Mariguana a debate

Este lunes, el Congreso de la Unión comenzará con el debate para la legalización de la mariguana y con él, arrancará el camino para crear una legislación histórica que podría despenalizar su consumo.

Esto cambiaría desde los usos que se le dan a la cannabis, hasta la forma en que los grupos delincuenciales la comercializan actualmente, pues dejaría de ser un producto totalmente prohibido como hasta ahora.

Con las “Audiencias públicas para las alternativas de regulación de la mariguana”, los legisladores federales pretenden realizar un análisis de todas las implicaciones que tendría una eventual legalización de la mariguana.

En ellas participarán expertos en los ámbitos de seguridad y justicia; salud pública y salubridad; contexto internacional y derechos humanos; uso medicinal y terapéutico; y regulación de la cadena productiva.

La legislación que se estará construyendo en los próximos meses cuenta ya con una base inicial.

En total, diputados y senadores han presentado 10 iniciativas relacionadas con diversos aspectos de una eventual despenalización.

En ellas se analiza desde solo aprobar su uso con fines medicinales hasta dar amnistía a aquellos que estén presos por su consumo.

La inquietud por abrir un debate en el Poder Legislativo comenzó a partir de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación amparó a cuatro ciudadanos para que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) les otorgara un permiso para su consumo lúdico.

El fallo, emitido en noviembre pasado, benefició a Josefina Ricaño, Armando Santacruz, José Pablo Girault y Juan Francisco Torres Landa, miembros de la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante (SMART).

Estas personas han afirmado que promovieron el amparo no para consumir cannabis, sino para abrir la discusión hacia una nueva política de drogas.

Cambiar el enfoque

La intención de quienes promueven el debate sobre la legalización de la mariguana es cambiar el paradigma de combate al consumo de esta droga.

Se busca dejar de verlo como un problema de crimen organizado para cambiar el enfoque hacia una cuestión de salud.

Además, se pretende arrebatar el negocio de la venta de mariguana a los grupos delincuenciales y bajar así los niveles de violencia que se viven en varias partes del país.

De acuerdo con datos de la Encuesta de Cohesión Social para la Prevención de la Violencia y la Delincuencia 2014, realizada por el INEGI, el 8.3 por ciento de los jóvenes entre 15 y los 29 años han fumado mariguana alguna vez en su vida.

El 2.8 por ciento ha consumido anfetaminas, cocaína o heroína; el 2 por ciento han inhalado sustancias tóxicas o industriales; y el 1.8 por ciento ha probado los alucinógenos.

La edad promedio de iniciación en el consumo de mariguana es de 17 años con 5 meses.

El debate confrontará dos posturas.

Por un lado, aunque las autoridades federales se han pronunciado por tener un debate abierto sobre los beneficios y perjuicios de una eventual legalización, se han inclinado más a continuar con la prohibición.

“No quiero ver un país mariguanero”, ha dicho Manuel Mondragón y Kalb, comisionado nacional contra las adicciones.

La frase resume la postura de uno de los funcionarios encargados de promover el debate en todo el país y, como él, hasta el presidente Enrique Peña Nieto ha expresado su apertura al debate, pero con reservas.

“En lo personal, para mí no sería deseable ni estoy en favor de una eventual legalización en el consumo de la mariguana”, ha dicho Peña Nieto.

En un documento que hizo llegar al Senado, la Secretaría de Salud enumera los efectos de la mariguana en la salud de los consumidores.

Entre ellos, señala que los consumidores pueden tener ansiedad, pánico, psicosis o cuadros parecidos a la esquizofrenia, así como deterioro de la memoria a corto plazo.

El consumo de mariguana, expone, aumenta en 20 veces más el riesgo de desarrollar cáncer pulmonar que fumar tabaco.

Del otro lado, quienes defienden la legalización del consumo lúdico de la mariguana, afirman que se trata de un asunto de libre albedrío donde los ciudadanos pueden elegir lo que consumen y lo que no.

La base legislativa

Aunque diputados y senadores buscarán crear toda una nueva legislación sobre el tema, ya en las comisiones del Congreso se encuentran depositadas varias iniciativas con diferentes aspectos del uso de la cannabis.

Fue en los meses recientes cuando en el Senado y la Cámara de Diputados hubo un boom en la presentación de propuestas; pero el primer acercamiento ocurrió en el 2008.

La primer iniciativa que buscaba legalizar el consumo, la producción y la comercialización de la mariguana fue presentada ese año por René Arce, quien era en ese entonces senador por el PRD y luego cambiaría de bancada a la del PVEM.

En su propuesta, el legislador señalaba que el Estado llevaría la batuta en la definición de las políticas de regulación y prevención de las adicciones; que se autorizaría el cultivo de hasta cinco plantas en las viviendas particulares; y que el Gobierno podría exportar cannabis siguiendo regulaciones internacionales.

En el 2013, senadores del PRI y el PVEM presentaron una propuesta para lanzar un Programa Nacional Integral contra las Adicciones y para que el Estado construya políticas de prevención, tratamiento, rehabilitación, reinserción social y control de las adicciones.

En marzo del 2014, los senadores del PRD Mario Delgado, Isidro Pedraza, Zoé Robledo, Fernando Mayans; los petistas Layda Sansores y David Monreal; y el panista Roberto Gil, presentaron una propuesta para legalizar el uso terapéutico de la cannabis, así como modificar las cantidades de dosis personales para consumo que sean permitidas.

Los senadores del PRD Mario Delgado Carrillo, Luz María Beristáin, Alejandro Encinas Rodríguez, Angélica de la Peña, Armando Ríos Píter, Benjamín Robles Montoya, Isidro Pedraza Chávez, Zoé Robledo Aburto y Raúl Morón Orozco presentaron en noviembre del 2015 otra iniciativa.

En ella se busca que se permita el uso medicinal de la mariguana; y se otorguen autorizaciones para el consumo lúdico.

Días después, la senadora priista Cristina Díaz propuso que se permita la importación de medicamentos que tengan como base los cannabinoides para el tratamiento de diversas enfermedades.

En marzo del 2014, el panista Roberto Gil presentó una propuesta para crear una ley que permita la libertad anticipada (inmediata) para las personas que se encuentren presas por delitos no violentos relacionados con la posesión –sin fines de comercio o suministro- de mariguana.

Los diputados perredistas Fernando Belaunzarán y Miguel Alonso Raya presentaron en agosto del 2015 una iniciativa para regular la producción, autoproducción, procesamiento, comercio, distribución y venta de productos derivados de la cannabis.

Además, señala que se debe crear, al mismo tiempo, un programa nacional de prevención, reducción del daño y tratamiento de la farmacodependencia.

En la Cámara de Diputados, Jonadab Martínez, legislador de Movimiento Ciudadano, presentó una iniciativa para legalizar los derivados de la cannabis para usos terapéuticos y medicinales.

También de Movimiento Ciudadano, los diputados Jorge Álvarez Máynez y Víctor Manuel Sánchez presentaron una propuesta para expedir la Ley de Amnistía a favor de quienes han sido sentenciados por consumo o posición de mariguana.

En el mismo sentido, el diputado perredista Juan Fernando Rubio propuso la amnistía a favor de las personas que hayan sido procesadas por narcomenudeo que hubieran portado cantidades iguales o menores a 30 gramos.

Rubio también propuso levantar la prohibición para los medicamentos que contengan cannabidol y tetrahidrocannabidol que sirvan para tratar diversas enfermedades.

El debate que viene

La discusión de una eventual legalización de la mariguana y todas sus implicaciones abarcará todos los temas relacionados al asunto.

En las audiencias públicas, que arrancarán este lunes 25 de enero y terminarán el 17 de enero se analizarán cuestiones jurídicas, de salud, de regulación internacional, autoconsumo, producción, derechos humanos, el sistema penitenciario, adicciones y todas las aristas del tema.

Las audiencias son organizadas por el Consejo Técnico para las Alternativas de Regulación de la Mariguana y, además de las dos Cámaras del Congreso, forman parte de él otras 14 instituciones.

Forman el Consejo Técnico el INEGI; la Comisión Nacional Contra las Adicciones (Conadic); el Colegio de México; la Academia Mexicana de Ciencias; la Comisión de Derechos Humanos (CNDH); la Cofepris; la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies); el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE);

También la UNAM; el Instituto Nacional de Salud Pública; el Instituto Nacional de Ciencias Penales; el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública; el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica); y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDC).

“Queremos que todo aquel que tenga algo que decir y aportar a la discusión sea parte del debate parlamentario; que este debate sirva para informar la discusión legislativa, pero también para detonar buenas decisiones de política pública”, recalcó el panista Roberto Gil, presidente del Senado.

“Ya no debemos ni podemos posponer la discusión que desde hace dos o tres Legislaturas comenzó y se han presentado las iniciativas; el tema está puesto sobre la mesa. Hay que discutirlo con criterio abierto, no solo con quienes estén de acuerdo en eliminar el prohibicionismo en el manejo de la mariguana, sino con quienes han manifestado su oposición”, comentó Jesús Zambrano, presidente de la Cámara de Diputados.

Las audiencias forman parte de un ejercicio bicameral, en el que diputados y senadores puedan trabajar en una sola propuesta integral del Poder Legislativo.

Abren consultas

Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Derechos Humanos de la Segob, ha anunciado que además de los foros, el Gobierno federal ya prepara una consulta ciudadana sobre la eventual legalización de la mariguana.

A más tardar en marzo próximo, estarán disponibles los primeros resultados. La idea es llevar un avance de lo que México piensa sobre la legalización a la asamblea extraordinaria que hará la ONU sobre el tema, en abril.

Además del componente internacional, Campa se ha pronunciado porque haya un debate amplio e incluyente, dando voz a todas las expresiones y posturas.

“Los objetivos de este debate es el diseño de nuevas políticas públicas, la consideración del contexto internacional; se trata de un debate especializado”, comentó el subsecretario.

El 12 de enero pasado, Campa presentó la Plataforma Digital para el debate hacia una eventual legalización de la mariguana, donde se presentan análisis de todas las aristas del tema, estadísticas y el trato que han dado otros países al tema.

La Plataforma se irá alimentando conforme avancen los foros y debates, para que los ciudadanos que quieran consultarla puedan tener acceso a fuentes profesionales de información.

La Plataforma puede consultarse en la dirección electrónica: www.gob.mx/debatemarihuana.

A la par de la discusión en el Congreso de la Unión, el Gobierno federal también comenzará con los foros de análisis con el tema de la legalización de la mariguana.

El 26 de enero se llevará a cabo el primero con el tema “Salud Pública y Prevención”. La sede será Cancún.

El segundo tendrá como tema “La ética y los derechos humanos”. Se realizará el 23 de febrero en Ciudad Juárez, Chihuahua.

En Saltillo, Coahuila, se hará el tercer foro con el tema “Aspectos económicos y de regulación”, el 8 de marzo.

La siguiente cita será el 22 de marzo, en Guadalajara, Jalisco, donde se analizará el tema de “Seguridad Ciudadana”.

Finalmente, en la Ciudad de México se realizará un último debate sobre todos los temas, el 5 de abril.

Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, señaló que la realización de estos foros tiene como fin tener un panorama amplio que permita la realización de mejores políticas públicas del asunto.

“Se trata de un gran reto, que exige por lo mismo, apertura y visión de largo plazo. Que requiere transparencia y corresponsabilidad”, ha dicho Osorio.

A la par del trabajo que se realice en México, apuntó, el país buscará acercamiento con otros países para hacerse de mayor información y evidencia empírica que ayude a la reflexión.

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