Margarita Arellanes asegura que ella no repartió el “pastel” de la administración municipal entre los diferentes grupos del PAN, sino que designó a los integrantes de su gabinete con base en sus perfiles y experiencias.
“Esto, ni que fuera un pastel o una porción. Jamás entraría a un juego de repartir, sería algo que perjudicaría directamente a la ciudad”, dijo la alcaldesa de Monterrey al finalizar una sesión ordinaria del Cabildo regio.
“Aquí lo que se ha evaluado son los perfiles, la experiencia y también el compromiso de trabajo que tienen cada uno de los integrantes de este gobierno”.
Reporte Indigo publicó este jueves que Arellanes repartió puestos del Municipio entre miembros de la neocúpula panista, pero fue su grupo político el que acaparó los principales cargos en la administración local.
“Quedaron atrás las campañas, quedaron atrás los momentos del partido. Yo ahorita estoy concentrada como alcaldesa de Monterrey y el beneficio de mi ciudad es el único parámetro que tengo para la toma de decisiones”, asegura la panista.
En la integración del gabinete también se repartieron posiciones a miembros del panismo tradicional, pero quedaron fuera otras personalidades que en un principio estaban contempladas para ocupar un cargo público.
Fue el caso del ex alcalde de San Nicolás, Miguel Ángel García, quien se perfilaba para ser ratificado como secretario de Servicios Públicos, pero este acuerdo no se concretó.
La edil dice que García y otras personas no fueron incluidas en su proyecto político porque no contaban con el perfil que ella buscaba en sus colaboradores.
“¿Por qué habría que incluirlos?”, cuestiona Arellanes, “tomé una decisión, hice una revisión integral de cada una de las personas que me deseó su interés de participar y ahí está la decisión”.
–¿Esta repartición ocasionó descontento entre los diferentes grupos que te apoyaron en campaña?, se le cuestionó a la alcaldesa.
“El contento tiene que ser la ciudadanía. Yo tengo que velar por los intereses de la ciudad de Monterrey, por ningún otro interés”.
Aunque Arellanes fue incluyente con los grupos del PAN, sin ceder a todas las peticiones, ella descarta que fue quien más dividendos políticos obtuvo.
“El dividendo que estoy segura espero que se reciba es un dividendo para la ciudadanía, todos deben de trabajar pensando en Monterrey”.