‘MC irá al basurero de la historia’; Yeidckol Polevnsky
Morena busca arrasar en esta elección en Jalisco para desplazar a Movimiento Ciudadano como fuerza política hegemónica en el estado. Su delegada, Yeidckol Polevnsky, asegura que se convertirán en ese contrapeso político del que hasta ahora ha carecido el gobierno de Enrique Alfaro
Luis HerreraLos gobiernos emanados del partido Movimiento Ciudadano (MC) han suscitado una “profunda decepción” entre los jaliscienses, por lo que en esta próxima elección esa fuerza política será enviada al “basurero de la historia”, asegura Yeidckol Polevnsky, quien fuera la lideresa nacional de Morena.
Polevnsky, quien funge actualmente como delegada en Jalisco del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, señala que la elección de Jalisco tiene la peculiaridad de que el gobernador, Enrique Alfaro Ramírez, es también en los hechos un dirigente partidista, pues es el verdadero mandamás de Movimiento Ciudadano.
“Esta es una elección muy importante no solo porque el estado es un estado muy importante, sino porque aquí tenemos gente que tiene las peores prácticas. (…) MC no tiene como presidente al que dice ser presidente de MC (Clemente Castañeda Hoeflich), ni quien lo conozca; el que realmente opera como presidente de MC es el que cobra de gobernador y es algo terrible porque es una elección de Estado”.
“La cantidad de dinero que están metiendo en todas partes, la entrega de tinacos que tenemos documentada, la entrega de despensas, la forma en la que están operando para comprar la elección es impresionante; la forma en que están corriendo gente de los municipios solo por ser simpatizantes de Morena también es algo que es criminal por decir lo menos”, agrega.
A decir de la entrevistada, hay dos ámbitos en particular en los que los gobiernos de Movimiento Ciudadano se han mostrado muy ineficientes: el combate a la corrupción y la inseguridad.
“Ver el nivel de corrupción que hay en este estado, la falta de resultados, el nivel de inseguridad, porque tú tienes un estado que es primer lugar en desaparición de personas y en fosas clandestinas a nivel nacional, no es más que una vergüenza y una muestra clara de que no hacen bien el trabajo. (…) Yo encuentro que en el caso de Jalisco muchos empresarios están aterrorizados por el tema de la inseguridad pero eso es una falta de voluntad, de compromiso o una alianza con la gente que no debe ser y que permite que el crimen organizado crezca en la forma en que ha crecido”.
Estado guinda, asegura Polevnsky
Según las proyecciones de la delegada, esta elección representará un punto de inflexión para Morena en Jalisco, pues se convertirá en una fuerza política de primer orden en el estado, y así, en ese contrapeso político del que hasta ahora ha carecido el gobierno alfarista.
“Nosotros lo que deseamos es tener gente que no tenga precio y que no trabajen a modo, pero te voy a decir, no los de Morena, los de todos los partidos, yo no siento que ningún partido haga contrapesos ni que se presente como oposición y eso es realmente penoso; este Gobierno necesita una oposición; (…) yo creo que el gobernador ya está muerto (políticamente), con la misma contundencia te diría que en la misma forma que Lemus ya perdió, porque moralmente está derrotado”, acusa.
De hecho, Morena tiene impugnada la candidatura de Pablo Lemus Navarro, de MC, por la alcaldía tapatía.
Los argumentos del partido guinda son que el emecista ya se reeligió como alcalde de Zapopan, por lo que ya no puede reelegirse una vez más, y porque se registró en dos candidaturas al mismo tiempo, pues inicialmente contendería por una diputación.
Los morenistas están esperando que Jalisco se pinte de guinda en estos comicios, pues aseguran que tienen posibilidades de ganar entre 85 y 90 municipios (de 125 totales), lo que acabaría con la hegemonía que hasta hoy tiene el partido naranja.
“En verdad creo que hay que mandarlos pero ya al basurero de la historia, creo que estos naranjas se volvieron efectivamente, como ya todo mundo lo dice, una naranja podrida, y mucha gente confió en ellos y creyó en ellos porque los vinculaban con Andrés Manuel López Obrador, porque se robaron hasta la aguilita que era el símbolo que lo había tomado como insignia el presidente de la República en años pasados (…) sin embargo pues no: han sido una profunda decepción”.
“El gobernador prefiere pelearse con el presidente en lugar de gobernar, y todo lo que agarra lo dificulta, mientras en la CDMX el tema de las vacunas ha sido un éxito, aquí ni eso pueden aprender a hacer, ni eso les sale bien”, agrega.
Rasgos autoritarios
Los morenistas, dijo la delegada Polevnsky, no reproducirán el tipo de comunicación que ha establecido Alfaro Ramírez con los jaliscienses a base de “regaños”; e indicó que encuentra “rasgos autoritarios“ en el mandatario.
“Creo que de eso no tiene duda ni propios ni extraños, lo veíamos desde fuera y viéndolo aquí hay que ver su gesto, su actitud, es una actitud soberbia, además tiene siempre un gesto de enojo, está enojado con la vida, pelea con todo mundo, yo no sé si cree que todos son sus esclavos porque quiere regañar a todo mundo de una manera insultante y vergonzosa. No saben qué es la democracia, que aquí todos somos iguales y que todos tenemos los mismos derechos y que no puede venir un señor que porque tenga sueldo de gobernador que se quiera sentir superior a los demás. Nosotros (…) creemos en la igualdad de derechos y en el respeto digno a todas las personas”.
Finalmente, Polevnsky Gurwitz aseguró que la materia electoral siempre ha estado entre sus facultades como delegada de Morena, por lo que las gestiones que desarrolló en ese ámbito el otro delegado morenista, el senador José Narro Céspedes, debieron ser fruto de una “confusión”.
“Yo estoy nombrada desde el año pasado como delegada en el estado; al senador Narro se le dio este año un nombramiento para que trabajara con los compañeros del partido, precisamente para que trabajara en la unidad de esos compañeros (…), no sé en qué momento se confundieron y se les ocurrió que podían tener algo que ver en los temas electorales, por supuesto no tenían facultades para ello, (…) en sus funciones no estaba ni dar nombramientos ni entrar ni participar en temas electorales”.