Mayer: De política y decepción

Sergio Mayer no lo oculta: en 2006 apoyó al panista Felipe Calderón para que llegara a la Presidencia de la República; en 2012, hizo lo mismo con el priista Enrique Peña Nieto. Ahora, se dice decepcionado de ambos mandatarios y ha decidido alzar la mano para participar en la política.

Su giro fue radical. Hoy día dice apoyar completamente a Andrés Manuel López Obrador y su proyecto de país. “La historia le ha dado la razón”, dice.

El cantante, actor y empresario podría saltar de los escenarios a la máxima tribuna del país en los próximos meses. Tocó puertas en varios partidos políticos y fue en Morena donde le dieron la oportunidad de participar.

Mayer, famoso por su participación en el grupo pop Garibaldi y por su show de desnudos masculinos “Solo para Mujeres” —que produce y en el que actúa— se prepara ahora para convertirse en candidato de Morena a una diputación federal por el distrito 6 de la Ciudad de México, que abarca las delegaciones Magdalena Contreras y Álvaro Obregón.

Se dice interesado en temas como los derechos de la infancia, la protección a los animales y la seguridad pública. Desde su trinchera, ha tenido acercamientos con la clase política del país en estos temas. Ahora, afirma, quiere ser un protagonista más de la historia nacional.

Sergio Mayer conversó con Reporte Índigo sobre su motivación para entrar a la política; si está listo o no para el escrutinio público; por qué competir de la mano de Morena; qué piensa de López Obrador; a quién apoyó en el pasado; y si se desnudaría en la tribuna de San Lázaro.

> ¿Cuál mundo es más complicado, el de la política o el de la farándula?

Definitivamente la política. La farándula es difícil, estás en el escrutinio público; pero en la política estás en el escrutinio total: político, económico, social, mediático. Es una gran responsabilidad, un gran compromiso tener la oportunidad de representar a un grupo de personas que confíen en ti.

> ¿Qué fue lo que detonó tu interés por participar en política?

Fue poco a poco, fueron cambiando mis prioridades en la vida de acuerdo a mi edad, a mis necesidades, a mis compromisos; me di cuenta de que he sido favorecido con muchas cosas en la vida en todos los aspectos: con una familia, con mi trabajo, con mi salud. Y Mé- xico me ha dado tantas cosas tan hermosas que lo menos que podemos hacer es comprometernos con nuestro país.

Estamos acostumbrados a escuchar todos los días noticias malas. Y yo me pregunté: ¿qué puedo hacer? Y concluí que la mejor forma de hacer algo es involucrarte en los procesos, en los hechos, en los momentos que tienen que ver con la historia de nuestro país. Creo que hay que cambiar el concepto de usar la política para bienes personales y utilizarla para el bien común.

> ¿Cuál consideras que es el problema más grave que enfrenta México?

La incertidumbre, la inseguridad, el hecho de no creer en las instituciones porque ves que sigue habiendo impunidad. Yo estoy convencido de que tenemos corrupción porque hay impunidad. El hecho de que no se aplique la ley es un factor determinante con todo lo que está pasando. El hecho de que los corruptos y la gente que está rompiendo la ley, infringiendo, robando, haciendo abuso de poder, utilizando el nepotismo, el amiguismo, son temas que tenemos que combatir todos.

No creo que exista una varita mágica o una persona que venga a solucionar los problemas que tenemos en México, sino que es un problema que tenemos conjunto y que debemos solucionar conjuntamente.

> ¿Por qué en Morena?

Porque Morena fue el partido más incluyente. Toqué varias puertas, sí, y fue el único que me escuchó.

Además, porque comparto el proyecto de Nación, el proyecto de regeneración que trae Andrés Manuel, me parece maravilloso. Es el único candidato que tiene un proyecto; todos los demás traen ocurrencias. Y Andrés Manuel tiene un plan desde hace varios años y ha sido congruente con lo que ha dicho, con lo que ha hecho.

Compagino con la izquierda, con la izquierda progresista, de inclusión, una izquierda que escucha, y que ha sido incluyente en todos los niveles y todos los aspectos y eso me gusta mucho. No soy radical, ni de izquierda ni de derecha, yo creo que tenemos un poco de todo.

No fue un tema de popularidad, tampoco de ocurrencia o de oportunismo, porque llevo muchos años trabajando en programas y temas sociales.

Estoy convencido del proyecto de Andrés Manuel; me parece maravilloso ver un gabinete plural, congruente con lo que él quiere, encabezado por una ministra de la Suprema Corte de Justicia con una carrera intachable, impecable. Eso me da tranquilidad.

> Si llegas al Congreso y Morena decide dar marcha atrás a las reformas estructurales, ¿tú cómo votarías?

Quiero aclarar una cosa: yo no votaría simplemente porque me digan que tengo que votar. Yo analizaría los pros y los contras hacia mi país respecto a cualquier tema o reforma (…) Estoy convencido de que antes de votar hay que analizar. No lo voy a hacer porque sí, porque yo no me estoy uniendo para ser borrego, sino para dar a respetar y a conocer a la gente que yo representaría. Esto lo digo como ciudadano, no como candidato (…) Todavía no me considero ni soy candidato, ahorita estoy como coordinador federal del distrito 6.

Lo que sí puedo decir es que tenemos un Congreso plural, que está representado por todos los sectores, pero hoy en día no hay una representación del medio artístico y tenemos que trabajar fuertemente para eso.

> Hablaste de que tus ideas y tu postura han cambiado. ¿Cómo cambió? ¿A quién apoyaste en 2006 y en 2012?

En el 2012 cometí el error de creer y de votar nuevamente por el PRI. En el 2006 voté por el PAN; en aquel momento en que ganó Calderón, yo recuerdo que incluso fui al CEN del PAN donde se festejó el aparente triunfo y que yo me sentía parte de ese triunfo, y así era.

Y te puedo decir incluso, me lo han preguntado por un tuit que subí con respecto a Andrés Manuel donde yo decía que cómo era posible que cuestionara la democracia de nuestro país, que pusiera en tela de juicio a nuestra democracia, pero hoy día me doy cuenta que la historia le ha dado la razón; y de que lo que él decía fue lo que pasó.

Como la reforma energética, él siempre estuvo en contra y dijo que no iba a favorecer a los mexicanos, que íbamos a perder definitivamente nuestro petróleo, que íbamos a tener gasolina más cara, gas más caro —cuando se suponía que iba a favorecer a los mexicanos—, y él fue el único que siempre se opuso y hoy la historia le da la razón.

Cuando él habló de un fraude, todo mundo decía que no aceptaba los resultados; y hoy día te das cuenta que efectivamente hubo un fraude.

Entonces, sí he cambiado mi postura, porque soy pragmático y tengo que acomodarme a la situación y tengo que buscar el beneficio, cuando uno ve que no están saliendo las cosas como uno pensaba y que la gente no ha respondido como uno espera.

> ¿Te decepcionaron tus presidentes?

Sí, definitivamente. Y no soy el único decepcionado. Somos miles y millones de mexicanos que estamos decepcionados de quien nos representa, de quienes son nuestros políticos, de quienes les dimos la confianza; de todos los gobernadores, de lo que han hecho.

Definitivamente, una decepción tremenda que ha causado un enojo en el país. Dicen que un país tiene el gobierno que se merece; yo no creo eso, yo creo que en México nos merecemos un mejor gobierno.

> Decías que no hay representación del medio artístico en el Congreso, ¿y qué hay de la diputada Carmen Salinas, por ejemplo?

No sé, la verdad. Yo a Carmelita le tengo mucho respeto por la carrera histriónica que tiene, es una de las actrices de mayor trayectoria en nuestro México y también como mujer merece todo mi respeto.

Sin embargo, hablar de su carrera política, pues no puedo, porque no la conozco. No conozco qué iniciativas ha presentado, nunca la he escuchado en tribuna, nunca nos ha reunido al gremio artístico para darnos algunas iniciativas o propuestas.

> En la discusión de la reforma energética hubo un diputado del PRD, Arturo García Conejo, que se desnudó en tribuna para protestar. Yo te pregunto, con el contexto del show que tú haces, ¿serías capaz de desnudarte, si es necesario, en la tribuna de San Lázaro?

Mira, no sé de lo que sería capaz. El hacer la analogía porque yo tengo un show, siento que no viene al caso. Si él llegó a ese grado, está bien; si lo hizo para llamar la atención, me parece que cuando tienes que defender tus ideales y tus convicciones cualquier cosa es válida. Y no sé qué haría. Me estás preguntando cosas de suposiciones que no te puedo responder. Y lo que hace cada persona en particular me parece responsable, siempre y cuando no dañes los derechos de terceros.

Estoy de acuerdo de manifestarse con cualquier forma de manifestación, siempre y cuando no dañes los principios o los derechos de terceros; incluso, las manifestaciones en las calles, estoy a favor de ellas, siempre y cuando no obstruyan el transito y la circulación, ni la actividad política y social y económica.