Representantes de asociaciones de personas deportadas entregaron una carta al virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para pedir que haya diálogo con ellos y puedan crearse oportunidades en México para quienes han salido o fueron expulsados de los Estados Unidos.
Israel Concha, fundador y director de la organización New Comienzos, señaló que durante tres años han buscado un acercamiento con la administración del presidente Enrique Peña Nieto, pero nunca obtuvieron respuesta, por lo que tienen esperanza de que López Obrador sí pueda recibirlos.
“Son momentos muy difíciles para nuestra comunidad migrante porque ahora más que nunca están deteniendo a nuestra gente en Estados Unidos, separando familias, al momento de regresar a México, de cierta manera, es muy difícil la reinserción a la sociedad mexicana.
“Pero estamos muy esperanzados por este nuevo gobierno; aunque tocamos puertas por más de tres años y nunca se abrieron, realmente creemos en este nuevo gobierno. Por eso hicimos un pronunciamiento a nuestro presidente electo, AMLO, para que se acerque a nosotros, escuche nuestras historias y se dé cuenta de que, como él, somos mexicanos que quieren lo mejor para el país”, comentó Concha en entrevista.
El activista pidió al nuevo gobierno no olvidar que los migrantes envían miles de millones de dólares a México cada año, por lo que es justo que al ser deportados reciban el apoyo de su país para que puedan salir adelante.
Gustavo Lavariega, miembro del colectivo Deportados Unidos en la Lucha, comentó que la comunidad deportada en México requiere apoyo en vivienda, en salud, en la reanudación de los estudios y, en general, que se les ayude a reinsertarse nuevamente en el país.
“No se han cumplido las promesas del gobierno, hay muchos trámites, mucha burocracia. A pesar de que en la ley la Ciudad de México es una ciudad refugio, eso de que somos población vulnerable, deberían transmitirlo también a los empleados porque si presentamos un documento en inglés, por ejemplo, un certificado de preparatoria, nos dicen que no sirve para nada”, acusó Lavariega.
La comunidad de deportados en México entregó una carta en la casa de transición de Andrés Manuel López Obrador, en la colonia Roma, en la que solicitan que se les dé un recibimiento digno, con atención a requerimientos de subsistencia, como alimentación, vestimenta y alojamiento para los primeros días después de su deportación.
Piden también facilitar el acceso a documentos de identidad para poder acceder a un empleo o al sistema de salud o de educación; tener derecho al trabajo y a un apoyo económico para crear oportunidades de autoempleo.
Solicitan también tener acceso a servicios de salud especializados; a programas especiales para adquirir o arrendar una vivienda; apoyo para la reinserción de niños y jóvenes que estudian, en las escuelas del país; asesoría y representación legal para la reunificación familiar; y la realización de mesas de diálogo para exponer las necesidades de la comunidad deportada.
Pidieron también que en las negociaciones con Estados Unidos se ponga sobre la mesa la necesidad de una reforma migratoria integral.
Además, invitaron al virtual presidente electo a conocer la zona aledaña al Monumento a la Revolución, donde se ha creado un núcleo de población deportada que ha bautizado la zona como “Little L.A.”, donde trabajan y viven personas deportadas que han ido conquistando el espacio, al establecer negocios bilingües u ofreciendo servicios a quienes han sido repatriados a México.
