El segundo aumento al precio de las gasolinas, el que estaba programado para el 3 de febrero y que se replanteó para hoy viernes, podría quedar en suspenso.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) aún revalora la aplicación del incremento del 8 por ciento al precio de los combustibles que se había proyectado en la cuenta de ingresos al erario de la Federación.
Sin argumentar las razones, el propio secretario de Hacienda, José Antonio Meade, luego de reunirse con el titular de Pemex, José Antonio Gonzalez Anaya, informó al Senado de la República la posibilidad de posponer hasta nueva fecha el aumento programado para el precio de los combustibles.
No lo dijo el secretario Meade, pero se presume que la causa de la postergación de esa medida oficial -conocida popularmente como gasolinazo- podrían ser las protestas ciudadanas que se vivieron en todo el país, entre el 5 y el 8 de enero pasados, luego de la aplicación de un incremento de 11 centavos al precio de gasolinas.
Y no es para menos, pues las movilizaciones que se presentaron en las principales ciudades de 14 estados del país, en protesta por el incremento al precio de los combustibles, dejó un saldo de al menos 600 detenidos, siete personas muertas y pérdidas económicas, por saqueos de más de mil 922 millones de pesos.
De acuerdo a la evaluación de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), durante las manifestaciones contra el gasolinazo del 5 de enero pasado, fueron un total de 681 tiendas departamentales en todo el país las que sufrieron saqueos, en su mayoría ubicadas en los estados de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Estado de México y en la propia Ciudad de México.
En los estados de Querétaro, Morelos, Chihuahua, Chiapas, Michoacán, Estado de México, Tlaxcala, Hidalgo y Tamaulipas, las protestas por el gasolinazo llevaron a diversas agrupaciones sociales y políticas, así como a grupos de ciudadanos independientes, al bloqueo de carreteras, causando pérdidas económicas al transporte de mercancías y de pasajeros por el orden de los 120 millones de pesos.
Plantean modificar Ley de Ingresos
Desde la Cámara de Senadores se han escuchado voces como la del legislador Mario Delgado Carrillo, del PRD, que ha reclamado un cambio en la política de precios de los combustibles dictada desde la SHCP.
“Debemos modificar la redacción de la Ley de Ingresos 2017 y eliminar la facultad discrecional que tiene la Secretaría de Hacienda, para lograr revertir y detener la política de gasolinazos”, dijo el senador por la Ciudad de México.
Por su parte, el senador Francisco Búrquez, vicecoordinador económico de la bancada del PAN, propuso “eliminar los impuestos especiales a las gasolinas y presionar en el Congreso de la Unión para adoptar medidas que terminen con los altos costos de combustibles”.
El gasolinazo que debería -de acuerdo a lo programado- entrar en vigor hoy viernes, contempla incrementos de precios en relación a los de diciembre del año pasado, del 14.2 por ciento a la gasolina magna, 20.1 por ciento a la gasolina premium, y 16.5 por ciento al diésel.
…Y después la liberación
Dentro del programa de ajustes a los precios de los combustibles, la SHCP no solo contempla aumentos graduales a los precios, a fin de homologarlos a “las referencias internacionales para las gasolinas Magna y Premium, y el diésel”, sino que también se contempla la liberación por etapas de precios en todo el país.
De acuerdo al programa de la SHCP, a partir del 30 de marzo próximo el precio de las gasolinas comenzará a liberarse, para terminar el 30 de diciembre.
El Gobierno federal ya no tendrá ninguna injerencia, es decir, el precio de las gasolinas y el diésel estará determinado por la ley de la oferta y la demanda.
La gasolina se comenzará a vender al precio real, sin la aplicación de subsidios y sin el dominio monopólico que desde siempre había mantenido Pemex, permitiendo que sean empresas privadas las que comercialicen los combustibles.
Problema político
Para el senador Francisco Búrquez, el problema de los gasolinazos tiene solución.
“Es un problema político que solo requiere un poco de intención del Ejecutivo para evitar más sacrificios económicos a la población. Todo es cuestión de voluntad política por parte del Ejecutivo”, detalló Búrquez.
El senador por Sonora explicó que el aumento al precio de las gasolinas en realidad sí se puede evitar, pues la mayor carga del precio se debe a los impuestos que el propio Gobierno federal aplica a los consumidores finales.
“Es un robo en despoblado lo que hace el Gobierno federal con el precio de las gasolinas, pues además del Impuesto al Valor Agregado (IVA), la gasolina se tasa con un cobro de impuestos que representa cinco pesos por cada litro, lo que en realidad es un impuesto excesivo que no tiene por qué estar pagando el consumidor final.
“El impuesto aplicado al costo de la gasolina no solo termina pagándolo quienes tienen carro, sino que es una carga económica que terminamos pagándola todos los ciudadanos: empresas y trabajadores, lo que repercute en aumento a los precios”.
Explicó que si insisten en la política de no bajar los impuestos al consumo de gasolina se agravará la inflación, y combinado con la depreciación del tipo de cambio, se creará la tormenta perfecta.
“(Es) como si el Gobierno federal estuviera quitándole a los ciudadanos 300 mil millones de pesos al año por impuestos especiales”.
Más y más cara
De acuerdo a lo programado, hoy deberían entrar en vigor estos incrementos de precios:
14.2 por ciento incremento a gasolina magna
20.1 por ciento para la gasolina Premium
16.5 por ciento incremento al diésel