Autoridades de Tamaulipas anunciaron la detención de Cynthia Fátima “N” y su esposo, Omar Enrique “N”, acusados de asesinar a una mujer embarazada, identificada como Jessica Gabriela, para extraerle a su bebé.
Las investigaciones indican que los asesinos habrían engañado a Jessica, a través de Facebook, diciendo que le regalarían ropa para su hija que estaba por nacer, a fin de concertar una cita.
Jessica salió de su casa el pasado martes 27 de marzo, alrededor de las 10:00 horas; la Fiscalía Para Personas No Localizadas o Desaparecidas, de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas había lanzado una ficha para dar con su paradero.
CYNTHIA SE DELATÓ
En un comunicado, la Procuraduría de Tamaulipas señaló que la presunta homicida, Cynthia, acudió al Hospital General Carlos Canseco de Tampico con el cadáver de una recién nacida; la mujer dijo que había sufrido un aborto, pero luego de realizarle pruebas médicas, se comprobó que su versión era falsa.
Además, vecinos del matrimonio denunciaron olores fétidos que salían del departamento que ambos habitaban, por lo que un juez de control giró una orden de cateo, que fue cumplimentada por personal de la Procuraduría local.
En el sitio se encontró el cuerpo de la embarazada, envuelto con una bolsa, abajo de una cama.
La primera línea de investigación que autoridades siguieron indicaba que Cynthia estaba embarazada, perdió a su bebé, y engañaba a su marido con una falsa gestación, y habría asesinado a la muchacha para quedarse con su hijo.
Sin embargo, el cuerpo de Jessica presentaba huellas de tortura que vincularon a Omar Enrique.
¿DE QUÉ MURIERON LAS VÍCTIMAS?
Las pruebas médicas señalaban que Jessica falleció tras sufrir una herida punzocortante en el abdomen y presentar un shock hipovolémico, que se traduce en la pérdida de sangre y líquidos; los asesinos habrían intentado sacar a la bebé con vida, pero le provocaron la muerte por insuficiencia respiratoria aguda, shock hipovolémico e hipotermia.
El domingo 1 de abril, los cuerpos de las víctimas fueron entregados a sus familiares.
En redes sociales, la hermana de Jessica había emprendido una campaña para encontrarla con vida.
Vecinos de la pareja detenida señalan que Jessica no fue la primera mujer embarazada con la que los homicidas habrían intentado establecer contacto, ya que habían ofrecido la ropa para bebé, con la que se llevó a cabo el engaño, a otras ciudadanas.
