Las aceleraciones generadas por el sismo, la geometría de las estructuras y las pequeñas dimensiones de los apoyos que soportaban los puentes, fueron los factores que generaron la caída de los puentes que provocó la muerte de cinco estudiantes en el Campus Ciudad de México del Tecnológico de Monterrey.
Así lo determinaron los resultados de los peritajes que un despacho independiente y autónomo realizó a su estructura y que, de acuerdo con ellos, las aceleraciones sísmicas estaban cercanas a lo que la norma consideraba.
El despacho García Jarque Ingenieros fue el encargado de hacer la investigación correspondiente, en tanto que el socio Francisco García Álvarez fue el que explicó que influyeron estos tres factores.
“El primer argumento importante que debe mencionarse y que generó la falla es las característica del sismo que indujo aceleraciones cercanas a la que la norma estaba considerando”, reiteró García Álvarez.
El segundo argumento obedece a las propiedades de las estructuras referentes a la geometría, así como a la “altura generosa”, pero que lo que “en cualquier caso estaba permitido por la norma”.
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Y tercero, las características de los apoyos que soportaban los puentes con dimensiones de 15 centímetros, resultaron escasos.
La geometría de las estructuras y las pequeñas dimensiones de los apoyos que no eran visibles porque estaban recubiertos por acabados.
“Además de la fuerza inédita de sismo, las ménsulas que sostenían un extremo de los puentes no fueron suficientemente largas para soportar el movimiento de los edificios que unían ante las aceleraciones sísmicas sin precedentes”, corroboró el el Vicepresidente de la Región Ciudad de México del Tecnológico de Monterrey, Rashid Abella Yunes.
Asimismo, aseguró que han mantenido informadas a las familias afectadas sobre estos resultados y reiteró que seguirán apoyando a las autoridades que realizan la investigación correspondiente.
