Para los peatones que circulan por las colonias Condesa, Roma o Polanco es común, de unas semanas para acá, encontrarse decenas de bicicletas grises con naranja de la compañía Mobike que les impiden el paso.
En completa “anarquía” los usuarios pueden estacionar en el lugar que quieran las bicicletas, ya sea en una banqueta, en un paso peatonal, en medio de una ciclovía e incluso en rampas para discapacitados.
La “resistencia civil”, como los vecinos le llaman, es una reacción a la postura que adelantó el jefe de gobierno, José Ramón Amieva, quien propuso el pasado martes la prohibición de publicidad en las bicicletas y la creación de una aplicación en la cual la ciudadanía pueda enviar quejas y responsabilizar a los usuarios por el mal uso de las mismas.
Para Rafael Guarneros Saldaña, de la Asociación de Residentes de la Hipódromo Condesa, el mensaje del Jefe de Gobierno no responde a sus demandas de transparentar las obligaciones que tienen las empresas y de conocer los resultados de la “prueba piloto” que se hizo.
El objetivo de los vecinos y residentes de las colonias Hipódromo Condesa, Juárez y Roma es evitar que en el coletazo de fin de sexenio la Secretaría de Movilidad (SEMOVI) consume un contrato multianual con dicha empresa que obligue al próximo gobierno de Claudia Sheinbaum a respetarlo y permitir su operación.
Con la petición de que se sometan al ordenamiento, hace tres semanas los vecinos entregaron un documento dirigido al jefe de gobierno, José Ramón Amieva en el que denuncian la “absoluta anarquía” con la que funciona Mobike, pues permite que los usuarios que utilizan las bicicletas, las dejen sin anclar en cualquier punto.
“El concepto de esta modalidad es que el usuario puede dejar la bicicleta en cualquier banqueta, parque, camellón, rampa para minusválido, acceso a los edificios, casas y negocios mientras no se salga del perímetro que arbitrariamente negociaron con el gobierno de la Ciudad de México”, detallan en el documento.
Por esta razón, para los vecinos, más que una estrategia que ayuda a la movilidad, las bicicletas en renta son un negocio redondo para la empresa china.
“Mobike negoció con bandera de movilidad pero ha generado anarquía; su estrategia comercial va sobre el segmento de usuarios del Metro y transporte público, no sobre los automovilistas”, precisan en el oficio presentado a una carrera finales de septiembre.
Lo que solicitan al jefe de gobierno, es que se abran al público las presuntas pruebas piloto que pasaron estas bicicletas, así como los monopatines eléctricos en renta que se observan en la calle, que se instalen mesas de trabajo en las que participen los vecinos de las colonias afectadas en las que funcionan dichas bicicletas y patines; además, se publiquen en la página de internet del Gobierno de la Ciudad de México todos los documentos presentados por Mobike y las otras empresas beneficiadas con la prueba piloto que se publicó en la Gaceta Oficial del 14 de marzo de 2018.
Exigen también que se publique la póliza del seguro de cobertura amplia que protege al usuario, así como el padrón de bicicletas que han participado en la prueba piloto.
“Hemos visto los números de serie, hemos encontrado por ejemplo bicicletas con el número o folio 0030 pero también hasta el 7900, es necesario saber cuántas son las que están funcionando”, explica Rafael Guarneros.
Uno de los temores de los vecinos es que la licitación (si es que la hubo) se haya ejecutado en lo “oscurito” y que haya servidores públicos involucrados empujando este negocio con la falsa bandera de movilidad para la capital.
“Seguramente hay servidores públicos involucrados, por eso pedimos la intervención de la jefa de gobierno electa, Claudia Sheinbaum Pardo para que no entregue la vía pública, se involucre y evite que se consume el negocio de alguien porque una vez firmada la concesión por diez años, difícilmente la va a poder tirar”, plantea el activista.
También con organizaciones de peatones para defender el espacio vital de las banquetas. Mobike, es una compañía china que no requiere de cicloestaciones, como en el caso de Ecobici que puso en marcha en la Capital desde el 2010, Marcelo Ebrard.
Sin embargo, el concepto que le permite a cualquier persona utilizar una bicicleta para transportarse hasta el Metro o Metrobús y dejarla en ese lugar sin necesidad de acudir a una estación, está generando caos por falta de regulación.
En febrero de 2018 llegó a la Capital en la zona de Polanco, en la delegación Miguel Hidalgo.
Actualmente se les ve en otras zonas como las colonias Juárez, Cuauhtémoc, Roma, Hipódromo Condesa, Condesa, Nápoles y Del Valle.