Un día después de la inauguración de la novena Cumbre de las Américas, organizada por el Gobierno de Estados Unidos, la comitiva que encabeza el secretario de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, voló hacia Los Ángeles para participar en el encuentro y otras actividades en representación del mandatario mexicano.
El lunes pasado, Andrés Manuel López Obrador confirmó su postura de no ir al evento, que este año se realiza bajo el lema “Construyendo un futuro sostenible, resiliente y equitativo”, por no incluir a los gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
El propósito de la cumbre es reunir a los jefes de Estado del continente para analizar y discutir los problemas, desafíos y oportunidades que presenta la región y encontrar soluciones conjuntas.
En representación del Gobierno de México, acudirá el canciller Marcelo Ebrard, junto a otros funcionarios, entre ellos, el jefe de la Unidad para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Roberto Velasco Álvarez.
También asistirá la secretaria de Economía, Tatiana Clouhtier, al igual que otros funcionarios de áreas económicas convocados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Además de la Cumbre, Estados Unidos anunció la realización de otros tres foros oficiales: el Noveno Foro de la Sociedad Civil, el Sexto Foro de Jóvenes de las Américas y la Cuarta Cumbre de CEOs de las Américas.
Algunos de estos encuentros también están incluidos en la agenda de la delegación mexicana, así lo dio a conocer Velasco Álvarez en un mensaje que compartió en sus redes sociales, en el que agregó su participación a la Declaración de Los Ángeles sobre Protección y Migración.
Respaldo a primer mandatario por postura sobre Cumbre de las Américas
En una columna publicada ayer en el periódico Excelsior y escrita por Ebrard Casaubon, destacó la importancia de hacer una nueva reflexión en cuanto a si resulta pertinente, posible y deseable un proyecto de integración entre las naciones del continente americano.
“Pese a los esfuerzos de las diplomacias mexicana, estadounidense y de los tres países excluidos para acercar posiciones, no se alcanzó un punto de acuerdo y, en consecuencia, Cuba, Venezuela y Nicaragua quedaron fuera de la convocatoria a la reunión hemisférica, con el argumento de que carecen de regímenes democráticos, característicos del resto de la región”, acusó.
Dijo que aunque algunos observadores han interpretado esta postura como una decisión motivada por la ideología de izquierda del Gobierno de México y un aparente respaldo del primer mandatario a “dictaduras latinoamericanas”, defendió que lo que ha hecho México “va más allá”.
“Expresado con otras palabras, el Presidente defiende así el principio de no intervención y acusa las contradicciones del principio de intervención selectiva.
“Lo hace por un tema de valores y principios, sí, pero también como un cálculo estratégico y con la vista puesta en la construcción de un arreglo inédito de relaciones políticas y económicas en el continente americano para el siglo XXI”, detalló.