El candidato a la Presidencia de la República José Antonio Meade, afirmó que aunque la actual Administración logró reducir la violencia en los primeros años del sexenio, el problema se agravó en 2016 y 2017, por lo que aseguró cambiará el plan anticrimen.
Ante empresarios del sector comercial y turístico, el líder de la coalición Todos por México aseguró que la estrategia de seguridad debe replantearse y empezar a enfatizar la reconstrucción del tejido social.
“Claramente, un elemento vinculado con el Estado de Derecho es la seguridad. La primera obligación que debiera tener un Gobierno es salvaguardar la integridad física y la integridad patrimonial”, afirmó Meade, quien enfatizó, además, que se deben activar mecanismos que faciliten la confiscación del dinero y las armas que llegan a la delincuencia, provenientes de Estados Unidos.