra en funciones para comenzar a debatir el 

documento propuesta que Miguel Ángel Mancera entregará por ley.

El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IEDF) quedó relegado en esta elección a pesar de que apoyó en la difusión de la elección Constituyente que pocos capitalinos entendieron, por qué y para qué votaron.

El resultado ratificó el desconocimiento de la ciudadanía y la falta de interés, pues tan sólo el 28 por ciento del padrón capitalino acudió a las urnas, en medio de acusaciones mutuas de acarreos y compra del voto entre los partidos.

Sin embargo, la polémica elección Constituyente de la Ciudad de México dejó muchas lecciones.

La principal fue que Morena, que fundó el exjefe de gobierno capitalino Andrés Manuel López Obrador había irrumpido en el territorio de la Ciudad de México con tal fuerza que había desplazado al PRD en las preferencias electorales.

Morena quedó con el primer lugar de la elección y el PRD, en el segundo. Los resultados terminaron por detonar la crisis al interior del Sol Azteca, pues más allá de la Constituyente se apresuraron a reorganizarse en la capital con miras al 2018.

En la jornada del 5 de junio pasado, los candidatos independientes tampoco tuvieron un gran día: lograron el 8.3 del total de los votos, un número similar al 7.9 por ciento de los votos anulados y muy alejado del 83.7 por ciento que obtuvieron los partidos políticos en totalidad.

Ismael Figueroa Flores, líder del sindicato del Heroico Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de México fue el único de los independientes que logró filtrarse a la lista de diputados independientes.

El freno a los candidatos independientes vino de origen, el decreto de Reforma Política de la Ciudad de México condicionó a todo capitalino interesado en contender por una diputación recopilar casi 74 mil firmas para obtener su registro ante el INE.

Algunos de los que se empeñaron en recolectar tal cantidad de firmas, fueron descartados más adelante por el INE cuando en la revisión se argumentó que muchos de los firmantes no existían, por lo cual fueron invalidados.

A partir de hoy y durante cuatro meses, la Asamblea Constituyente debatirá los temas que Mancera propuso en el documento para que a principios de 2017 esté lista, por fin, la primera Constitución de la Ciudad de México.

Este documento promete dotar de autonomía, transformar las delegaciones en alcaldías, elegir a su propio secretario de seguridad pública y al procurador de justicia, tener su propio Congreso local y sobre todo, formar parte de las decisiones y reparticiones de la República.

“Hoy la Ciudad de México ya tiene su reforma constitucional, por más que lo quieran minimizar o politizar ya estamos con un estatus diferente. Ahora es la voluntad del Constituyente”, señala Mancera.

‘Me comprometí,  ahí está’

Miguel Ángel Mancera entrega hoy el que podría ser su más grande legado de gobierno: la propuesta de Constitución de la Ciudad de México.

“Para mí, la primer tarea fue lograr la Reforma Constitucional, eso era lo que estaba más cuesta arriba, era toda mis responsabilidad, porque yo me comprometí, yo lo establecí. Se logró, ahí está”, dice orgulloso.

Y es que este documento histórico promete abrir el debate a el voto a partir de los 16 años, el consumo medicinal de la cannabis y la revocación de mandato, que según dice el propio jefe de Gobierno, obligará a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a pronunciarse.

El exprocurador de Justicia capitalino no es ajeno a la polémica que lo rodea a él y al documento ni a las amenazas que en diferentes momentos ha lanzado Morena, el partido que lidera Andrés Manuel López Obrador.

Por eso señala que es momento de debatir en la Asamblea Constituyente y no en los medios.

“Está ahí la oportunidad de Morena, tiene a sus representantes, pues que den la pelea”, reta Mancera.

La propuesta es de gran calado, precisa, pues no significa sólo un cambio de nombre para la capital, se trata de un documento de avanzada que no busca competir con la Carta Magna de México sino generar debate respecto a algunas definiciones que de la propia Constitución del país.

Aunque a partir de mañana comienza el debate oficial de la propuesta y los partidos piden que Mancera saque las manos del proceso.

El jefe de Gobierno aclara que se mantendrá muy pendiente de cómo se avanza.

“No me voy a meter en la Asamblea Constituyente porque es un órgano que trabajará como se prevé, con su estructura, capacidades, reflexiones  y su propio debate, yo cumplo entregando el proyecto, pero sí estaré atento a lo que se debata, por supuesto que estaré atento e informado”, refiere.

Avizora controversias

La propuesta de Constitución plantea temas controversiales como el de la revocación de mandato.

“Es una Constitución que está con los temas de actualidad, no puede ir contraria a la Constitución federal pero sí es probable que genere algún debate”, detalla Mancera.  

Otro tema que desatará la controversia y que impacta el terreno federal es el de permitir el uso medicinal de la mariguana en la Ciudad de México.

“El debate va estar en el esquema federal dado que es una facultad de Ley General de Salud, a mi me parece que la Corte tendría que interpretar si la Ciudad de México puede hablar de sus derechos, de sus consideraciones y decir que en la CDMX el uso de la mariguana para efectos medicinales se considera lícito, hacia allá vamos”, explica.

Como especialista en derecho y su paso por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), el jefe de Gobierno advierte que la nueva función que se plantea para el Consejo de la Judicatura es otro tema que derivará en un gran debate.

“Antes de la reforma constitucional se hablaba de los órganos de gobierno, que realmente no eran poderes, ahora en el planteamiento que hacemos se habla de los poderes judicial, legislativo, ejecutivo”, dice.

En ese sentido, refiere que el documento incluye el llamado “Control de Convencionalidad”, a partir del cual, se reconoce la necesidad de que los servidores públicos ejerzan en su actuar la fuerza de los tratados internacionales.

Derechos ganados

El documento no es una propuesta compacta ni minimalista pues contiene algunas amplias manifestaciones de los derechos que distinguen a la Ciudad de México, los progresivos, que ya son una realidad en la capital.

“El aborto ya está decidido por la Suprema Corte de Justicia, es un derecho progresivo, no puede ir hacia atrás, el principio de progresividad ya está planteado, que las personas tendrán derecho a la salud sexual y decidir sobre su cuerpo. No tendría porque generar nuevamente polémica.

“Lo mismo como los matrimonios entre personas del mismo sexo porque es algo que ya tiene la cuidad y que la dota de características muy especiales que en ningún otro estado del país y ahí se verá reflejado en la Constitución”, insiste Mancera.

Asimismo, se plantean el derecho a la ciudad, al buen gobierno, la obligación de transparencia de los servidores públicos, conocido como 3 de 3;.

También la obligación de tener una movilidad, de cuidado al medio ambiente, y a los animales.

“No fuimos sectarios”

Los señalamientos ahí están y Miguel Ángel Mancera no pretende esquivarlos pero sí defenderá el proyecto hasta el final.

Respecto al grupo que participó en la elaboración, dice, se tomaron las consideraciones para integrar un equipo plural, con todas las voces y hasta posturas posibles.

“Hay personas que jurarías que militan o militaron en el partido que mencionas (Morena), entonces lo que menos tuvimos fue ser sectarios.

“Participaron universidades, asociaciones diversas, los pueblos originarios, los campesinos, los cibernautas; Change.org está hablando de propuestas que tenían el respaldo de más de 400 mil firmas, si eso no es una participación plural en esta constitución pues no sé cuál podría ser una participación”, explica.

Para cuando la Constitución de la Ciudad de México se apruebe, el gobernante espera que la ciudadanía esté más familiarizada y perciba los cambios.

“Para ese entonces estará mucho más familiarizada sobre lo que hoy está pasando con el presupuesto, con el Fondo de Capitalidad, la ciudad  y sus habitantes tienen que percibir todas las ganancias de ser la capital de la República.

“La CDMX tendrá cada día más fuerza e independencia, actualmente dependemos el 40 por ciento de las participaciones federales, tenemos una fuerza de recaudación importante, financieramente es sana. Todo  tiene que apuntar a la modernización”, detalla.

¿Camino a Los Pinos?

Para principios de 2017 cuando se estima la Asamblea Constituyente deberá tener el documento aprobado, ¿dónde estará Miguel Ángel Mancera?.

“Aquí trabajando en esta oficina, yo espero, si todo va bien, estar trabajando en la oficina, si todas las fuerzas nos lo permiten”, suelta entre sonrisas.

Si hoy el órgano de gobierno encargado de la recepción del documento con la propuesta está listo, será el propio Mancera quien lo entregue en la mano; de lo contrario comisionará al Consejero Jurídico, Manuel Granados para cumpla con el trámite.

Se tiene previsto que la Constituyente quede formalmente instalada este jueves a partir de las 11:00 horas en la antigua sede del Senado de la República, la llamada Casona de Xocotencatl.