Millennials aspiran al senado
Citlalli Hernández, Pedro Kumamoto y Luis Ángel Gutiérrez, tres aspirantes al Senado y menores de 30 años quieren demostrar que en la política no hay edad. Con propuestas de devolver su trabajo a las calles y ser austeros pretenden convencer a los electores
Fernanda Muñoz[kaltura-widget uiconfid=”38728022″ entryid=”1_0f8bzgbh” responsive=”true” hoveringControls=”false” width=”100%” height=”75%” /] Los jóvenes son el futuro. Eso lo demuestran Citlalli Hernández, Pedro Kumamoto y Luis Ángel Gutiérrez, tres candidatos, menores de 30 años, que aspiran a llegar al Senado para inyectarle nuevos aires a la política mexicana.
Aunque aceptan que es un camino complicado, también destacan que llevan consigo ventajas como lo es devolver el sentido de legislar desde la calle, escuchando a los ciudadanos, así como regresar a la austeridad, rebajando sus sueldos en caso de ganar.
Hernández postulada por la coalición Juntos Haremos Historia en la Ciudad de México, Kumamoto, el independiente de Jalisco, y Gutiérrez impulsado por Nueva Alianza en Querétaro, reflejan que para participar en la política la edad no tiene que ser un obstáculo ni una limitante.
Citlalli, la izquierdista de corazón
Con 14 años, la vida de Citlalli Hernández cambió luego de ver a gente derramar lágrimas por el desafuero de Andrés Manuel López Obrador, uno de los procesos más famosos en la historia política.
Antes de que la ahora aspirante de la Ciudad de México al Senado por la coalición Juntos Haremos Historia asistiera al Zócalo de la mano de su padre, la entonces adolescente ya había escuchado en su casa frases referentes al acontecer político en el país.
“Cuando dio su discurso, que además generó muchísima fuerza y muchísima vibra en el Zócalo, y cuando regresa con ‘los quiero desaforadamente’ con un humor que generaba muchísimas reacciones en las personas, me impactó ver a la gente llorando y gritando indignada”, recuerda la aspirante tras admitir que a poco tiempo de terminar la primaria decidió escribirle una carta a su profesora, simpatizante de Vicente Fox, argumentándole que él no era el cambio que México necesitaba.
Admite que después de asistir a ese evento, decidió que, sin saber cómo ni cuándo, quería hacer algo para transformar las cosas, para ayudar a su gente. Con eso en mente, Citlalli llegó a la conclusión de que estudiar periodismo era la clave para hacerlo realidad.
Aunque ahora ha dejado su profesión de lado, reconoce que algún día le gustaría volver a ejercer su carrera a pesar de que cuando estudiaba recibía represalias por parte de sus profesores.
“Cuando yo estudiaba ya era activista y desde entonces era simpatizante de Andrés Manuel, y los maestros más comprometidos con el periodismo de oficio de repente me regañaban: es que tú no eres activista, eres periodista”, cuenta Citlalli, luego de reconocer en caso de ganar buscará que exista una relación de respeto entre los medios de comunicación y los integrantes de su partido político.
La simpatizante morenista admite que por tener menos de 30 años de edad y por ser mujer, ha sido doblemente discriminada dentro del campo de la política.
Pedro: el independiente que superó expectativas
Tras ser elegido con 57 mil votos para una diputación de Jalisco hace tres años, Pedro Kumamoto, el joven de 28 años y aspirante al Senado, admite que tanto él como su equipo no creían su triunfo al ser reconocido como el candidato más votado en esa entidad.
“En 2015 pensábamos que una victoria era posible, pero fue tan contundente y tan clara que para nosotros fue algo inesperado”, admite el aspirante, quien asegura que a pesar de haber sido señalado como tercer lugar, nunca se desanimó porque siempre contó con apoyo de ciudadanos.
Aunque admite que en varias ocasiones ha recibido ofertas o insinuaciones por parte de integrantes de partidos políticos, nunca ha aceptado contender dentro de esa perspectiva, pues explica que no le brindan el interés necesario a la acción de la militancia.
“Me pasaba que a veces coincidía con algunas agendas o programas de partidos políticos, pero al final del día lo que a mí me preocupaba o lo que a mí me terminaba doliendo era que estos proyectos, estas ideas que veíamos en los partidos políticos no se terminaban respetando porque el dinero o el poder podían más que las ideas que generaban”, reconoce.
“Una de las mayores desventajas que tenemos es que no son parejas las contiendas electorales con los independientes porque no tenemos los recursos para poder hacer frente a lo que hacen los partidos políticos”, explica Kumamoto.
“Entonces, ¿cómo se puede solventar eso?, con mucho trabajo en la calle, tocando puertas, yendo a los tianguis, no descansando. El ser joven permitió que por un lado pudiera tener la energía necesaria para poder sacar adelante este proyecto y muchos más”, admite.
Entre las desventajas políticas que Pedro ha detectado en su trayectoria política, resalta que existe un adultocentrismo muy marcado, pues declara que se piensa que los jóvenes, que las mujeres y que los indígenas o las personas de la tercera edad no hacen política.
Luis: el abogado que busca influir
Aunque Luis no viene de una familia relacionada con la política, a excepción de su abuelo quien fue diputado en el municipio de Tolimán, Querétaro, asegura que a él le gustaría ser recordado como el que perseveró, se esforzó y logró influir en la vida de los queretanos.
Desde que se presentó en el Tribunal Superior de Justicia para liberar su servicio social, y después de trabajar en el Congreso del Estado de Querétaro, el ahora aspirante se dio cuenta que su camino era el de la política.
Tras salir de la universidad y haber estudiado derecho, el primer trabajo de Luis se basó en asesorar a un diputado local del partido Nueva Alianza. Luego de trabajar dos años en el Congreso, el diputado Jesús Galván Méndez le ofreció unirse al partido para que continuara a su lado y le asesora en las cuestiones político electorales, cuando tenía solo 23 años.
Gutiérrez decidió integrarse a Nueva Alianza luego de darse cuenta que el partido vela por los derechos humanos y temas polémicos para la ciudadanos, los cuales él comparte, según explica.
“Leyendo los estatutos y documentos básicos del partido, encajo en la ideología liberal que el mismo maneja, y no es una cuestión conservadora, siempre vela por los derechos humanos y en temas polémicos como el aborto o la legalización de las drogas. El partido nunca se manifiesta con una política en contra o a favor. Siempre trata de ver el derecho fundamental”, admite el aspirante de 27 años.
Entre los puntos que Luis Ángel Gutiérrez menciona se deberían pulir, está el de la capacitación de los maestros que no pasaron el examen que se les solicita para seguir ejerciendo legalmente, y sigan capacitándose; y que el maestro recién egresado de la escuela normal pueda aspirar a puestos altos sin tener que escalonar lugares.